Con fragancia emprendedora

Julieta Rinaudi abrió “Lecens”, su local santarroseño de venta de perfumes, fragancias, velas y otros productos aromatizantes. Además, hace envíos a todo el país gracias a la venta online.

Dar el paso y animarse a abrir un espacio propio en una de las principales avenidas de la ciudad por supuesto que requiere, entre otros condimentos; planificación, respaldo y convencimiento. Pero también el empuje necesario para “tirarse a la pileta”, algo que es tan habitual en el universo emprendedor. Y ese resumen de la breve historia de Julieta en el campo laboral es el que desembocó en “Lecens”, el coqueto local que desde diciembre pasado ofrece al público toda una gama de fragancias tan frescas como embriagadoras. Perfumes que guardan esos secretos que, en manos de una experta, salen a la luz para aromatizar espacios y momentos con el mejor buen gusto.

Julieta Rinaudi tiene 26 años y luego de finalizar el colegio secundario estudió durante tres años la carrera de Contadora. Luego cambió a Nutricionista y mientras realizaba pasantías o trabajos ocasionales relacionados a esos rubros, comenzó con la venta de perfumes. Imitaciones de las grandes marcas internacionales que tienen sus réplicas de gran calidad pero con un precio mucho menor que las originales.

“Estaba en un momento en el que no sabía para donde arrancar porque estaba insegura con la universidad y no me hallaba en lo laboral. Y en el 2020 abrí un showroom y vendía los perfumes también por Instagram. Era mi hobby y la posibilidad de hacer un extra a los trabajos que iban saliendo mientras seguía estudiando, hasta que empecé a ver que la gente me conocía cada vez más y compraba lo que yo ofrecía, y el quiebre se dio en el 2023 cuando empezó un crecimiento mucho más fuerte gracias a las redes y al boca a boca. Ahí me metí de lleno en el emprendimiento y lo tomé muy en serio. Arranqué un curso de perfumería, fui investigando cada vez más y aprendí mucho en forma autodidacta a través de internet”, cuenta Julieta a LA ARENA en el flamante local de la avenida Uruguay 260, un edificio de locales comerciales recién inaugurado en el que dominan los grandes ventanales de vidrio y que también tiene una historia detrás, fundamental para la decisión que adoptó la joven santarroseña.

“Mi amiga Lu tiene desde hace tiempo un local de venta de ropa en la calle 9 de Julio y yo trabajaba con ella por la mañana, y a la tarde estudiaba. Y en ese periodo la veía crecer y pensaba que quería algo así, fue una inspiración muy importante para mí y un impulso clave porque hace unos meses me incentivó a que abra el negocio. Yo dudaba mucho, no me animaba porque me parecía demasiado pero al mismo tiempo me entusiasmaba la idea. Finalmente decidimos dividir el local y quedó la mitad para Lecens y la otra mitad para su tienda, así que estamos juntas pero cada una en lo suyo”, celebra Julieta.

Apertura.

“Lecens” (el perfil en Instagram es lecenss_) abrió sus puertas en un mes clave para las ventas. Y el público respondió. “Arranqué re bien, mucha gente que ya me conocía se acercó y hubo otro gran porcentaje de clientela que entró porque la Uruguay es una avenida recontra transitada, el local es vistoso y los productos tienen mucha aceptación, así que me fue mejor de lo que esperaba porque con las fiestas de fin de año las ventas siempre crecen muchísimo”.

- ¿Qué tipo de perfumes se pueden encontrar en tu negocio?

- Son imitaciones de perfumes importados y son de muy buena calidad. Son imitaciones con una gran concentración de esencia, que es el perfume en sí, entonces la gente los busca porque son buenos, de comprobada calidad y te duran un buen tiempo, no es que a los diez minutos se te fue la fragancia. Empecé con re poquito stock y le fui sumando mucho gracias a la gran demanda de la gente. Además, tengo velas y otras cosas para complementar, pero mi fuerte básicamente son los perfumes. En principio me concentraba más en lo femenino pero el público de hombres creció muchísimo en el último tiempo así que hoy también tengo una gran variedad en lo que es masculino.

Bolsillo.

El perfume, si bien hay de todo tipo de precio y calidad como cualquier otro producto comercial, generalmente se asocia a montos elevados, por eso en tiempos de bolsillos comprimidos como los actuales resulta primordial contar con otras alternativas.

“Un perfume bueno es un producto caro y en una situación de crisis y de poca plata, es difícil acceder a poder comprarlo. Antes era más accesible comprar un perfume original o importado pero hoy tiene un precio muy alto, por eso la gente busca la imitación. La mejor muestra de que tienen mucha aceptación las fragancias que vendo es que la gente vuelve y compra lo mismo o se lleva otras para probar”, remarca Julieta que también busca ampliar las posibilidades que ofrece la venta online.

“Me estoy concentrando en esa vía porque te brinda la oportunidad de hacer envíos a todo el país y te abre puertas. Hoy a través de las redes pueden aparecer clientes desde cualquier lugar y eso hay que aprovecharlo para crecer”, valora quien recibe la colaboración de su hermana y de su mamá, que cuando pueden se acercan al local para “dar una mano” en lo que sea necesario.

El crecimiento de Lecens se dio de manera vertiginosa y Julieta no quiere poner un freno a su carrera emprendedora, por eso ya planifica y sueña con lo que puede venir.

“Mi gran objetivo es llegar a elaborar mis propias fragancias, tener perfumes de mi sello. Es un camino largo porque no depende sólo de tus ganas y conocimientos porque todo tiene que pasar por un laboratorio y hacer todo un recorrido, pero es a lo que apunto y lo que más me gustaría”, asegura la dueña de una marca que ya tiene su sello, el de la fragancia emprendedora.