Jueves 25 de abril 2024

Los seis crímenes impunes

Redacción 30/06/2015 - 01.30.hs

Tras conocerse que los investigadores de la causa Epifanio no saben cómo continuar con la pesquisa, el fantasma de otros casos no resueltos sobrevuela el expediente cuando aún no se cumplieron dos años del crimen. En las últimas cuatro décadas se contabilizan al menos seis homicidios cuyos responsables aún no fueron hallados. La lamentable lista está integrada por Marta Beviglia, Rubén Pascua, José Luis Steffanazzi, Silvia Liliana García, Verónica Feraude y Matilde Galván de Soloa.

 

Beviglia.
Quizás el caso más parecido al crimen del matrimonio Epifanio, sea el de Marta Beviglia, la mujer que fue asesinada durante la siesta del 10 de julio de 2004. El hecho conmocionó a la opinión pública porque afectó a una vecina común y por el ensañamiento que mostraron los asesinos: le habían golpeado el cráneo contra la pared y la mesa del teléfono, la ahorcaron con el cable del aparato y le cubrieron la cabeza con una bolsa de plástico. Así fue encontrada a las 18 por su hijo, el médico Jorge Moisés, quien llegó después que fuera avisado que su madre no había llegado al comercio que atendía, la regalería Providence, en la calle General Pico. Algunos de los investigadores suponían que los delincuentes buscaron robar una importante suma, pero como se encontraron que la mujer no manejaba mucho dinero, reaccionaron con esa violencia desmedida. Otra versión indicaba que la muerte pudo haberse producido en otras circunstancias, porque los asesinos ingresaron por la puerta de entrada sin forzar nada, lo que podría indicar que Beviglia los conocía y en confianza los dejó pasar.

 

Pascua.
Rubén Pascua fue asesinado en su domicilio de la calle Lisandro de La Torre 352 en pleno centro de Santa Rosa el 13 de mayo de 1986. En esa oportunidad, poco después de la medianoche de aquel día, tres individuos golpearon a la puerta, donde Pascua vivía con su anciana madre. Los sujetos redujeron a la mujer en el living, donde quedaron dos de ellos armados de cuchillos, en tanto el tercero ingresó a la cocina y le disparó con una escopeta en pleno rostro al infortunado hombre. Nunca más se supo nada.

 

Steffanazzi.
José Luis Steffanazzi apareció muerto el 25 de abril de 1993 en las inmediaciones de los piletones de obras sanitarias y el basurero municipal. El taxista tenía 52 años y había desaparecido varias semanas antes. Hubo muchas sospechas, se detuvo a un preso que el día de la desaparición tuvo la mala idea de fugarse y que después se probaría que nada tuvo que ver con el secuestro y muerte de Stefanazzi. Bastan ver sus declaraciones de entonces cuando se hizo cargo de una muerte en la que no había participado. El caso sigue impune.

 

García.
Silvia Liliana García, apareció muerta el 26 de agosto de 1994 en la sección Quintas en cercanías del autódromo de General Pico. Los investigadores no pudieron llegar a dilucidar quién fue el autor del crimen.

 

Feraude.
Verónica Feraude, tenía nada más que 20 años cuando apareció muerta a la vera del camino a Toay el 10 de noviembre de 1996. La habían estrangulado. En principio se juzgó a quien era su pareja, el entonces boxeador Víctor "Yanca" Balquinta y a dos cuñados suyos, pero nada se pudo probar. No obstante "Yanca" fue juzgado por facilitamiento de la prostitución acusado de obligar a Verónica a prostituirse. Fue condenado a 10 años de prisión y estuvo preso menos de la mitad de ese tiempo.

 

Soloa.
El cuerpo de Matilde Galván de Soloa fue encontrado el 30 de octubre de 2001 bajo el contrapiso de una casa ubicada en la calle Entre Ríos. Días después los investigadores determinaron que se trataba de una mujer cuya desaparición había sido denunciada en 1978.

 

El expediente a Buenos Aires
La semana pasada, un cronista de este diario se comunicó con el fiscal General, Guillermo Sancho, para consultarle por el estado de la investigación del caso Epifanio. Las novedades no fueron buenas: los pesquisas pampeanos no saben cómo seguir y por ese motivo, en los próximos días el expediente va a salir de la provincia para ser analizado por un Programa Nacional de Criminalística del Ministerio de Seguridad. "La causa está paralizada porque no hay pistas suficientes para avanzar", dijo Sancho.

 


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