Caras y voces para la Cámara baja

Al igual que en el Senado, la provincia pone en juego tres lugares en la Cámara de Diputados de la Nación. Aquí se detalla a quienes encabezan las cinco listas que se presentan para ser elegidas el domingo próximo.

 

              

VARINIA MARíN  Frente de Todos

 

Tiene 53 años, es una de las hijas del exgobernador Rubén Hugo Marín y es la actual secretaria legislativa en la Cámara de Diputados de la provincia. En una entrevista reciente en Radio Noticias recordó: “Nací en General Pico e hice la primaria en la Escuela 111 y del ’73 al '76 en la Escuela 143 de Santa Rosa. Luego vino el golpe militar y volvimos a Pico. Cuando mi familia se mudó a Santa Rosa al resultar mi padre electo gobernador por primera vez en 1983, vine a cursar mi último año en la Escuela Normal y mis estudios de Abogacía los realicé en la UBA (Universidad de Buenos Aires)". Y agregó que "trabajo desde los 20 años, algunos de ellos fueron en el ejercicio de la profesión. Mis hijas se llaman Malena y Renata y ambas estudian en Córdoba”.

 

Según contó, la política “forma parte de mi vida desde que tengo memoria. Comencé en la militancia al formar el Centro de Estudiantes del Colegio Normal, y ya en Buenos Aires creamos el Centro de Estudiantes Pampeanos en esa ciudad y no paré más. Es una pasión que me atrapa siempre, el peronismo, la militancia, me acompañaron en los mejores momentos y en los peores golpes de mi vida”.

 

Tener el apellido de quien fue cuatro veces gobernador, senador y diputado nacional, y presidente del Partido Justicialista durante muchos años, supone una situación especial en la política local, y ‘Lichi’ lo sabe. “En lo personal es como cualquier apellido, pero en lo político siempre suma porque es alguien respetado y elegido tantas veces que es imposible no sentir orgullo”. Y razona que “invariablemente estará quien te quiera o quien te deteste, aún sin conocerte. Tal vez en la adolescencia me condicionó más, pero con el tiempo el cuero se endurece un poco para las críticas, pero el afecto siempre es más fuerte”.

 

 

 

MARTíN MAQUIEYRA Juntos por el Cambio

 

Es el del medio de tres hermanos de una familia piquense al que le tocó, con 27 años, asumir como diputado nacional siendo el más joven de la Cámara en ese momento. Ahora a los 32, busca seguir representando a la provincia en la Cámara baja.

 

Hizo toda la escuela primaria y secundaria en General Pico, y a los 18 años se fue a vivir al departamento de una tía en Palermo, Buenos Aires, “a estudiar Ciencias Políticas".

 

En esa época aprovechó mucho a despuntar el vicio en su otra gran pasión que es el rock nacional. “Me encantaba poder ir a los recitales, fui muy seguidor de La Renga, los fui a ver por todo el país en esa época de adolescente. También me gusta mucho Patricio Rey y los Redonditos de Ricota, y tengo un problema con mi pareja, Teresita, con quien nos casaremos en febrero y no quiere que ingresemos a la ceremonia con ‘Nuestro amo juega al esclavo’, contó en el programa “La Pampa va”, por Radio Noticias.

 

Fue fanático del básquet de Sportivo Independiente durante la época de gloria del club en los ’90 aunque en su deporte, la natación, compitió para “la contra”, Pico Football Club (“pasa que ahí está la única pileta climatizada”). En el deporte del agua compitió a nivel provincial y nacional.

 

Además es hincha de River y en lo otro que se destaca Martín Maquieyra es en los asados. “Con el grupo de amigos siempre nos gustó más la juntada que salir, algunas veces hemos salido a boliches y bares de Pico, pero siempre fuimos más de la juntada, de la previa, el asado, que de salir a bailar. Y yo siempre fui el asador del grupo, me gusta mucho, incluso competí en concursos de asadores, a pesar de que nunca me tocó ganar ni estar en el podio”.

 

Maquieyra es actual diputado nacional (ingresó en lugar de Carlos Mac Allister en 2016 cuando el exfutbolista fue a la Secretaría de Deportes en el gobierno de Mauricio Macri, y en 2017 el piquense resultó electo en las elecciones de ese año) y hoy es uno de los principales referentes del macrismo en La Pampa.

 

 

 

LUCIANO GONZáLEZ CABIATI  Frente de Izquierda Unidad

 

Tiene 44 años, es de Santa Rosa y junto a su pareja Daniela Roveda tienen dos hijos, Lucio (15) y Lorenzo (11). Hincha de toda la vida del club All Boys (se crió frente a la sede de la calle Lagos y hoy vive allí), siempre jugó al básquet e incluso hoy lo hace junto a un grupo de veteranos de ese deporte. Además, sus dos hijos también juegan con la pelota naranja.

 

Defensor de las causas sociales y actual trabajador de la Secretaría de Agricultura de La Nación, Luciano se acercó en su adolescencia al Partido Obrero y desde allí construyó su militancia. Fue delegado gremial y hoy integra el Consejo Directivo de ATE La Pampa.

 

"Cuando cursaba en la secundaria traté de armar el Centro de Estudiantes en la Escuela Normal, siempre estaba movilizado y tratando de generar cosas. Una vez que me fui a Buenos Aires para estudiar la carrera de Ciencias Políticas empecé a orientarme hacia la izquierda”.

