Al rescate del papel a través de El Quim

El colegio Elpidio Pérez de esa localidad lleva adelante el proyecto desde hace nueve años. Y sumaron a pueblos vecinos como Lonquimay y Anguil, que tampoco cuentan con medios locales que difundan los hechos de cada lugar.
"En ese año el premio fue pagar todos los meses la salida del diario, pero después se decidió seguir adelante por más que el dinero no siguió viniendo ya que el plazo del premio había terminado. Es complicado por los tiempos y los costos, pero desde 2008 se instauró la materia Periodismo y aunque funciona como un taller de medio módulo (40 minutos por clase), trabajamos para tener nuestra publicación", indicó Ana Paula Bertero, Licenciada en Comunicación Social y docente a cargo del proyecto.

El Quim significa el saber en la lengua araucana, "un nombre que se eligió para darle valor a los antepasados", contó Jana (17). "También tenemos El Quim electrónico, que es un blog donde podemos subir noticias más puntuales y del momento", agregó Iara (17).
Frente al bombardeo permanente que ofrecen los medios online, la televisión y las redes sociales, la salida mensual obliga a los chicos y chicas a darle otro enfoque y elaboración al material que recopilan para cada número.
"Tuvimos que ir cambiando y adaptándonos a los tiempos que corren porque pasaba que cuando íbamos a imprimir las noticias ya quedaban muy lejos, fuera de tiempo, entonces hacemos más un formato revista con noticias atemporales, entrevistas y no hechos tan puntuales para que no queden fuera de lugar", señaló Alina (17).

En Uriburu, como sucede en muchas otras localidades de la provincia, no llegan los diarios nacionales. Y tampoco hay programas radiales específicos del pueblo, entonces una iniciativa como El Quim ocupa un lugar que es valorado por los vecinos.
"Los diarios como La Nación, Página/12, Clarín u Olé no llegan, solo tenemos los diarios de Santa Rosa, entonces la gente se identifica con lo que hacemos porque aparte ya es un proyecto de nueve años del colegio, entonces colabora", dijo Alina sobre la financiación del periódico, que necesita del aporte de los comerciantes y entidades del lugar.
El proyecto también les permite a los alumnos identificarse con los temas que más les interesan, por eso hay secciones bien diferenciadas, como sucede en cualquier diario. "Tenemos Economía, Política, Salud, Deportes, Entretenimiento, Espectáculos; lo que se busca es que todos aporten lo suyo y participen con ganas para que sea variado e interesante", resaltó Enzo.

Para que El Quim salga a la calle se necesita del esfuerzo de todos. El poco tiempo por clase que tiene la materia, la falta de fondos y los costos y tiempos de impresión son obstáculos que hay que sortear todos los años y todos los meses.
"Es difícil porque nosotros lo vendemos pero a un precio módico, lo imprimimos en Santa Rosa y eso significa un monto importante. Además vamos a Anguil y Lonquimay para sumar más notas y también se necesita dinero, por eso necesitamos de la colaboración de todos", explicó Ana Paula.
Al abordar las diferentes noticias se genera también una empatía de los adolescentes con cuestiones importantes para la comunidad como sucedió en años anteriores con el frigorífico de Uriburu, que fue cerrado pero tras enormes esfuerzos de los em-pleados, se rehízo mediante la conformación de una cooperativa de trabajo. Ahora faena nuevamente y está por reabrir la planta de manera oficial.
"Siempre hay temas para tratar que está bueno que tengan una mirada local, por eso se busca hacer reportajes con el intendente o con gente involucrada en alguna cuestión importante como puede ser lo del frigorífico", apuntó Iara.

Los chicos y chicas salen a la calle y buscan "la" noticia. Hablan con la gente, preguntan, miran, cuestionan. Son "periodistas" en su propio lugar, allí donde la vida todos los días también tiene historias para contar. "Gracias a El Quim nos informamos y nos conocemos, y eso está bueno", valoró Florencia, un eslabón de una cadena que en Uriburu tiene voz propia. Y se lee en papel.