Mató a tiros a su vecina y se fugó
Una mujer de 41 años fue asesinada de tres balazos y por el crimen buscan a su vecina, que fue denunciada en 30 oportunidades por hechos de violencia y abuso de armas, a quien le reprochó la suciedad y el olor que emanaba de su casa de Villa Bosch, donde cuida y mantiene a más de 15 perros.
La sindicada agresora, Liliana Inés Bargas (62), huyó tras el ataque y, según denunció su hermana a la prensa, es una mujer muy peligrosa, violenta, con problemas psiquiátricos, que durante toda su infancia la sometió a un calvario y agredió hasta a sus propios padres, entre ellos a su madre de 91 años, con quien vivía.
Fuentes policiales informaron a Télam que el episodio ocurrió alrededor de las 20.50 del jueves en la puerta de la casa donde se generó una discusión entre Bargas y una vecina, Carmen Aurora Zorzoli, de 41 años.
Reproches.
Según los voceros, la vecina le recriminó a Bargas el estado de abandono, suciedad y olor que salía de su casa, donde tiene más de 15 perros que, según los habitantes del barrio, son agresivos, atacan a otros y hasta se "comieron a otros animales" del barrio.
En medio de la discusión, que según los habitantes del barrio fue una de las tantas que Bargas mantenía con los vecinos -todos indignados por el mismo asunto de los perros-, ésta extrajo un arma calibre 22 y asesinó a Zorzoli de tres balazos, dos en la cabeza y uno en el tórax.
Algunos testigos del episodio contaron a la prensa que la mujer primero le pegó dos tiros, entró a su casa, agarró un bolso, cerró la puerta con llave, dejó a su madre encerrada y, luego, cuando escapaba, remató a Zorzoli de un tercer disparo.
Violenta y peligrosa.
Si bien vecinos dijeron a la prensa que Bargas pertenecía a una fuerza de seguridad e incluso había sido buzo táctico, ayer su hermana, Susana Bargas, contó al canal C5N que Liliana "está mal de la cabeza", "le hizo creer a todos eso y es mentira", y relató que desde su infancia es violenta y peligrosa.
30 denuncias.
El jueves, la sindicada agresora escapó con una mochila y dejó encerrada en el inmueble a su madre, de 91 años, con su movilidad reducida y con Alzheimer. La anciana debió ser rescatada ayer por grupos policiales especiales de la policía y bomberos, ya que estaba encerrada y rodeada por todos los perros, que impedían el ingreso del personal a la casa. (Télam)
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