Martes 30 de abril 2024

El radical que escribe con K

Redacción 25/08/2014 - 02.08.hs

El histórico dirigente del radicalismo coincidió con el gobierno nacional en relación al proyecto que busca una alternativa de pago para sortear el bloqueo de fondos impuestos por el juez Griesa en Nueva York. Dijo que su partido, frente al anuncio presidencial, "se lavó las manos".
La semana que pasó, el gobierno nacional anunció el envío de un proyecto al Congreso de la Nación a través del cual busca articular la ingeniería para que los bonistas que no pueden cobrar en Nueva York -por la prohibición impuesta por el juez jurisdiccional Thomas Griesa- puedan hacerlo en Buenos Aires. El objetivo es sortear el obstáculo legal impuesto por el magistrado norteamericano y al mismo tiempo evitar el default técnico -no efectivo- por el no cobro de los acreedores.
La iniciativa prevé realizar el pago a través de un fideicomiso del Banco Nación, en plaza argentina, o a elección del acreedor, ante la imposibilidad de hacerlo por el Banco de Nueva York, entidad que no puede pagar por orden de Griesa.
Leopoldo Moreau, histórico dirigente radical, fundado de la Junta Coordinadora Nacional y ex senador, se mostró de acuerdo con el proyecto anunciado por Cristina Fernández y tomó distancia de algunas posiciones adoptadas por candidatos y representantes de la oposición. "Creo que hay una opinión entre los que son candidatos a presidente y otra de quienes no lo son. Y eso está cortando transversalmente a todas las fuerzas políticas", dijo durante una entrevista concedida a Radio Noticias. "Los candidatos dicen lo que dicen por especulación", lanzó.
Moreau no dudó al asegurar que el juez Thomas Griesa "juega con la misma camiseta de los fondos buitre" porque "trata por todos los medios de desbaratar la reestructuración de la deuda", y opinó que "la Argentina no pueda acatar sin chistar el fallo" del magistrado norteamericano.
No obstante planteó la duda técnica en relación a si el país está o no en cesación de pagos: "El gobierno pagó pero los fondos bloqueados por Griesa no llegaron al bolsillo de los acreedores, y mientras esto no suceda, puede seguir la duda de si estamos en default o no. Yo creo que no, porque la Argentina ha pagado, pero lo cierto es que la acción de pago se concreta también con quien lo percibe".
Además explicó que cambiar el agente y la jurisdicción de pago, tal como propone el proyecto del Ejecutivo, "es necesario" porque el 30 de septiembre vence el pago de 200 millones de dólares que Argentina tiene que hacerle a los acreedores que ingresaron al canje de deuda de los años 2005 y 2010.
"Representan el 92 por ciento de los bonistas. Y si no llega la plata a esos acreedores, los 200 millones de dólares van a seguir el camino de los 500 que se pagaron en julio y que están bloqueados por Griesa", sostuvo. Y amplió: "Si tenemos que pagar como quiere Griesa, a la mañana siguiente tendríamos que afrontar otro pago por 15.000 millones de dólares del 6 por ciento restante de los bonistas que están esperando en la puerta de los tribunales de Nueva York. Lo más grave es que si lo hacemos, se desata la cláusula denominada Rufo, que implica un endeudamiento para la Argentina equivalente a cinco o seis mega canjes como los que firmó Caballo en 2001. De la noche a la mañana tendríamos un sobreendeudamiento de 300.000 millones de dólares. Está claro, entonces, que hay que evitar esto".
-¿Por qué parece que algunos no entienden de qué se trata?
-Sí entienden. Pero están jugando a la especulación política con un tema donde la especulación debe dejarse de lado. Algunos también juegan para el enemigo. Al proyecto enviado por la presidenta se lo puede mejorar y enriquecer (en el Parlamento), pero es el camino para encontrar una salida. Pero ella no había terminado de hacer el anuncio y (Mauricio) Macri ya había salido a decir que (el Pro) va a votar en contra. Y eso es lo mismo que decir, 'vamos a votar a favor del fallo de Griesa', porque si no se sale de esta situación, lo que queda en pie es el fallo. (Sergio) Massa, en tanto, trata de demostrar que se opone, pero en realidad propone lo mismo: hace un juego de palabras con Lavagna, que es un hombre mucho más responsable. Y el radicalismo decidió hacer la de Poncio Pilatos: se lava las manos cuando dice que no hace falta la ley y que el Ejecutivo tiene los instrumentos para hacer el cambio por sí mismo.
-¿Por qué dice que la UCR se lava las manos?
- Porque efectivamente el Ejecutivo lo puede hacer sin ley, pero no tiene el mismo significado frente a los bonistas para que acepten el cambio de jurisdicción y del agente de pago.
-Hacerlo pasar por el Congreso le da otro peso.
-Tiene que haber una decisión nacional muy fuerte, como la hubo en su momento frente a la reestructuración de deuda. Tanto para el canje de 2005 como para el de 2010, el radicalismo participó del debate en el Congreso y, lo que es más notable, votó a favor de las dos reestructuraciones y de la ley cerrojo. Los radicales votamos a favor de lo que hoy decimos que han sido errores como por ejemplo la cláusula Rufo.
-¿Quienes sostienen la postura expresada en estos días por la UCR?
-La tomó un grupo de radicales que se reunió en Córdoba escuchando a economistas como Prat Gay, que tiene su propia consultora, o a Losteau, que no es radical, o a Natalio Botana. Pero hay legisladores radicales que no van a actuar de esta manera, que no van a hacer la de Poncio Pilatos, y el debate hacia adentro del radicalismo va a continuar.
-¿Le pesa a veces ser radical y tener que dar estas explicaciones?
-Todo lo contrario. Tengo un gran orgullo del partido de Irigoyen, de Illia, de Alfonsín, de lo que hizo el radicalismo por la Argentina. No estoy orgulloso del radicalismo de hoy. Pero también creo que hay una gran corriente de pensamiento basadas en una cultura radical que tiene compromiso con una mirada nacional, popular, progresista y democrática que se niega a ir a la cola de Macri.

 

"Que decida la militancia".
Moreau pide debate hacia adentro del radicalismo. "(Con el proyecto para pagar en plaza argentina) pasa lo mismo que con la estatización de YPF: la presión de los medios y de algún economista nos llevaba a votar en contra, hasta que hicimos el debate partidario y finalmente el partido votó a favor; y lo bien que hizo. Ahora también tenemos que debatir hacia adentro, y si alguien quieren traer a Prat Gay, que viene de la derecha liberal, que lo traiga, pero que a la decisión la tome la militancia radical y no Prat Gay".

 


' '