Una nueva pista del triple femicidio vincula a un narco de La Matanza cercano a Brenda
En las últimas horas, una nueva pista llegó a oídos de la Justicia provincial y federal que investiga el macabro triple femicidio de Brenda, Morena y Lara, cometido el 20 de septiembre en Florencio Varela.
Apunta a un joven traficante de La Matanza, sumamente cercano a Brenda Loreley del Castillo, aseguran fuentes del caso a Infobae. El joven es reconocible a simple vista, dada una señal física particular.
Se cree que es miembro de una banda que opera con una mezcla de menudeo de droga y extorsiones en la zona del monoblock 19 de Ciudad Evita, donde vivía Brenda, tal como indican sus registros personales.
Su figura, introducida por una serie de datos de calle, era desconocida hasta ahora en el expedientes, ahora en manos de la UFI de Homicidios de La Matanza, con el fiscal Adrián Arribas, que posee un largo historial de éxito en la resolución de casos calientes, como el asesinato de Pedro Barrientos, el colectivero asesinado en Virrey del Pino en abril de 2024. La PROCUNAR, el área de la Procuración dedicada a esclarecer delitos de narcotráfico liderada por el fiscal Diego Iglesias, fue convocada por el fiscal anterior del caso, Gastón Dupláa, para colaborar en la investigación.
Ahora, ese joven traficante entra en el foco de la causa. Las primeras versiones indican que no tendría un rol en las muertes, sería más testigo que imputado. Uno de estos investigadores hipotetiza: “Si es dealer y era cercano a Brenda, tal vez, algo sabe”.
La banda a la que pertenecería, aseguran fuentes en el territorio, es un desprendimiento de las viejas células de Nicolás Nahuel Guimil, alias “Chaki Chan”, uno de los capos más temibles de la historia bonaerense reciente, procesado y preso en la cárcel de Marcos Paz desde julio de 2023, tras montar una estructura narco que atravesaba el conurbano. Su organización intentó copar el barrio Las Antenas de Lomas del Mirador: los propios vecinos los repelieron a tiros. Un capo preso implica una falta de control en el territorio. Entonces, las segundas y terceras líneas dan un paso al frente.
La identidad exacta y el prontuario de este joven cercano a Brenda Loreley, por lo pronto, se desconoce. Por lo pronto, los investigadores cuentan con un apodo.
El misterio de la pista narco
A comienzos de la mañana del viernes, el fiscal Arribas, que recibió el mando de la causa a comienzos de la noche de ayer, aguardaba el expediente completo para evaluar y requerir una nueva serie de medidas, entre ellas, nuevas pericias criminalísticas. También citó al comisario Flavio Marino, jefe de la DDI de La Matanza, para que lo informe de los contenidos y el rumbo de la investigación.
La hipótesis narco del caso, introducida por autoridades bonaerenses, parece evidente dado el aberrante modo en que Brenda y sus amigas fueron asesinadas. Del Castillo recibió un trato macabro. La autopsia a su cuerpo del fractura de cráneo, que le provocó la muerte, aplastamiento macizo facial y heridas punzocortantes en el cuello. Además, tenía un corte transversal que le abrió el abdomen de punta a punta, una herida post-mortem.
La pista, también, apuntaba a traficantes Policía Bonaerense, con el apoyo de la Policía de la Ciudad, allanó la Villa Zavaleta de Barracas en busca del principal sospechoso, “Pequeño J”. o “Julito”, un supuesto traficante peruano de 23 años que habría ordenado el triple femicidio. (Infobae).
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