Miércoles 14 de mayo 2025

Piden que Salud medique a un paciente oncológico

Redacción 25/05/2011 - 03.53.hs
"Mi viejo trabajó toda la vida en el campo, como empleado. Siempre pagó los impuestos religiosamente", se lamentaron Leandro y Carina Bugnone, los hijos de Héctor Juan, un trabajador rural de 65 años, oriundo de Villa Mirasol y radicado desde hace años en la zona rural de Arata, en el norte provincial.
Al vecino, cuya jubilación está en trámite y no posee obra social, le diagnosticaron un tumor maligno en la cabeza en agosto del año pasado. Un primer tratamiento no dio resultados y el segundo, recetado por un médico de la Capital Federal, nunca comenzó, pues fue rechazado por los médicos del Hospital Molas.
El jueves, Héctor fue internado en el nosocomio santarroseño tras sufrir un episodio convulsivo. "El neurólogo que lo atendió nos preguntó por qué no estaba recibiendo tratamiento oncológico y nos dijo que se estaba muriendo", relató Carina. El paciente quedó internado en el área de Clínica Médica donde le suministran medicamentos para evitar nuevas convulsiones, pero lleva un mes sin terapia oncológica.

Tumor.
A Héctor le detectaron hace alrededor de nueve meses un Astrocinoma Anaplásico Grado 3, un tumor cerebral. Fue sometido a una intervención quirúrgica en el Molas y luego tratado con radio terapia en el Hospital Centeno de General Pico y con quimioterapia. Su oncólogo de cabecera se desempeña en el Hospital Evita de esta capital. Al cabo de semanas de tratamiento, el profesional diagnosticó que la terapia no había dado el resultado esperado y que el tumor había vuelto.
Ante la angustiante situación de Héctor, la esposa y los hijos recibieron como recomendación del oncólogo una consulta con un profesional del Instituto Fleni, de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA). A pesar que lo solicitaron más de una vez, el médico del Evita no realizó la derivación, motivo por el cual, los Bugnone decidieron ir por sus propios medios.

 

Ultima esperanza.
El paciente realizó la consulta en el Fleni el 25 de abril. El médico del sanatorio porteño le recetó un tratamiento con dos drogas combinadas: Lomustine y Nimotuzumab. Siempre de acuerdo al relato de los hijos del paciente, el 2 de mayo, el oncólogo del Evita realizó el pedido, pero la auditora oficial (una médica oncóloga) desaprobó la segunda droga, la cual tendría un costo semanal de 14 mil pesos.
"Hablamos con ella. Primero nos dijo que no había entendido la letra del médico solicitante y por eso pidió que le reitere el pedido. Luego (el 17 de mayo), el pedido vino con sólo una de las drogas, Lomustine. Cuando le preguntamos al médico nos dijo que en realidad la auditora lo había llamado para reprenderlo por recetar el Nimotuzumab", relató Carina. Más allá de esas idas y vueltas, una junta oncológica rechazó la droga.
Los hijos de Héctor se acercaron ayer a este diario para relatar la historia. Sostienen que si bien aquí les dijeron que la enfermedad de su padre era terminal, en el Fleni les dieron esperanzas. Por eso reclaman que lo traten. El paciente lleva un mes sin recibir medicación oncológica y su estado de salud empeora día a día. Para mañana, esperaban un llamado del ministro de Salud, Mario González, con quien pidieron reunirse para plantear el caso de Héctor.

 


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