Alberto Cortez ya descansa en Rancul

Las cenizas del cantautor argentino Alberto Cortez llegaron ayer a Rancul, su ciudad natal. Los restos fueron traídos por su viejo amigo Carlos Corvalán desde Rosario y fueron recibidos por sus dos sobrinas, Jimena y Belén García. El emotivo acto se desarrolló a partir de las 16 cumpliendo de este modo el deseo del reconocido cantautor.
Durante la ceremonia estuvieron presentes familiares y amigos del artista, no solo de Rancul sino también de General Pico, Huinca Renancó y Realicó. Esperaron los restos en el acceso a la localidad manteniendo todos los protocolos vigentes y conformaron una caravana para acompañar en sus autos a Corvalán y las sobrinas de Cortez.
Durante la recorrida, primero pasaron por la iglesia de la localidad, que hizo sonar sus campanas a modo de homenaje. Luego se dirigieron a la casa donde nació y se crió Cortez. En la entrada los amigos y familiares llevaron a cabo un breve acto manteniendo el distanciamiento social necesario y allí se pudo escuchar la canción «Distancia», de autoría del compositor pampeano. Además, se contaron algunas anécdotas que tuvieron por protagonista a Cortez, para dar paso seguidamente a la lectura de una nota enviada por la secretaria de Cultura de la provincia, Adriana Lis Maggio.
Finalmente, Corvalán abrazó a las sobrinas de Cortez y juntos ingresaron a la casa para depositar la urna en su vieja biblioteca, ubicada cerca de la ventana de la vivienda, junto con una bandera de España y una foto del músico. Asimismo, se le pidió tanto a los vecinos como a los representantes de los medios que se quedaran afuera para respetar tanto la intimidad de la familia como los correspondientes protocolos sanitarios.
Cortez, nacido en Rancul en 1940 y fallecido en España en 2019, había manifestado como último deseo descansar en la ciudad que lo vio nacer. Por esta razón, su entrañable amigo trajo desde Rosario una urna con sus restos y cerró el acto con unas breves palabras. «Traigo a un amigo aquí», dijo emocionado.
La urna fue colocada en un lugar especial de exposición, que permitirá que pueda ser observada por quienes pasen por el frente de la casa.