Hallan a una joven fallecida: era madre de dos hijos y había usurpado una vivienda

La muerte de una joven madre que residía en una vivienda ocupada y en situación de vulnerabilidad extrema conmocionó a la comunidad de Toay. Ayer al mediodía, Antonella Villalba, de 27 años, fue encontrada sin vida en una precaria casa del barrio “Los Profesionales” que había ocupado hace seis meses. Si bien la policía demoró preventivamente a su pareja, quien la encontró gravemente herida y habría intentado reanimarla mediante maniobras de RCP, la fiscalía investiga el caso como presunto suicidio. En principio, el hombre, de 27 años, no está involucrado en la causa.

 

Según la hipótesis principal del caso, la mujer se quitó la vida, abrumada por la difícil situación personal y familiar que atravesaba. De todos modos, personas cercanas al caso confirmaron a esta redacción que la pareja sostenía “situaciones de violencia sistemática” aunque Antonella había decidido “no presentar denuncias formales por temor a perder la tenencia de sus hijos”, ya que enfrentaba una causa judicial patrocinada desde la Municipalidad de Toay.

 

El trágico episodio ocurrió en una casa de la calle Urquiza, que la joven había ocupado con sus dos hijos de 3 y 6 años a principios de junio de este año. Aquel día dos madres en situación de calle decidieron ingresar a sendas viviendas sociales que permanecían abandonadas y estaban reservadas para personal de salud del hospital Segundo Taladriz.

 

Mujeres vulnerables.

 

El primero de junio, de 2024, Antonella Betiana Villalba Guinder y Melanie Florencia López ocuparon con sus hijos aquellas dos viviendas deshabitadas, acuciadas por una apremiante situación económica que les impedía afrontar el costo de los alquileres. Simultáneamente, informaron sobre su situación y solicitaron ayuda social a la municipalidad. Como respuesta, la autoridad comunal las intimó a desalojar inmediatamente las viviendas, advirtiendo que en caso contrario serían imputadas por usurpación. E inmediatamente cortaron sus conexiones domiciliarias de energía eléctrica y gas natural.

 

Sin embargo, las mujeres decidieron permanecer en esos domicilios y convocaron a los medios para contar su situación. Aunque carecían de aquellos servicios esenciales, al menos podrían cobijarse frente al duro invierno que se avecinaba, explicaron.

 

“Trabajamos diariamente para sostener los gastos básicos y cenar todas las noches, pero sin posibilidades de pagar un alquiler y con nuestros hijos enfermos no podemos seguir viviendo en la calle. Estamos inscriptas en el IPAV, pero podrían pasar diez años antes de que nos toque una vivienda y por eso lo único que le pedimos al intendente es que nos otorgue una casita en comodato, y nosotras nos hacemos cargo de pagar los servicios y darle de comer a los chicos”, contaron entonces.

 

Tres meses después recibieron una notificación desde el Poder Judicial y fueron formalizadas por el delito de usurpación. El 6 de septiembre acudieron a la Ciudad Judicial para sostener una audiencia con la fiscalía, acompañadas por un abogado y referentes de organizaciones sociales y agrupaciones feministas.

 

Avisos previos.

 

Además de los pedidos de Melanie y Antonella, las autoridades fueron alertadas sobre la situación por agrupaciones sociales, mediante notas dirigidas al intendente Ariel Rojas y al defensor de Niños, Niñas y Adolescentes, Juan Pablo Meacca. Desde la agrupación Autoconvocados contra el Ajuste de Milei le enviaron dos cartas al intendente, fechadas los días 10 y 25 de julio, y firmadas por referentes de distintas organizaciones sociales, entre las que figuraban el Desayunador Villa Germinal, Agrupación Todas Somos Andrea, Agrupación Pan y Rosas,el Foro Pampeano por los Derechos de la Niñez y Adolescencia y la RED Par.

 

Por esa vía solicitaban “una audiencia para trasmitirle nuestra enorme preocupación por situaciones de alta vulnerabilidad social que fueron difundidas por medios periodísticos e intercambiar opiniones que permitan acercar respuestas”. Argumentaban que “la recesión económica y los tarifazos” generados desde el modelo libertario están provocando “problemas graves que dejan a millones de familias imposibilitadas afrontar un alquiler.” por lo cual “muchas personas se hacinan en hogares de familiares, cuyos integrantes son mayoritariamente trabajadores informales con haberes por debajo de la canasta básica, o desocupados sin ingresos”.