Cooperativas buscan sumar recursos y más prestaciones

Como ya ha acontecido en otros momentos de grandes dificultades a causa de la macroeconomía, las cooperativas de servicios públicos no piensan en ajustes ni achiques, y por el contrario muchas de ellas están trabajando en ideas y diseños de nuevas actividades que no sólo las apuntalen, sino que además permitan ofrecer más posibilidades y crear puestos de trabajo.

La tendencia se viene acentuando en los últimos años y hoy es tema común. Apuntan, especialmente, a alguna actividad productiva que cubra vacíos en cada localidad. Algunas ya lo han puesto en marcha, otras lo sueñan y además se vislumbra una posibilidad de integración para hacerse más fuertes.

Esta última semana, el tema fue de principal análisis y debate con el subsecretario de Cooperativas y Mutuales de la provincia, Fabián Bruna, que visitó Caleufú y Villa Mirasol y se topó con el tema.

De recorrida.

En Caleufú, el subsecretario fue recibido por el presidente de la Cooperativa de Servicios Públicos (Cosercal), Alejandro Delsol, y el gerente, Edgardo Enrici. Los anfitriones mostraron el avance de la obra de ampliación y remodelación del edificio central de la entidad, que por etapas permitirá disponer de mayor espacio para la administración, una amplia sala de reuniones, gerencia, sanitarios y cocina y, particularmente, un espacio moderno y cómodo para la atención a los asociados.

Más tarde, analizaron temas con la actualidad de la entidad y la difícil situación que atraviesa todo el movimiento encargado de la distribución de energía eléctrica. Además, Delsol y Enrici impusieron a Bruna sobre los importantes pasos dados en telecomunicaciones, llegando con red de fibra óptica propia no sólo a los socios de Caleufú, sino también a Pichi Huinca y La Maruja, sus interconectadas.

En esas dos localidades, la Cosercal puso a disposición de las vecinas y vecinos que allí viven, un moderno servicio de internet y televisión vía plataforma, ofreciendo la importante alternativa a la única vía posible hasta ahora, la onerosa televisión satelital.

Los dirigentes mostraron la intención del Consejo de Administración de encarar alguna actividad productiva, revelando algunas ideas aún no concretadas, pero la convicción de que la entidad debe abordar un proyecto que deje recursos, proponga disponer de productos que hoy se compran fuera de La Pampa y generen mano de obra.

En Villa Mirasol, el presidente Carlos Tassistro y la vicepresidenta, Mariana Arce, junto a otros consejeros y personal de la cooperativa de servicios públicos dialogaron con Bruna.

En esta localidad, las telecomunicaciones están en manos privadas, con servicios que están lejos de tener la calidad que hoy se demanda, y además hay otros productos y servicios de primera necesidad que los habitantes de la pequeña localidad deben salir a buscar a pueblos cercanos.

Sobre esa realidad giró la charla con el funcionario, que tras aportar algunas ideas acordó el inicio de gestiones que serán reveladas en caso de ir fructificando.

La escasa escala de la cooperativa y, por consiguiente, la casi nula capacidad para invertir, requiere de apoyo que debe alcanzarse evaluando posibilidades y con mucha gestión.

Diversificación.

Luego de la larga etapa de sumar las telecomunicaciones, el cooperativismo en general apunta a incorporar emprendimientos productivos o de otros servicios.

La llegada de internet y la televisión por cable junto a la telefonía básica, le dieron a las históricas entidades un salto de importancia en sus prestaciones. Aún cuando la alta tecnificación las mantiene alertas para disponer de lo último en un mercado tan vertiginoso, la regulación de tarifas y los altos costos afectan sus economías, no sólo desde el punto del hoy revolucionado mercado eléctrico.

Se podrían mencionar aquí decenas de iniciativas adosadas a los servicios tradicionales. Los servicios sociales ampliados con enfermería, ortopedia, banco de sangre; los servicios de educación a distancia; los viñedos; alquiler de autos, cocheras y estacionamiento; fábricas de columnas; plantas de envasado de agua y otros son comunes. Y muchos piensan en más, nunca en achicarse ni discontinuar servicios. Una realidad que contrasta con el uso de la motosierra.