Las agencias de viajes en alerta por el DNU que desregula el mercado

El DNU firmado por el presidente Javier Milei incluye la derogación de tres leyes vinculadas al sector turístico con el argumento de eliminar “el monopolio de las agencias de viajes”. La desregulación es ampliamente rechazada por las empresas de viajes. “Una mínima regulación tiene que haber”, sostuvo Sergio Faus, de la agencia Santa Rosa Viajes y Turismo.

 

Es importante mencionar que el decreto deroga las leyes N° 18.828 (de reglamentación de Hotelería), 18.829 (que creó el “Registro” de “Agentes de Viaje” y reglamentó su actividad a partir de una “licencia habilitante”) y 26.356 (de “Sistemas turísticos de Tiempo Compartido”). Las dos primeras, consecutivas, de noviembre de 1970, se basan en el artículo 5 del “Estatuto de la Revolución Argentina” iniciada con el golpe de Estado del general Juan Carlos Onganía contra el gobierno constitucional de Arturo Illia, aunque fueron sancionadas durante la dictadura del general Roberto Levingston). La tercera es de marzo de 2008, en los meses iniciales de la primera presidencia de Cristina Fernández Kirchner.

 

En diálogo con Radio Noticias, a Faus se le preguntó si las agencias de viajes son un monopolio y el empresario pampeano aseguró que “esa información está en las antípodas de la realidad. Si hay un rubro que está atomizado es el de las agencias de viajes”. Mencionó que en el país existen “más de 5.000 agencias” y que “en su mayoría son mini pymes con dos o tres empleados, está muy lejos de ser un monopolio. Si ser refería a un lobby, las agencias están descentralizadas y atomizadas”.

 

“Hace unos años, irrumpieron las agencias de viajes online, pero si entran dentro de las reglas de juego hay espacio para todos. Las agencias no dejamos de vender por la llegada de operadores online porque la idoneidad y la experiencia son valores incorruptibles para un pasajero”, agregó.

 

“Mínima regulación”.

 

En ese marco, Faus planteó que “tiene que haber una mínima regulación, no solo en turismo sino en todos los rubros. Para vender viajes hay que ir a la universidad, capacitarse, hacer posgrados, como cualquier profesión, ya sea médico, abogado. No puede ser que cualquiera pueda hacer cualquier cosa, para eso están las universidades y los órganos de control”.

 

Si bien afirmó que muchas personas “venden viajes por redes sociales”, los viajeros “no llegan más allá de la consulta porque, además de plata, hay sueños y no hay que desproteger a los clientes”.

 

-¿Cómo está la demanda de viajes para el verano?

 

-La venta de verano ya se produjo hace dos meses, muchas personas antes de las PASO y el balotaje se anticiparon a la compra por temor a una devaluación. Cuando hay medidas tan disruptivas, el mercado se paraliza en todos los rubros, hay que ver qué pasa en los próximos días.

 

-¿Cuánto aumentaron los paquetes de viajes?

 

- A groso modo, un 100 % porque había muchos hoteles en Argentina que estaban dolarizados.

 

Herramienta.

 

Por último, el empresario defendió el programa Pre Viaje porque “fue una muy buena herramienta”. “El 1 y 2 fueron espectaculares, reactivó el mercado de los hoteles y las empresas anexas al turismo, como de indumentaria, porque veníamos del parate de la pandemia. Los otros no sé si tuvieron mucho efecto porque fueron de venta muy corta, con montos que no se actualizaron con la inflación, pero tomaría la experiencia para promocionar destinos que no son tan turísticos”, desarrolló y afirmó que promocionaría a “La Pampa o Formosa. Es una buena herramienta si se la utiliza bien”.