La firmeza del movimiento cooperativo

El gerente de la Cooperativa Eléctrica de Winifreda, Hernán Camps, habló de la importancia de la fábrica de columnas y hormigón de la entidad, que brinda trabajo a 11 personas y apunta a sumar más empleados. 

“La fábrica de hormigón comenzó a funcionar en mayo de 2023 y luego la de columnas en octubre del mismo año. Hacemos hormigón elaborado puesto en obra a través de un mixer, entregamos en Winifreda y zonas adyacentes, localidades del oeste y localidades alrededor de de la nuestra”, explicó Camps. 

Y agregó que “es un proyecto que hemos ido consolidando, hemos ido afianzándonos en lo que es el proceso de producción. Para nosotros fue algo muy importante que en diciembre del año pasado tuvimos la certificación de calidad con el sello IRAM, en cuanto a los procesos productivos, tanto de columnas, como de hormigón. La prioridad fundamental, y por la estructura que tiene la cooperativa, por la forma que tiene del arraigo que se ha generado de más de 75 años de vida en Winifreda, prestando servicios en la localidad, en Conhelo, Rucanelo y una amplia zona rural, nuestra meta es garantizar la calidad de nuestros productos, porque somos una organización que gira en torno a brindar servicios de calidad”. 

Certificación IRAM.

En ese marco, Camps destacó que “la certificación tiene una doble lectura, al interior de la organización uno certifica un proceso y de alguna manera garantiza en el funcionamiento de la cooperativa, que ese servicio no va a afectar al resto. Y en lo que tiene que ver con la relación con pueblos, asociados y no asociados, las operaciones que se hacen con terceros, nos permite garantizar el producto que se ofrece”. 

“Eso nos ha permitido ganar la fidelización de clientes, mantener contratos de aprovisionamiento, ampliarnos en los lugares donde antes no teníamos ningún tipo de servicio con la cooperativa, darnos la posibilidad de desarrollar proyectos de electrificación y de iluminación, proveyendo el insumo de hormigón y de columnas, una posibilidad que antes no teníamos, todo eso es base a garantizar una calidad del proceso y del producto que uno incorpora en esos servicios”, agregó en la charla con LA ARENA. 

El gerente subrayó que en los dos años de funcionamiento de la planta, “se crearon 11 puestos directos de trabajo, con la incorporación reciente de un molde más grande, de 16 metros y medio, estimamos que vamos a incorporar una o dos personas más”. 

Asimismo, dijo que “de modo indirecto, tiene un impacto muy importante en la localidad, porque trabajamos con prestadores de servicios como fletes y demás. Nuestro insumo principal son los áridos, que los tenemos que traer de zonas de Puerto o de Córdoba, y contamos con fletes y prestadores de servicios de la localidad, y ahí hemos tenido un impacto muy importante, de modo indirecto, lo cual nos tracciona y nos genera nuevas posibilidades a la cooperativa. También mayor ingreso a estas personas que se dedican a estas prestaciones de servicios, que es muy importante para la localidad”.