Doblas: dolor y conmoción por la muerte del intendente

En la mañana de ayer, en Santa Rosa, falleció el intendente de la localidad de Doblas, Fabián Héctor Zabala, de 57 años. "Piche" era jefe comunal desde el 10 de diciembre de 2015 y en 2019 logró la reelección. Sus restos fueron velados horas después en el Concejo Deliberante previo a su camino final al cementerio local.

 

Víctima de una enfermedad oncológica, Zabala debió ser ingresado en los últimos días en una clínica santarroseña, agravada su enfermedad de base por comorbilidades que impidieron su recuperación.

 

Doblense de corazón, peronista y camionero en sus orígenes, llegó de grande a la arena política y su pueblo lo eligió dos veces consecutivas para liderar el gobierno local. La gente y su calidad de vida fueron siempre su Norte. La preocupación por las viviendas sociales, los servicios públicos y la salud lo llevaron a encarar sus gestiones más arduas e, incluso, ser protagonista de alguna pelea con funcionarios provinciales que no hacían -en su criterio- lo necesario por darle a su pueblo las condiciones adecuadas.

 

De gran relación con Carlos Verna, Zabala se convirtió en referente de la Línea Plural. Hace pocos meses visitó en General Pico al ex gobernador y la foto de aquel encuentro se difundió ampliamente en momentos de gran ebullición electoral.

 

La viceintendenta local, Anelisa Gómez, que desde hace unas semanas estaba al frente del Ejecutivo, asumirá oficialmente en la semana como jefe comunal de Doblas.

 

Solidario y muy querido.

 

Este diario hizo con Piche una entrevista en sus primeros meses de gestión, en 2016. La foto que ilustró la nota fue su longilínea figura junto al camión, del que bajó a la pelea por la intendencia pero que fue su herramienta de trabajo durante toda su vida. Allí estaba su esencia, la del tipo humilde y bueno, familiero, amigo de sus amigos y siempre dispuesto a ayudar, dar una mano, participar en todo lo relacionado con su pueblo.

 

"Siempre voy a acompañar a las instituciones", definió tantas veces. Cuando su gestión no alcanzó, en alguna oportunidad, para reunir los recursos que faltaban, metió la mano en su bolsillo y las cosas se hicieron.

 

Su ausencia fue notable en la última Expo Apícola, realizada hace casi un mes. Como pocas veces se da en este mundo de grietas y envidias, desde el municipio gestionaron junto a la cooperativa de servicios de Doblas (Cosedo) muchas cosas para la localidad. Y en los años que estuvo frente al municipio, Zabala fue a la par. Su salud había dado malas señales y los estudios médicos lo mantuvieron alejado unos días. Una vez conocido el diagnóstico, el tratamiento era su esperanza, la de su familia y de todo Doblas, más la enorme cantidad de pampeanos que lo conocieron a partir de su irrupción en el panorama político.

 

Rodeado de los suyos, Zabala falleció durante el sábado gris, poco después de las 8. De inmediato, la noticia corrió y las redes sociales se llenaron de mensajes de dolor (el gobernador Sergio Ziliotto, intendentes, legisladores y otros políticos y vecinos), todos destacando sus calidades humanas. Lo mejor que Piche se lleva en su último viaje.