Preocupación por el trabajo en negro

Con la ley de casas particulares ya vigente los integrantes del futuro gremio pampeano vienen movilizándose para informar y sumar voluntades. Además, se enfrentan a un rubro laboral con mucha informalidad y falta de registración.
Integrantes de la agrupación de Trabajadores de Casas Particulares, que está en formación en nuestra provincia, vienen recorriendo distintas localidades para informar sobre la ley 26844 y afirmaron estar alarmados por la gran cantidad de trabajadores en negro.
Representantes de dicha agrupación, Daniel Moreno, Romina Becerra y Sonia Becerra, señalaron que siguen tramitando la conformación de un sindicato para ese grupo de empleados pero mientras están constituyéndose en una asociación civil para poder impulsar distintas actividades, difundir los alcances de la ley vigente y luchar por los derechos de quienes trabajan en casas particulares.
Moreno dijo que ahora se vienen recorriendo las localidades pampeanas para entregar folletería y atender las consultas que se generen en cada lugar. Hasta ahora ya visitaron varias localidades, entre ellas Vértiz, Speluzzi, Alta Italia y Embajador Martini. Luego seguirán por Ingeniero Luiggi, Realicó, Rancul, Caleufú y La Maruja. En una campaña de información sobre la mencionada ley.
"Hay mucha gente que no está informada", afirmó Sonia Becerra, y entonces no saben los alcances de la normativa y sus posibilidades de reclamo. Si embargo, en muchos casos, antes de hacer un pedido al empleador prima el miedo al despido.
Moreno consideró que para la registración se busca llegar al empleador y darle a conocer los beneficios que tiene por blanquear al trabajador. Esta ley 26844 le brinda a la patronal una deducción del impuesto a las ganancias que tiene en sus haberes, y esa es una condición que muchas veces se desconoce.

Sondeo.
Todavía es difícil saber cuántas personas trabajan en casa particulares, pero desde la agrupación piensan realizar un sondeo por el norte y confeccionar un padrón, indicó Becerra.
"Nos llama la atención la cantidad de personas no registradas", dijo Moreno, y más en las localidades chicas. Con el agravante en muchos casos de las malas condiciones laborales en las que se encuentran y "lo indigno de los salarios" que perciben.
Hay muchos patrones que no quieren poner a su empleado en blanco, pagar los aportes de obra social y jubilación ye incluso tener un seguro laboral de riesgo, manifestó Becerra. Valores de blanqueo, dijo Moreno, que no son onerosos en comparación con rubros como empleados de comercio, metalúrgico, etc.
El mínimo que está definido por acuerdo, desde septiembre del año pasado, es de 43 pesos la hora. Un valor vigente que se modifica según la cantidad de horas, que se define en tres categorías.
Pero también, considerando los incrementos de precios que se produjeron por la inflación, los trabajadores pueden manejarse por un "valor de mercado" que se establece al comparar los salarios que se están cobrando en el sector ya que se trata de la prestación de un servicio, advirtió Moreno.
La conformación de un sindicato es bien vista, aseguró Becerra, sobre todo en esta ciudad. Y ya se ve la respuesta de la gente que consulta.