"Hoy, el fútbol paraguayo es una vidriera muy grande"
El futbolista pampeano Fernando "Sati" Cafasso quedó conforme con su primera experiencia en el Club Guaraní de Asunción, Paraguay, al que llegó a principios de este año. El araucense, ex Villa Mengelle, que pasó por varios equipos argentinos como Newell's Old Boys de Rosario, Atlético Tucumán y Aldosivi de Mar del Plata, estuvo un par de días en esta localidad y, mate de por medio, mantuvo una charla con LA CHUECA acerca de su momento en el exterior.
"Me quedo pocos días porque el lunes empezamos a hacer una pretemporada medianamente corta, debido a que el 26 de julio comienza el Clausura del torneo paraguayo", comentó Cafasso, al tiempo que explicó que Guaraní es uno de los clubes tradicionales de Paraguay -uno de los más viejos de Asunción-, junto a los más reconocidos como Cerro Porteño, Olimpia y el último campeón local, Libertad.
Sobre la actuación en el Apertura, el pampeano expresó que había sido buena, y que sus aspiraciones pasan por meterse en una copa. "Redondeamos una muy buena campaña, y perdimos el tercer lugar en la última fecha. Pero teniendo en cuenta que hicimos un buen colchón de puntos en el Apertura, si repetimos una buena campaña en el Clausura podemos estar peleando un lugar en alguna copa internacional a fin de año", comentó.
En ese contexto, la realidad del equipo es totalmente diferentes a la del año pasado, en el que tuvo un mal desempeño. "Terminaron muy cerca de la zona de promoción. Tanto que este campeonato lo comenzamos últimos en el puntaje del promedio, pero ahora estamos muy lejos y eso es muy bueno. Se formó un plantel muy competitivo, los dirigentes hicieron esfuerzos, hicieron contrataciones muy importantes y ahora estamos en los primeros planos", dijo, ilusionado con seguir creciendo. Junto a Cafasso, en Guaraní está el ex Boca Juniors Jonatan Fabro, "que es nuestro jugador estrella", además de los argentinos Sebastián Setti y Lucas Nardi, que ahora pasó a Defensa y Justicia.
Al referirse al nivel en general, Cafasso dijo que el fútbol paraguayo "es competitivo, aunque no tanto como el de Argentina. Pero hay muy buenos equipos, como el caso de Libertad, que tiene siete jugadores en la selección".
"Hace diez años -continuó- estaba muy devaluado, pero ahora hay muchos jugadores que de allí se van a un fútbol mejor, como el argentino o el europeo. Hay mucho movimiento y por eso creo que hoy, el fútbol paraguayo es una vidriera muy grande".
Finalmente, destacó el buen trato que recibió desde que llegó. "El plantel es piola, muy buena gente. Por ahí son un poco más cerrados que nosotros, no te invitan a su casa; pero dentro del club te ayudan un montón. La verdad es que me tocó un grupo muy bueno", cerró.
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