Piden 30 años de cárcel para el cura Grassi

"El perro guardián del rebaño era un lobo que los guardaba para su provecho. Ese es un agravante importantísimo", dijo el fiscal General de Morón, Federico Nieva Woodgate, al describir la actitud del sacerdote.
La Fiscalía pidió 30 años de cárcel y la inmediata detención del cura Julio César Grassi, al acusarlo por 17 hechos de presunto abuso sexual y corrupción de tres de los menores que asistían a la Fundación Felices Los Niños que él dirigía. "No hubo complot por parte de nadie", dijo el fiscal Alejandro Varela, a cargo de la acusación, al cerrar un alegato de cinco días ante el Tribunal Oral Criminal 1 de Morón, en donde dio por probado que Grassi abusó de "Gabriel", "Ezequiel" y "Luis", los tres jóvenes denunciantes que estaban a su cuidado. Incluso, la Fiscalía reclamó la inmediata detención del sacerdote ante una eventual fuga.
El Ministerio Público denunció que muchos testigos fueron "visitados" por el cura antes de declarar en el juicio y pidió que se investigue por falso testimonio a un grupo de allegados de la Fundación Felices Los Niños, que beneficiaron con sus dichos al imputado. "Primero fue Susana Giménez y Jorge 'Corcho' Rodríguez, después Canal 13 por puntos de rating y una periodista por cuestiones ideológicas. Después los ex trabajadores de la Fundación y el complot judicial para sostener una denuncia mediática... (Para Grassi) era todo un gran complot, pero no hubo complot de parte de nadie. Los complots eran inventados para sacar del punto clave de la investigación", sostuvo el fiscal Varela frente a los jueces.

Defensa.
Ahora, el tribunal va a escuchar el alegato de las tres querellas y luego a la defensa. Por eso, tras escuchar el alegato, Grassi volvió a defenderse públicamente y vaticinó que sus letrados van a "demoler" la acusación. "Soy inocente y una persona inocente a la que le estén diciendo que le dan seis meses de prisión le duele, porque no cometí ninguno de los ilícitos y delitos que me están imputando", dijo ante los periodistas en la puerta de los tribunales de Morón.
El 23 de octubre de 2002 el programa Telenoche Investiga (TI) difundió un informe en el que un menor, identificado como "Gabriel", afirmaba que había sido abusado por el cura cuando él asistía a la Fundación; otro testimonio, el de "Ezequiel", reforzó las sospechas sobre el sacerdote.
En medio de acusaciones de extorsión de Grassi y denuncias de complot en su contra, la causa avanzó a paso lento hasta que el año pasado, finalmente, el juicio oral comenzó el 18 de agosto: allí no sólo se juzgaría los dichos de "Ezequiel" y "Gabriel", sino también los que aportó en el 2006 "Luis", otro de los menores que asistía a la Fundación, quien afirmó que "el tiempo" lo había ayudado "a animarse" y a relatar los vejámenes que había sufrido por parte del sacerdote. Fue en base a eso, luego de un largo juicio, que el Ministerio Publico de Morón reclamó una condena de 30 años de cárcel para Grassi.
La Fiscalía argumentó su pedido de condena debido a la gravedad del daño causado, "la perdurable angustia perceptible en la audiencia de sus víctimas y también el daño que le ha causado a la institución que él mismo creo que realmente ha ayudado a gran cantidad de chicos". Pero no pidió el máximo penal porque el sacerdote no tenía otros antecedentes, se explicó. "El perro guardián del rebaño era un lobo que los guardaba para su provecho -dijo la Fiscalía-. Ese es un agravante importantísimo", dijo Nieva Woodgate, en una conferencia de prensa posterior al pedido. (DyN)