Martes 10 de junio 2025

Estudiantil le dio un golpe a All Boys

Redacción 19/02/2017 - 00.41.hs

El Bohemio se impuso por 2-1 en un partido intenso jugado en cancha de los santarroseños, que terminaron con siete jugadores en el terreno. Cornara anotó los dos goles visitantes, Saffeni el local y Martín fue la figura del encuentro.
Estudiantil de Eduardo Castex consiguió anoche mucho más que un triunfo en el estadio Dr Ramón Turnes. Además de los tres puntos por el 2-1, que lo dejaron como único puntero de la Zona 1, el Bohemio le dio un terrible cachetazo a All Boys, uno de los grandes candidatos y rival directo en la lucha por quedarse con esta edición del Torneo Provincial de fútbol.
Es que aunque recién se trate de la segunda fecha del certamen más importante de La Pampa, el traspié de los santarroseños fue acompañado por la expulsión de toda su línea defensiva -Ezequiel Roque, Lucas Vassallo, Darío Seip y Javier George-, además del mediocampista Cristian Godoy (ver aparte), dejando al equipo con cinco hombres menos de cara un futuro inmediato en el que deberá sumar puntos tanto dentro como fuera de casa para poder clasificar.
Jordan Cornara, con dos apariciones fantasmales y dos definiciones exquisitas, fue el autor de los goles castenses; en tanto que Juan Pablo Saffeni descontó para los santarroseños, en un partido que tuvo como gran figura al mediocampista central visitante Julián Martín, por su entrega para recuperar, su orden táctico y su capacidad para jugar y hacer jugar a sus compañeros.

 

El desarrollo.
El primer tiempo fue intenso, con dos equipos que corrieron más de lo que jugaron y mostraron una paridad general, aunque Estudiantil asomaba con más peso ofensivo por los buenos movimientos de Cornara y Diego Reina, y las llegadas de Jonathan Sánchez. Del otro lado, a All Boys le faltaba peso en ataque, con un desaparecido Rubén Pérez, un laborioso pero chocador Jerónimo Gutiérrez y un Mauro Barreiro que jugaba muy lejos del área rival.
En el complemento cambió la historia rápidamente porque a los 2 minutos Cornara aprovechó un error compartido entre Gutiérrez, Godoy y Vassallo, encaró solo a Boto y definió con clase. All Boys se adelantó y a los 20 quedó expuesto en defensa, Cornara le ganó a George en una contra y otra vez definió dejando a Boto en el camino.
Aún con uno menos por la expulsión de Roque, Saffeni aprovechó un par de rebotes en el área visitante para descontar y poner al local en carrera nuevamente.
Pero Estudiantil fue inteligente para mover la pelota y dejar correr los minutos, All Boys fue perdiendo los estribos a medida que se tornaba cada minuto más individualista y, cuando comenzaron las expulsiones masivas, se terminó definitivamente el partido. Mucho más que un triunfo para el Bohemio; mucho más que una derrota para el Auriazul.

 

Segundo tiempo de furia "auriazul".
Estudiantil se puso en ventaja con el primer gol de Jordan Cornara en el inicio del complemento, aunque el partido continuaba parejo, con un All Boys que buscaba sin muchas ideas colectivas pero confiado en que en cualquier momento podía llegar el empate.
Pero a partir de los diez minutos de esa etapa entró en un espiral de furia y de impotencia que le costó carísimo, porque no solo se consumó la derrota, sino que también perdió por expulsiones a cinco jugadores, que podrían haber sido más.
El primero en ver la roja fue Ezequiel Roque, a los 11, por una dura falta a Julián Martín. Y a partir de los 36, cuando ya estaban 1-2, llegó el descalabro.
A los 36 Cristian Godoy se fue expulsado desde el banco por un supuesto insulto a un asistente y a los 38 siguió su camino Javier George por un golpe sin pelota en la cara de Cornara.
Sobre el final, Darío Seip vio la roja por un agarrón a Daniel Galván (la única expulsión reprochable porque podría haber sido una amonestación) e inmediatamente Lucas Vassallo le tiró un pelotazo al árbitro y también fue expulsado.
Todos se fueron sobre Cristian Rubiano y sus asistentes, que en medio del tumulto no pudieron ver la locura de Matías Boto intentando agredirlo y el golpe desde atrás que Gastón Rosales le dio a Jonathan Sánchez. Los dos deberían haber corrido la misma suerte.

 


'
'