Doble festejo del campeón defensor

All Boys dio ayer un golpe sobre la mesa y sacó su chapa de campeón para ganarle como visitante el clásico a Atlético Santa Rosa por 1 a 0, lo que le permitió cerrar a su favor la serie de semifinales y clasificarse a la definición del Torneo Oficial de la Liga Cultural de fútbol.

Ante una gran cantidad de público en el estadio Mateo Calderón, y tras el 1 a 1 registrado en el choque de ida, el Auriazul se impuso ayer gracias a un golazo de Ramiro Fredes a los 10 minutos del complemento, marcando así la diferencia en una serie muy equilibrada entre dos de los grandes candidatos a quedarse con la corona.

Cuando se cerraba el clásico fue expulsado Leonardo Reynoso, por cortar con falta una situación manifiesta de gol en una contra de Facundo Guiñazú, por lo que el Albo terminó con diez.

All Boys -que también debería haber jugado casi todo el complemento con diez por la segunda amonestación "perdonada" a Román Maidana cuando se jugaban 5 minutos de esa segunda parte- enfrentará en la final a Unión Deportiva Campos de General Acha, que en la otra semi eliminó al Deportivo Mac Allister. La definición será a dos partidos y el orden de localías será sorteado en la Liga Cultural.

Más local.

En el primer tiempo fue un poco más Santa Rosa, dominando el medio con el posicionamiento de Gabriel Vega y el juego de Emiliano Cocco, y llegando en ofensiva con Maximiliano Montoya (se impuso siempre por su sector) y Reynoso.

A All Boys le costaron los primeros minutos, especialmente en el medio. A Tomás Arzer se lo notaba incómodo jugando por la derecha (evitó el avance del lateral rival, pero no pudo asociarse para atacar); Facundo Guiñazú no lograba hacerse dueño del balón y Andrés Galetto aportaba con su despliegue pero sin romper hacia adelante.

El único que parecía lastimar en ataque era Giuliano Guinchinao, que se soltaba del medio con pelota dominada y llegaba hasta el área rival. En una de sus habituales escaladas, un centro terminó en un cabezazo de Fredes apenas desviado.

Santa Rosa defendía bien, no pasaba mayores sobresaltos y parecía jugar el clásico como pretendía, pero cuando llegaba a las inmediaciones del área rival nunca resolvía del todo bien: a los centros de Montoya les faltaba precisión y a las gambetas de Reynoso terminación. La más clara la tuvo Juan Martínez con un cabezazo tras un centro de Montoya, pero le cobraron offside.

Así se fue el primer tiempo, con más insinuaciones que concreciones, y con la sensación de que el local estaba más cómodo.

"Perdón" y golazo.

En el inicio del segundo tiempo hubo dos jugadas claves para el desarrollo posterior del partido. A los 5 minutos Maidana cortó un avance de Reynoso con una falta que hubiera merecido amarilla, pero el árbitro Diego Pereyra entendió que no era para mostrarle la segunda amonestación (si lo hacía, debía expulsarlo). Y ese "perdón" quedó en evidencia un minuto después, cuando el DT visitante reemplazó al lateral para evitar que termine expulsado.

La otra jugada destacada de la fría tarde se dio a los 10 minutos: All Boys rechazó un centro dentro de su área chica (los locales reclamaron penal por una falta de Matías Sacca a Montoya que no existió) y partió una contra en la que Bruno Cabral aguantó de espaldas para limpiar hacia Fredes, quien encaró hacia el área y sacó un remate que se clavó contra un palo para el 1 a 0 que sería definitivo.

A partir de allí Santa Rosa retomó el dominio, con más empuje que juego, y poco a poco fue metiendo a su clásico rival contra el arco de Lautaro Guaraglia. Reynoso fue el más destacado en ese ir del Albo, ganando por su sector y convirtiéndose en la pieza clave del ataque local, porque Montoya ya no fue el mismo desde que Sacca reemplazó a Roberto Domínguez en la defensa visitante.

Cocco dio un paso al frente en Santa Rosa, haciéndose importante en el borde del área con un par de remates frontales, el primero desviado por un defensor y el otro controlado por Guaraglia.

El arquero alboyense también fue fundamental para mantener su valla en cero ante una media vuelta de Martínez que sacó espectacularmente contra un palo, y para achicar ante un mano a mano de Reynoso que definió apenas desviado tras una linda habilitación de Martín Abraham.

Santa Rosa luchó hasta el final (un remate de Ignacio Zúñiga se fue apenas afuera tras un desvío a los 53), pero no pudo igualar el partido y se quedó con manos vacías, aunque se llevó un aplauso final de su gente, que reconoció la gran campaña realizada.

All Boys terminó festejando de cara a los suyos porque ganó el clásico, porque se clasificó a una final y porque la defensa del título aún sigue viva.