Uma Aquaroli volvió a brillar en Pasión de Sábado

Uma Aquaroli no tiene techo. Entre brillos y luces, se presentó el sábado por la tarde en el programa de TV número uno de la movida tropical "Pasión de sábado", que se emite todos los sábados a las 13 horas por América TV. La joven cantante de cumbia y cuarteto se robó el escenario. 

"Pero fuiste mala y todo se paga. No soy tu enemiga, tienes a tu enemigo durmiendo en tu cama y muy despistada te estás cuidando de la equivocada. No te deseo el mal pero él te va a engañar con otra. Y recordarás el día que te reías el día en que estuve en tu lugar. No te deseo el mal, pero él te va a engañar con otra, será con otra", cantó Uma con pasión.

Jéssica, la mamá de la cantante, conversó con LA ARENA sobre la nueva hazaña de su hija: "Solo te permiten de 3 a 4 minutos. Entonces Uma hizo un enganchado de los temas "Con otra" y "Señor Amante", se la jugó con dos cuartetos. Y el público cantó con ella y decían su nombre".

Con la potencia de su voz, Uma encendió la pista, el público coreaba su nombre, la acompañaba con palmas, pedía más. Después de la presentación, Marcela Baños, la conductora del programa, se acercó a felicitarla. Uma destacó la alegría que le generó haber estado por segunda vez en el programa y habló de todo el esfuerzo que han hecho para seguir persiguiendo sueños, de lograrlo, de llegar a ese lugar de tanta trayectoria.  

"Lo mas loco fue que la gente que hacía cola para entrar al canal. Le pedían fotos y le pedían autógrafos y ya conocían su nombre. Una locura hermosa. En esta oportunidad nos llevamos a toda la banda. Hasta Gabino, el hermanito de Uma, con solo 8 años y sin vergüenza subió al escenario y tocó la pandereta, bailó y lo hizo como correspondía. Estuvo a la altura digamos con tan solo 8 años", destacó la mamá de Uma. 

Hace cinco años que Uma se dedica a la música, pero se sube a los escenarios como si lo hiciera de toda la vida. Porque los sueños están para cumplirse y Uma Aquaroli y su familia y toda la banda no se toman descanso. Siguen, insisten, bailan y cantan, porque la alegría es para compartirse.