"No queremos las listas que ya vienen armadas", dijo Sola

Luego de la inauguración de un local de Alternativa Pampeana en el centro de Santa Rosa, el diputado provincial del PJ Facundo Sola, quien fuera tres veces intendente de Realicó, quiere pelear por una mayor injerencia de su espacio en el peronismo. "Inauguramos un local que pretende ser un lugar de encuentro coordinado con las herramientas virtuales, para generar un espacio de diálogo, de formación y de capacitación, para discutir ideas y llevarlas a proyectos y propuestas que enriquezcan todo lo relacionado con la gobernanza y con la política en general, para aportar soluciones que mejoren la calidad de vida de los pampeanos", explicó en diálogo con La Pampa Va, por Radio Noticias 99.5.

 

-Se viene un año electoral, ¿qué expectativas tienen?

 

-Esta movida tiene un objetivo muy concreto que lo planteamos allá por agosto del año pasado cuando dijimos que surgía una alternativa en la política de La Pampa porque no compartíamos mucho de los aspectos que se venían desarrollando en el espacio del Frente de Todos y del PJ, de modo tal que armamos una lista y quisimos participar de las elecciones de medio término. No pudimos hacerlo porque no pudimos obtener la certificación de los avales. Por supuesto que no escapan al análisis las elecciones de 2023. Luego del revés que tuvimos en las últimas elecciones, creemos que es necesario cambiar las prácticas porque si seguimos con las mismas recetas el resultado va a ser similar.

 

-Las apelaciones a la nueva política se hacen desde que tengo memoria y la política sigue siendo la misma, con las mismas formas de presentarse a la sociedad. Me parece difícil que el electorado compre un discurso de este tipo.

 

-Es que nosotros no queremos vender nada. Creemos que necesitamos un proceso de renovación de la política en general y del justicialismo en particular, que sea acorde a las realidades del contexto actual. Hoy tenemos un contexto globalizado, donde la influencia de los grandes medios de difusión es terrible. Vemos cosas que no tiene nada que ver con el día a día nuestro y donde la imagen es más importante que las ideas. Hay que buscar la manera de renovar prácticas porque el cuerpo a cuerpo aun en La Pampa gravita. Necesitamos mejorar los instrumentos de la participación política para contener.

 

-Hay una política convulsionada en el orden nacional, tanto en el oficialismo como la oposición. ¿Cómo influye lo nacional en lo pampeano?

 

-Siempre influye. Va a influir mucho porque en un país como el nuestro, donde las grandes variables que regulan la vida, lo económico, lo macroeconómico, la inflación, tienen que ver con el marco jurídico y las facultades que tienen el gobierno nacional, por lo tanto, más allá del esfuerzo que las comunas o las provincias puedan hacer, hay cosas que no manejan como las tasas de interés, la política tributaria, el precio de los combustibles, la inflación, que generan buen o mal humor en la población.

 

-Algunos piensan en adelantar las elecciones provinciales. ¿Qué opinás?

 

-El análisis está. Más allá de los aspectos positivos que pueda tener elegir todos los cargos juntos, no deja de ser positivo que se separe, porque la gente valora muy bien el esfuerzo del gobierno en la aplicación de las políticas públicas y es una manera de que la gente evalúe o le de el apoyo o se lo quite en función de lo que la provincia está haciendo. Entiendo que el gobierno pampeano esta sorteando bien los coletazos de la crisis, pero no es menos cierto que se adelanten o no las elecciones, el PJ necesita buscar mecanismos de acercamiento a la sociedad. Tiene que buscar un proceso de participación y de apertura para llegar con la mejor posibilidad a las elecciones.

 

-¿En lo personal, dónde te imaginás en 2023?

 

-Mi objetivo en lo inmediato es que el Frente de Todos abra la posibilidad del diálogo y el consenso para aportar ideas, hacer diagnósticos, hacer autocrítica, y decir cómo podríamos abordar los temas estratégicos en las distintas regiones de la provincia. Alternativa Pampeana pretende sentarse a aportar en las mesas chicas, con el respeto que se merecen los demás compañeros. No queremos que ocurra como otras veces que vienen las listas armadas.