"Los chicos dieron clase de manejo"

Varios pilotos corrieron con garra, presionando al rival, pero sin recurrir a maniobras que a veces derivan en toques innecesarios, como en la final de 50 libres y 125 junior, en las que ganaron Diego Acqueveque y Joaquín De La Prida.
Si bien todas las carreras del domingo en Macachín (sexta fecha del año) tuvieron su cuota de emoción, se deben destacar las finales de 125 cc. junior y 50 cc. libres, en las cuales jóvenes pilotos mostraron un manejo atrevido, sin apelar a los toques que terminan siendo groseros.
En 125 cc. junior, la final que protagonizaron Ulises Macali Becerra y Joaquín De La Prida fue sumamente atractiva, que tuvo un desenlace inesperado cuando el primero de ellos se equivocó en la regulación de nafta, que le permitió a su rival poder superarlo justo en la última vuelta.
De La Prida, que de esta forma consiguió su primera victoria del año, largó tercero y cuando logró trepar a la segunda posición presionó a Macali Becerra hasta que este, quizás por exceso de confianza, reguló mal la nafta y quedó lamentándose de la victoria que se le escapó por muy poco.
Ambos pilotos protagonizaron una intenta lucha por el primer lugar, sin caer en maniobras torpes, como a veces suelen verse en el kárting, que derivan en toques innecesarios, y que luego se justifican diciendo que son roces de carrera.
"Quiero dedicarle esta victoria a todo mi equipo. Por fin se nos dio", dijo emocionado De La Prida, quien admitió que si no hubiera sido por el error de Macali Becerra, ya no le quedaba tiempo para alcanzar la victoria.
Otra final que entusiasmó al público de Macachín fue la de 50 cc. libres: el rionegrino Diego Acqueveque alcanzó la victoria después de tener que soportar por varias vueltas el asedio de Matías Menvielle, quien a su vez nunca se dio por vencido y presionó a su rival por diversos sectores de la pista.
Fue emocionante ver competir a pequeños pilotos que se comportan en la pista a veces mejor que un grande, respetando los frenajes, cuidando la cuerda y sin recurrir a artilugios raros. Si bien los triunfos y las derrotas empañan otros aspectos importantes en una carrera, es hora de reconocer a aquellos pilotos que tienen un comportamiento ejemplar en la pista, como sucedió en Macachín.

Volver a ganar.
El pasado domingo, en Macachín, el piloto alvearense Víctor Gómez sumó su tercera victoria del año, en una final cuyos rivales principales, Claudio Andrada y Sebastián Conte, quedaron afuera de la lucha por la victoria.
Andrada, que había largado primero, se chocó una goma en una de las curvas y se retrasó, mientras que Conte, que también supo encabezar el pelotón, debió abandonar.
"Hoy tuve la suerte que me faltó en algunas carreras, en este circuito me tenía mucha confianza. Además, necesitaba ganar para seguir luchando por el título", dijo Gómez.
Gómez agregó: "Ahora hay que trabajar más que nunca porque restan pocas fechas, y porque no se puede dar ningún tipo de ventaja. Espero andar bien también en Guatraché, en donde se correrá la próxima fecha del campeonato".