Choque fatal

Incendio.
El auto de Haasl impactó contra la parte trasera del vehículo mayor, quedó incrustado debajo del acoplado y luego se incendió por completo. El impacto le habría obstruido los frenos de aire al transporte y el auto fue arrastrado unos cien metros. El camión -de la firma Don José, propiedad de la familia Machicote, de General Pico- era conducido por Fabio Omar Lucero, de 33 años, y se dirigía hacia Bahía Blanca cargado de soja.
Las fuentes policiales consultadas no desecharon la posibilidad de que el joven se haya quedado dormido minutos antes del fuerte golpe. Según se indicó, Lucero habría intentado auxiliar a Haasl, pero las llamas habrían imposibilitado que se acerque al auto. El chofer desenganchó la caja del camión del acoplado y la estacionó unos metros más adelante.

Ruta trágica.
"Cuando nosotros arribamos al lugar, el fuego ya había consumido por completo el auto. Lamentablemente no pudimos hacer nada", se lamentó el jefe del cuerpo de bomberos de Quemú, Raúl Barraza.
Pasada una hora y media del accidente, el personal policial y de bomberos aguardaba la llegada del juez Horacio Tolosa, a cargo del Juzgado de Instrucción 1 de Pico, y del personal de la división Criminalística para que efectúen las pericias correspondientes y autoricen retirar el cuerpo del joven de adentro del coche. Finalmente, los restos del fallecido fueron sacados a las 12.30 y trasladados a Pico donde se le practicó una autopsia, informó la policía.
Hace poco más de un mes, en ese mismo tramo de la ruta ocurrió un accidente similar. Tres jóvenes que regresaban de un cumpleaños de Catriló en un Renault Mégane chocaron de atrás contra un camión. El joven Bruno Bustos, de 15 años, murió a los dos días en el hospital Gobernador Centeno como consecuencia de las graves heridas sufridas.
Los restos de Haals eran velados durante toda la noche y serán inhumados hoy a las 10 en el cementerio local.