 

El referente del Partido Obrero recuerda que su militancia se acentuó durante el gobierno de Fernando de la Rúa, cuando el entonces ministro de Economía Ricardo López Murphy quiso imponer un recorte a la educación. “La resistencia fue impresionante y nos sirvió a muchos para formarnos en nuestras ideas y objetivos. Para mí hoy la idea central pasa por que desde los trabajadores se pueda conformar un partido de la clase obrera”.

 

Hace unos años González ingresó a la UNLPam para estudiar Comunicación Social y “desde el 2016 decidimos con otros compañeros de la Facultad acompañar la construcción del PO pampeano que había arrancado en Colonia Barón. Junto a un enorme militante y fundador del Partido Obrero, Franco Martínez, comenzamos a desarrollar el partido. La trágica y temprana pérdida de Franco fue un golpe enorme para todos, pero nos dio otro motivo para esforzarnos en construir una alternativa política de izquierda en nuestra provincia”.

 

Recordó que sus padres, “radicales de toda la vida, me formaron en la idea de defender lo que uno piensa, siente y sufre. Mi vieja, una luchadora docente que la peleó hasta sus últimos días, tenía la esperanza de que fuese radical. Mi camino fue otro, el socialista”.

 

 

MARINA VANINI Partido  Socialista

 

La abogada oriunda de General Pico tiene 48 años y buscará llegar al Congreso de la mano del Partido Socialista en el que siempre militó. Con Luis Solana como candidato a senador, Vanini postula distintas cuestiones a la hora de argumentar su aspiración a la banca.

 

“Mi motivación y mi impulso es por el supremo interés que tienen la mayoría de los ciudadanos, de bregar por una sociedad que contenga e integre a todas las personas, con las variadas y diferentes expectativas de vida de cada uno", explicó Vanini sobre sus intenciones al presentarse como candidata para llegar al Congreso.

 

“Esto exige un gran sentido de cooperación y consenso, y desde luego exige que tengamos honestidad, responsabilidad e idoneidad para tratar y defender aquellos temas sensibles y prioritarios que requiere el desarrollo armónico de los argentinos”, agregó quien es reconocida por su extenso trabajo junto al cooperativismo y la economía social en su ciudad natal.

 

Vanini resalta que el Socialismo siempre defendió las banderas de la equidad y de la lucha por la igualdad de derechos. “Una mujer emblemática como Alicia Moreau de Justo es ejemplo de compromiso social con la mujer y la humanidad toda”, expresó.

 

Vanini recordó que años atrás fue convocada por el Partido Socialista para sumarse en la militancia. “Después de algunas dudas decidí hacerlo en base a que los principios y valores que plantean los dirigentes, y que sostiene el Partido Socialista, son aquellos con los que yo acuerdo, así fue cómo definí participar en este espacio

 

partidario”.

 

Su desempeño en la presidencia del Consejo Directivo de la Corpico (la Cooperativa piquense) fue uno de los varios antecedentes valiosos que tuvieron en cuenta los dirigentes del PS para convocarla. “Ellos hicieron hincapié en esa participación que tuve en Corpico y en otras instituciones y actividades relacionadas con cuestiones sociales y con la defensa y la promoción de derechos, además de otros temas de gran sensibilidad social”.

 

 

 

AYELéN PILCIC Movimiento al Socialismo

 

Se trata de un nombre nuevo en La Pampa. De hecho, nació y vivió en Mar del Plata hasta que decidió radicarse en nuestra provincia. Lo hizo con su pareja, un pampeano con quien comparte la misma profesión liberal: ambos son arquitectos. Con la militancia de izquierda arraigada en sus padres y hermanos, la piquense por adopción tiene 42 años y busca su lugar en la Cámara baja.

 

Es docente de la EPET Nº 2 de Pico y, según contó, la militancia “es natural en mí, es una forma de vida. No me imagino de otra manera que no sea peleando por lo que creo. En mi caso me acerqué a la militancia a partir del feminismo. Mis papás son militantes de izquierda de toda su vida y al día de hoy siguen militando. Es una elección de vida, no solo de principios y de ideales. Mi mamá es psicóloga y docente, ahora ya jubilada, y mi papá es arquitecto y docente, también ya jubilado”.

 

Ayelén es la menor de cuatro hermanos, tres mujeres y un varón. “Mi hermano más grande, que vive en Rosario, también milita en el nuevo MAS. La militancia es algo que nos ha unido mucho. Mis papás son luchadores, trabajadores y nunca renunciaron a sus principios. Papá fue perseguido por los militares en la última dictadura. Siento un orgullo muy grande por él y sigo sus pasos”.

 

Respecto al porqué de que se haya instalado en esta provincia, afirmó: “Vinimos a La Pampa para buscar una vida más tranquila. Es una provincia que da muchas oportunidades. Acá pudimos abrir un estudio de arquitectura y dedicarnos también a la docencia, que es algo que las ciudades grandes no permiten. Esta es una de las fortalezas que tiene la provincia. Además, desde el punto de vista de la arquitectura, es una provincia donde hay mucho por hacer”.

 

Pilcic resaltó que antes de llegar a Pico “ya venía de la militancia en Mar del Plata y nos abrimos camino acá y en las elecciones tuvimos la posibilidad de mostrar una alternativa, lo cual hizo que fuéramos creciendo. Somos un partido chico, con pocos recursos, algo que nos impide estar en toda la provincia. Por principios no recibimos aportes y además tenemos que seguir trabajando para vivir, lo cual también nos deja poco margen de tiempo”.