"Me cortaron las piernas"

"La verdad que me cortaron las piernas", dice apesadumbrado Brian Silva para graficar la situación insólita que le toca atravesar: desde noviembre de 2017 que la policía le secuestró la moto en un control vehicular y, desde entonces, no se la restituyeron porque el vehículo fue hurtado del interior de la dependencia policial.
Silva, de 26 años, se acercó ayer a esta redacción para comentar su caso, que tiene una denuncia policial y judicial en proceso. "El 24 de noviembre de 2017 me pararon en la calle Buenos Aires, frente a Vialidad, y a mí me faltaba el carné de conducir, así que se llevaron la moto a la Seccional Segunda. Y desde entonces no me la devolvieron más, la hurtaron desde la Segunda y nadie se hace responsable, ni la Municipalidad ni la Policía ni la Provincia", lamentó el joven.
La moto, una Guerrero de 110 cc, estaba en la Segunda y fue hurtada allí, según "las actuaciones judiciales sobre hurto" que la fuerza policial inició el 28 de abril de 2018.
"El tiempo pasa y yo sigo sin respuestas. No puede ser que nadie se haga cargo porque yo me quedé sin la moto", dijo Silva, que reclama 33 mil pesos por el valor del vehículo, 6.600 pesos por "daño moral" y 10 mil pesos porque a raíz de no tener su único medio de movilidad tuvo que utilizar taxis y micros urbanos.