Los vecinos reclamaron seguridad en General Pico

Víctimas de la inseguridad indicaron que las falencias recaen en el sistema judicial, policial y legislativo. Conformarán una comisión de investigación y elevarán un petitorio a las autoridades.
Más de un centenar de vecinos participó el sábado a la tarde, en el club Cultural Argentino, de la primera reunión abierta en protesta por los recientes hechos delictivos suscitados en esta ciudad. Bajo el lema: "Por más y mejor justicia", comerciantes, trabajadores y estudiantes que han padecido la inseguridad se reunieron en un salón deportivo para debatir sus ideas y concluir en la conformación de una comisión de investigación y la entrega de un petitorio a las autoridades municipales sobre esta problemática social.
La reunión contó con la participación del ex candidato a senador por el Frente Es Posible, Alberto Balent, y el ex candidato a diputado nacional por Pueblo Nuevo, José Luis Casadei, como así también con las dos víctimas del reciente arrebato millonario -ocurrido a la salida de una financiera local- Rosana Granda y Patricia Argerich y efectivos policiales.
La espontaneidad del debate y la confrontación de ideas fueron los puntos sobresalientes
de una charla que por momentos se basó en reclamos "discutibles" producto, quizás, del creciente fervor con que se desarrollaba la jornada.
Luis Rolero, organizador de la reunión, inició su discurso agradeciendo a los presentes e induciéndolos a "hacer catarsis" por todo lo vivido en estos últimos días. Tímidamente cada uno de los vecinos levantaba la mano para tomar la palabra y contar su historia relacionada con la inseguridad en las calles, mientras el organizador se encargaba de entregar el micrófono y dirigir el debate.
"Me preocupa la indiferencia del pueblo piquense. Este salón debería estar lleno", dijo una docente al referirse a la falta de compromiso por parte de los vecinos.
Luego, un comerciante hizo hincapié en que el problema que está viviendo General Pico tiene su origen en tres partes: policial, judicial y legislativo.

Miedo.
"Tuve que enrejar mi casa, no tengo privacidad y me da miedo salir a la calle", dijo una reconocida comerciante local con su rostro cubierto de lágrimas. La reunión fue tomando un crudo tono cuando una de las concurrentes mencionó la "falta de efectivos y la escasa preparación que tienen para solucionar los problemas".
Las víctimas de la inseguridad resaltaron aspectos políticos como la incursión de penas a los menores y la oposición a la despenalización de las drogas. Después, el intercambio de posturas se hizo frecuente generándose una fuerte discusión en torno a la ausencia de autoridades oficiales.

Fervor.
Las palabras se tornaron imprecisas, producto del creciente fervor suscitado. "Si tengo que matar a un ladrón, no cabe duda que lo hago. En Pico no hay trabajo, faltan empresas y los jóvenes están muy desocupados", sostuvo el comerciante.
Tras dos horas de debate, los concurrentes decidieron conformar una comisión de investigación para desarrollar tareas grupales en pos de concienciar a los vecinos y trabajar sobre los principales aspectos que desembocan en la delincuencia local. Además, optaron por elevar un petitorio a las autoridades de esta ciudad para que desarrollen políticas concretas con la intención de fomentar la seguridad y "vivir más tranquilos", resumió uno de los organizadores.