Una conexión con las raíces italianas

La bailarina y profesora Silvina Rosales habló con LA ARENA luego de su regreso de Italia, donde participó de una beca durante todo el 2022. El viaje a la tierra de sus ancestros, la conectó con lo más profundo de sus raíces y al volver decidió generar un espacio para ayudar a quienes deseen lograr su ciudadanía italiana. También, comenzó a dar clases de danzas italianas, donde además de bailar, quienes asisten se encuentran con la cultura de ese país, desde comidas típicas, su historia, los estilos dancísticos de las diferentes regiones, entre otras actividades.

“Todo comenzó en pandemia en el 2020, yo tenía mi casa junto con mi estudio de danzas y aproveché para capacitarme un montón. Hice seminarios online con Paloma Herrera, Eleonora Cassano, Iñaki Urlezaga y después me puse a investigar y empecé a hacer seminarios de danza contemporánea, flamenco y música con profesores de Europa, donde es muy común que se hagan competencias de danza. Ese año por la pandemia las competencias se hicieron de forma virtual y además tomabas clases con profesores europeos. Así que me anoté en este concurso, tomé clases de danza contemporánea y de danza jazz, danza moderna, y competí, fui la única argentina que compitió enviando una coreografía mía y gané media beca”, detalló Silvina. “Se puntuaba de manera internacional porque todos podíamos ver los videos de los participantes y los íbamos puntuando y yo tuve el privilegio de ganarme media beca y empecé a pensar en tener la oportunidad que siempre soñé de irme a estudiar a Europa. Así que lo charlé con mi marido, con mi hijo adolescente y emprendimos esta aventura hermosa de irnos un año, me tomé un año de licencia en el trabajo sin goce de sueldo y me fui a vivir a Italia, a la ciudad de Salerno donde estudié danza contemporánea, danza de competición, fui a milongas, tomé clases de milonga en italiano y además me invitaron en un estudio de danzas de una bailarina napolitana, donde pude dar una clase de danza contemporánea y de modern jazz, lo cual para mí fue todo un privilegio”, contó.

Conexión.

El 2022 fue un año súper productivo para Silvina, pero no sólo en la cuestión artística, sino también en lo que respecta a las raíces, a la familia. “Me pasó algo muy místico que fue conectarme con mi otra parte que tiene que ver con mis ancestros, mi bisabuelo, que emigró a la Argentina muy chico huyendo de la guerra. Así que me pasó esto de conectarme, fue como llevar la sangre de vuelta a Italia y me pasaron cosas muy profundas en mi alma”, aseguró. “Al estar lejos aprendí a valorar muchísimo a nuestra tierra, nuestra cultura, nuestras costumbres, que las extrañé y a valorar lo que somos los argentinos”.

Ciudadanía.

Silvina pasó por decenas de trámites para lograr alcanzar la ciudadanía italiana. “Fue un camino muy largo, un trabajo de hormiguita para poder realizar mi ciudadanía italiana, porque yo todavía no la tenía hecha, así que junto con mi viaje yo hice mi ciudadanía italiana en Salerno. Entonces cuando regresé, que fue en diciembre del 2022 se me ocurrió abrir un espacio de asesoramiento para lo que es la realización del trámite de ciudadanía italiana. Contar los pro y los contras desde mi experiencia, porque si bien los requisitos son los mismos en todos los consulados, no todo el mundo puede enfrentar lo que es un trámite administrativo, yo también me dedico a la administración pública, entonces quise unir estas dos pasiones que tengo, que es el arte de honrar a los antepasados y colaborar y asesorar con los trámites de ciudadanía, ya sea armar el viaje para emigrar o para realizarlo en el consulado de Bahía Blanca”, explicó la artista.

Danzas.

Por otra parte, el paso por Italia llevó a Silvina a querer estudiar y enseñar las diferentes danzas de ese país. Esa actividad se realiza todos los miércoles a las 19 horas en el Club Italiano de Santa Rosa y quienes deseen acercarse pueden hablar con la profesora al celular 11-67565118. “Continúo con lo que amo, porque soy artista de muy chiquita, soy profesora de danzas, amo enseñar entonces propuse en el Club Italiano abrir un espacio que es hermoso que tiene que ver con enseñar las distintas danzas de las distintas regiones de Italia. Es un taller teórico práctico donde vamos a investigar los orígenes de cada danza, los vestuarios, por qué se utilizaban esos vestuarios, por qué esos colores, las comidas de cada región, y la idea es la unión acá en La Pampa de todos los italianos. Creo que Italia es una sola y que cuando emigraron nuestros antepasados, emigraron todos juntos, cada uno con sus razones pero cuando llegaron a la Argentina, todos se reunieron en el puerto de La Boca y empezaron a convivir, entonces no creo en la división. Me encantaría y sin ofender a nadie, unirnos todos y armar la compañía de varieté”.

“Vine muy conmovida de mi viaje a Italia e insisto, el mensaje no es que la gente tiene que emigrar. Tuve el honor de conocer la tierra de donde vienen mis orígenes. Cuando llegué a Italia se inició justo la guerra entre Rusia y Ucrania y el ver tantos rusos como ucranianos emigrar de su país sin una elección, el verlos en carne propia, tenerlos como vecinos, estar con ellos, todo eso me tocó muchísimo y dije ‘hay que hacer algo con todo esto’”.