Energía emprendedora

José Luis Martínez acumula casi 50 años vinculado al comercio de materiales eléctricos. Luego de una larga etapa como empleado en 2006 se hizo cargo de "Centro Luz", un referente del rubro que se caracteriza por la atención personalizada y la calidad de lo que ofrece.

 

"Tenía 15 años y vine del campo directamente a trabajar. Nunca me hubiese imaginado que iba a tener un negocio de electricidad", reflexiona José Luis, casi un pensamiento en voz alta que le hace dar cuenta del extenso camino recorrido. Es que, según hace la sumatoria, se dedica al rubro desde hace 48 años y, agrega a la cuenta, es el segundo de mayor antigüedad en Santa Rosa después de quien fuera "su mentor" cuando, en plena adolescencia, un comerciante local le dio una oportunidad laboral que no desaprovechó.

 

"Nací en Villa Maza (en el límite de La Pampa y la provincia de Buenos Aires) y me crié en la zona rural de Anchorena porque mi papá era puestero así que yo trabajaba con él. Pero mi viejo se enfermó cuando yo tenía 15 y nos vinimos a Santa Rosa. Al poco tiempo falleció y tuve que salir a buscar trabajo y ahí fue que entré en Béjar Electricidad, era cadete así que andaba por todos lados en bici llevando y trayendo cosas", recuerda con humildad José Luis Martínez que hoy, a sus 63 años, es uno de los referentes en el rubro con su local de Centro Luz, una mini pyme que ofrece todo lo relacionado con materiales eléctricos, iluminación para hogares e industrias, extractores de aire, porteros eléctricos y productos en general.

 

"Seguramente hoy soy el segundo en cuanto a antigüedad en la ciudad en lo que es comercio de electricidad, detrás de Béjar. Yo estuve con ellos desde el '74 hasta el '91, también trabajé como acomodador y boletero en el Cine Don Bosco, y en la calle con la parte eléctrica haciendo un poco de todo lo que había aprendido. Béjar fue quien me enseñó, él fue un maestro para mí y a eso se lo voy a reconocer siempre. También porque me hizo conocer Buenos Aires cuando me llevaba para presentarme a los proveedores y demás contactos, algo muy valioso. Cuando dejé de trabajar con ellos me fui a Centro Luz que estaba en la avenida San Martín y era propiedad de Mary Peratta", señala José Luis en la oficina que tiene en el edificio donde hoy funciona el local de la avenida Spinetto 36.

 

"El 13 de febrero van a hacer 48 años que me dedico a esto, es toda una vida porque en 2006 me ofrecieron comprar Centro Luz. En realidad yo ya tenía la mayor parte de lo que era el manejo diario del negocio así que fue seguir por el mismo camino nada más que como dueño. Hicimos un gran esfuerzo con toda mi familia y después de cinco años logramos pagarlo en tiempo y forma, fue muy duro en varios momentos pero pudimos cumplir y seguir adelante".

 

Martínez trabaja junto a cuatro personas, entre ellas su ex pareja, y cuando se le pide que distinga una característica del funcionamiento de su emprendimiento no lo duda: "El asesoramiento y la atención que le damos al cliente. Hoy vienen los nietos de quienes yo atendía hace tantos años, entonces hay mucha gente que me conoce y también vienen mucho desde otros pueblos de la provincia. Yo me dedico más que nada a la gente, no a las obras grandes, a mi me estimula eso de tratar con quien viene a buscar información y las mejores opciones para la parte hogareña".

 

Crisis y pandemia.

 

En Centro Luz hay todo tipo de lámparas y productos de iluminación. Desde los más grandes hasta los "pitutos" más pequeños necesarios para alguna conexión. A lo largo de las décadas Martínez ha sido testigo de muchas de las graves crisis económicas y sociales del país y, aunque pudo sobrevivir comercialmente, las marcas quedan.

 

"Yo me entretengo con esto pero me lleva mucho tiempo, y la verdad es que nunca he parado de laburar. Los horarios del comercio son matadores, vengo a las 8 de la mañana y me voy a las 13 y a la tarde hasta las 21 por lo menos. Hago un poco de todo: mostrador, bancos, compras. No es queja porque por suerte no tengo problemas fuera del negocio: mis dos hijos ya son grandes y hacen su vida, simplemente pienso que debería pasear un poco y disfrutar otras cosas ahora que estoy sano y en condiciones de andar. Las he pasado todas: el Rodrigazo, la hiperinflación de Alfonsín, Domingo Cavallo, la caída de 2001... todo", enumera José Luis, conocido como 'Choli' y quien reconoce que la pandemia es, más allá de distintas crisis y ministros de Economía, "lo más difícil de atravesar. Nos obligó a estar 20 días cerrados el año pasado y es algo muy difícil de sobrellevar".

 

Mudanza.

 

Si bien originalmente Centro Luz estaba en la céntrica avenida San Martín, la mudanza a la Spinetto significó un cambio positivo para un negocio que ofrece los distintos planes y promociones del Banco de La Pampa.

 

"Cuando nos vinimos para esta dirección tenía algunas dudas, pero hay muchísimo movimiento y éste es un lugar de paso de mucha gente que viaja por la ruta nacional 35, entonces recibo mucho visitante ocasional. Y para la clientela local tengo siempre las promociones del Banco Pampa. En toda la trayectoria hemos tenido una gran relación con el banco, nunca tuve ningún problema y para la gente es una ventaja poder comprar con los distintos paquetes y planes", valora José Luis, quien remarca que el espacio disponible le "quedó chico" para la gran cantidad de mercadería que posee.

 

"Estamos desbordados de cosas, tengo un galpón de 600 metros pero ya está, con lo que tenemos estamos bien, no quiero agrandar o meterme en cosas más grandes. Yo sigo siendo

 

la misma persona, con la misma pilcha, manejo el negocio junto a los empleados y punto. La gente me conoce y creo que valora la honestidad y la buena atención", destaca Martínez y vuelve a trazar una rápida línea de tiempo en su vida personal y laboral.

 

"Si lo pienso me parece un poco raro porque pasé de andar en el campo a caballo todo el día a tener una casa de electricidad cuando yo no sabía ni qué era un enchufe. Fue una buena posibilidad y creo que pude aprovecharla", apunta José Luis que tuvo la energía necesaria para mantener en pie su comercio y hoy sigue vigente gracias a su luz emprendedora.