Otra copa para el Rojo de Doblas

Independiente de Doblas goleó ayer como local a Gimnasia y Esgrima de Darregueira en la revancha de la final por 4-0, y de esa manera se quedó con la edición 2012 de la Copa Presidentes de la Liga Cultural de fútbol. Emiliano Cocco y Emilio Ardohain, ambos en dos oportunidades, marcaron para el Rojo, que en la ida había ganado por 2-1, y que conquistó así su tercera copa, porque la de esta temporada se suma a las que había conseguido en 2008 y 2009.
Ayer, en la revancha, el equipo dirigido por la dupla Pataccini-Narcué logró desnivelar en el complemento, y con un aceitado juego terminó vapuleando a los comandados por Horacio Irurueta.
En la primera etapa el comienzo fue parejo, aunque el local evidenció que quería definir rápidamente el pleito, más allá de que ya había dado un gran paso al ganar en Darregueira. Así, en los primeros minutos el arquero Kinder evitó la caída de su valla en dos oportunidades; la más complicada tras un remate de Wilberger.
Recién a los 18' el Lobo tuvo una inmejorable oportunidad tras un tiro libre de Beneitez, pero la pelota se estrelló en el travesaño. Y luego llegó con un centro de Goroso para Idiart, que logra tocarla, pero llegó Cocco para sacarla casi sobre la línea.
A medida que transcurrieron los minutos, el partido se fue haciendo cada vez más intenso y el calor se hizo sentir en los jugadores. Y en ese contexto pareció ser Gimnasia el que más lo sufrió, porque en los últimos minutos el local tuvo tres oportunidades más.
En el complemento, y tras la apertura del marcador, se abrió el partido y todo fue de Doblas. Iban 5' cuando tras algunos toques en el área, Gehl cedió a Cocco y éste definió ante la desesperación de Kinder. Y a los 17', el recién ingresado Ardohain, en la primera pelota que tocó, aumentó la cifra a dos y Doblas empezó a liquidar el pleito.
A esa altura del partido, el Lobo ya no tenía ideas, y mucho menos reacción, ante los embates del local. Además, a los pocos minutos Kinder le tapó un remate a Ardohain, pero el rebote le quedó a Cocco, que no perdonó y marcó el tercero.
El resto fue sólo para completar. Independiente se floreó y toqueteó la pelota, dejando pasar los minutos, y cuando se lo propuso convirtió el cuarto cuando se iba el partido, tras una jugada rápida que terminó con una definición de Ardohain. Así, el Rojo redondeó una tarde brillante y cerró la temporada con un nuevo título.