Un pasaporte hacia el sabor

Haneen Nasser y Besim Assad concretaron el anhelo de expandir su emprendimiento gastronómico con lo mejor de la comida y las costumbres árabes. Sirven platos con los sabores tradicionales de sus orígenes.

La historia de Haneen se hizo conocida hace ya siete años, cuando llegó desde Siria, desde su lugar de origen llamado Latakia, a Parera. La guerra que desangraba su país la llevó a emigrar y el 12 de julio de 2016 se convirtió en la primera refugiada en residir en La Pampa en el marco del Programa especial de visado humanitario para extranjeros afectados por el conflicto de la República Árabe Siria. Y luego de unos meses en Parera, se mudó a Santa Rosa.

La joven, que hoy tiene 31 años, tuvo que adaptarse de a poco a su nueva vida pero ya instalada en la capital pampeana conoció a quien sería clave para sentirse más cómoda: Besim. Con él hoy comparte la alegría de haber dado un paso clave en ese proyecto emprendedor que tiene ya su propio restaurante con lo mejor de la comida de esos orígenes.

“Estamos súper felices porque pudimos concretar nuestro sueño. Si bien se retrasó porque nuestro plan era abrir a principios de año, hoy estamos doblemente contentos porque inauguramos y podemos tener un espacio que es casi cultural.  No es solo disfrutar de la gastronomía sirio libanesa sino que es una experiencia completa con música típica y vamos a ir programando algún show en vivo. También se puede tomar el café estilo árabe y vamos a ir ofreciendo todo lo típico de nuestras culturas”, explicó la pareja respecto a ‘Arabian’ que abrió sus puertas en septiembre pasado en el salón de la Asociación Árabe, en la calle Molas 92  (esquina Viniegra). El WhatsApp de consultas y reservas es el (2954) 571653 y también se pueden consultar las características del lugar en el Instagram del restó.

Haneen y Besim comenzaron a elaborar comida en 2018, con las clásicas fatay, las empanadas árabes. Recibían pedidos y trabajaban desde su departamento en Villa del Busto. También eran contratados para eventos especiales y ya en ese momento proyectaban la apertura del restaurante que finalmente ahora pudieron concretar.

“Por ahora sólo abrimos los sábados por la noche, seguimos con los pedidos pero queríamos abrir. Toda la ambientación se vincula con nuestra cultura y orígenes y por suerte la respuesta de la gente ha sido buenísima. Nuestra idea es organizar reuniones o cenas de trabajo y que se puedan hacer durante la semana, no sólo un sábado”, explicó Basim.
Sabores.

La propuesta de Arabian es un menú de cuatro pasos. No hay una carta para elegir sobre distintas opciones sino que son ellos quienes proponen qué comer. Sí hay una carta para elegir las bebidas.
Hummus, queso con aceitunas negras, panes para untar y la muhamara, que es una pasta de morrones asados con condimentos como oliva, comino, ajo, trigo y nueces, componen la entrada. Luego llega el plato principal con carne asada, elaborada bien a la manera oriental,  junto a una ensalada de perejil, trigo fino y verdeo, además de berenjena ahumada. Para el postre quedan los “deditos de novia” y el clásico cafecito árabe.

“Queríamos ofrecer esta alternativa en la ciudad, si bien no hay presencia masiva de la colectividad, sí a mucha gente le gusta probar otras cosas y creemos que ofrecemos toda una experiencia completa. Hacemos todo con nuestro mayor amor y poder concretar este paso para nosotros es algo que nos llena de satisfacción”, destacan.

Historia.
Cuando Haneen llegó a la provincia, Besim colaboraba con la Asociación Árabe porque sus padres integraban la comisión y enseguida lo contactaron para hacer de traductor de la joven siria ya que hablaba inglés y él estudiaba el Profesorado de ese idioma en la Universidad Nacional de La Pampa UNLPam). “Hablábamos mucho todo el tiempo y así comenzó una relación porque enseguida pegamos onda. Y ya hace siete años que estamos juntos”, cuenta Besim.

“Hoy existe toda una nueva tendencia gastronómica, la gente busca alimentarse de otra manera, está mucho más abierta y explora nuevos sabores y combinaciones, así que eso a nosotros nos gusta y nos conviene porque pudimos ir creciendo. Hoy ya no se mira como algo raro un plato de comida árabe y por eso ofrecemos toda una propuesta completa”, resaltan.
Entre las comidas que se pueden encargar está la clásica picada árabe, que la preparan con distintos ingredientes, al igual que las empanadas de carne. También están las de verdura con menta y queso que es algo típico de Siria que Haneen lo adoptó con un formato propio. Las hojas de parra son los niños envueltos que se hacen rellenos y también ofrecen postres como la Baklava, que es el dulce más emblemático de la cocina turca.

Variantes.
En las reuniones sociales en las que trabajan se ofrece el shawarma, esa especie de sándwich empanado relleno con finas rebanadas de carne y cocinadas en un asador vertical que gira lentamente. Originalmente se prepara con carne de cordero, pero hoy también se hace con pollo, pavo, res o ternera y distintos ingredientes a gusto y placer.
“Nuestra ilusión era tener el salón ambientado de tal manera que quien entra pueda sentir que está en Siria, por eso le fui agregando cosas que me traje, más otras de la familia de Besim. Es un lugar con todo lo típico para poder ofrecer una propuesta completa”, destaca Haneen son una sonrisa grande y mientras habla un castellano-pampeano que se entiende a la perfección. Una historia cargada de ingredientes, como los platos que elabora y ofrece Arabian en plena llanura pampeana.