Lunes 22 de abril 2024

U$S 400 millones de soja acopiada en el campo pampeano

Redacción 25/06/2022 - 00.14.hs

La incertidumbre económica, y la suba de la brecha entre dólar oficial y paralelos, favorecen la especulación de los productores, que deciden retener la soja (más de la mitad de la producción) y no exportarla.

 

JUAN JOSÉ REYES

 

Según estadísticas oficiales del gobierno nacional, los chacareros pampeanos tienen almacenados unas 657.860 toneladas de soja aún sin vender por parte de productores, acopiadores y cooperativas de las 1.123.733 toneladas producidas en la campaña pasada, cosechadas en 482.117 hectáreas.

 

Es decir U$S 400 millones a su precio FOB, de U$S 600 antes de retenciones (U$S 268 millones) y del cepo al dólar oficial que la disminuye a unos $ 36.180 millones. Si bien el monto es millonario, lo que se le reclama a nuestro campo son U$S 64,7 millones de dólares y en el país U$S 2.500 millones aún no liquidados en junio, con un gobierno lejos de poder acumular divisas ante fuertes demandas de importadores y pagos de energía.

 

La desaceleración de las ventas de soja ante la incertidumbre económica y la suba de la brecha entre dólar oficial y paralelo (100%) y blue (85%) preocupan cada vez más. En pocas palabras, cuando hay turbulencias en los mercados, el productor prefiere conservar la soja como refugio de valor a pesar de su alto precio internacional.

 

Está demostrado que más de la mitad del stock granario está almacenado en el cuadrángulo noreste de La Pampa. Hablamos de los cinco departamentos claves como los son Chapaleufú, Quemú, Maraco, Catrilo y Conhello donde la existencia física sigue creciendo a la sazón de precios externos elevados y una brecha cambiaria que bordea el 100%, por tanto muchos son reticentes en vender, pero aun así sigue siendo notable la liquidación de divisas.

 

Datos oficiales.

 

Aún a precios muy altos o cualquier otro estímulo que brinde el Gobierno para que los agricultores vendan en forma acelerada su cosecha, si la economía continúa mostrando turbulencias, los chacareros retendrán la soja como refugio de valor para encarar la próxima campaña. La estadística oficial elaborada por el Ministerio de Agricultura y Ganadería de la Nación deja en evidencia esta situación en todo el país.

 

Da cuenta que hasta el momento los agricultores argentinos vendieron un total de 17,9 millones de toneladas, pero todavía quedan por vender unas 25,4 millones de toneladas más de una cosecha estimada en 43,3 millones de toneladas. Si bien en los últimos días se vendieron 578.000 toneladas, lo que marca una retracción de 208.000 toneladas en comparación con los siete días previos la situación preocupa pues la venta permanece atrasada en más de 9 puntos porcentuales respecto al ritmo de la campaña previa y además del total vendido, solo 10 millones de toneladas fueron con precio cerrado, el resto es a fijar, lo que

 

también implicaría en la práctica una desaceleración del ingreso de divisas.

 

Poco alentador.

 

En concreto, el panorama no es nada alentador ya que mientras se plantean diversos escenarios posibles en la toma de medidas para contener la demanda de los sectores importadores pero en el corto plazo también un menor ingreso de dólares por parte del sector agropecuarios si los productores no quieren vender su soja. Esta situación impacta de lleno en el Banco Central para poder contener el tipo de cambio y acumular las divisas tan necesarias. A pesar de que la liquidación de las empresas agroexportadoras en lo que va del año trepó al récord histórico de U$S 15.000 millones y solo en la primera quincena de junio el campo aportó U$S 2.200 millones, el gobierno necesita mayor ingreso de dólares genuinos a la economía, ante la demanda de sectores importadores, y sobre todo para el pago de importación de energía.

 

Los antecedentes son poco auspiciosos, en octubre de 2020, en plena pandemia cuando el gobierno también necesitaba que entren más dólares del campo, el ministro Martín Guzmán, dispuso una baja temporal de las retenciones a la soja hasta diciembre. En la práctica la medida tuvo muy poco efecto ya que las ventas de soja lejos estuvieron de acelerarse, aunque la oleaginosa no ostentaba los actuales precios internacionales que la posicionan por arriba de los u$s 600 por tonelada.

 

Acopio pampeano.

 

Según el Ministerio de Agricultura, en la campaña sojera 2020/21 en La Pampa se obtuvo 1.123.733 toneladas en un área de siembra y cosecha de 493.517 y 482.117 hectáreas respectivamente con un rendimiento promedio de 2.331 kilogramos por hectárea. La soja de primera aportó 953.553 toneladas y la de segunda otros 170.178 toneladas.

 

Hubo alta producción en dos departamentos. El primero, Chapaleufú (Alvear, Sarah, Ceballos, H. Lagos y Larroude) con 275.810 toneladas (24,5%); Maracó (General Pico, Agustoni, Dorila y Speluzzi) con 222.490 toneladas, 21,8% del total y Quemú Quemú con 121.400 toneladas, es decir el 11% del total. En definitiva, entre los tres departamentos se apoderaron del 55,3% de la cosecha.

 

Si bien tanto la rentabilidad como el margen bruto de indiferencia en campos arrendados cayó por la suba alquileres, la notable suba de los precios hizo recuperar cualquier irregularidad climática y de costos. Se puede afirmar que la matriz productiva rural local ha cambiado definitivamente. Poco más de la cuarta parte del total de granos producidos son de soja y le han dejado a los productores 674 millones de dólares brutos, fuera de retenciones.

 

La realidad es que la invasión rusa a Ucrania cambió todo el panorama y es por eso que hoy la economía argentina no solo no puede sumar reservas sino que también debe pagar altos precios para importar energía. En la vereda de enfrente los productores remarcan que el tipo de cambio oficial está muy atrasado respecto a la inflación y la brecha con los tipos de cambio paralelos le quitan rentabilidad a un negocio que ya paga 33% de retenciones a las exportaciones.

 

Principales centros de acopio.

 

La Pampa tiene una capacidad de almacenamiento de granos de 2,67 millones de toneladas y una producción estimada para la campaña que viene de más de cinco millones de toneladas, entre los cuales la soja acumulará algo más que 1.400.000 de toneladas.

 

Las principales plantas de depósito pampeanas se encuentran en los departamentos Atreucó, Capital, Catriló, Conhelo, Chapaleufú, Guatraché, Hucal, Loventué, Maracó, Quemú-Quemú, Rancul, Realicó, Toay, Trenel y Utracán. La participación sojera de La Pampa sobre un total nacional de 43.300.000 toneladas, fue del 2,59%. Es decir 1.123.733 toneladas y además un 3,6% del total de almacenamiento.

 

Los guarismos en los que el volumen de almacenamiento de la totalidad de granos y oleaginosas se refiere, nos posicionan como la quinta provincia en el país en tonelaje potencial de acopio. Solo en el cuadrángulo noreste hay 84 plantas con un almacenamiento físico de 846.840 toneladas en silos de acopiadores y cooperativas y otras 287.729 toneladas en silos-chacra en la zona norte.

 

En la Zona Sur hay 53 plantas que almacenan 350.565 toneladas en los silos de acopiadores y cooperativas, y 136.422 toneladas de silos-chacra y silo bolsa.

 

' '

¿Querés recibir notificaciones de alertas?