El BLP logró recuperar 218 millones de pesos
Un análisis de las cobranzas del fideicomiso muestra que, hasta ahora, se cobraron el 80 por ciento de las deudas de unos 3.000 clientes. Todo mejoró cuando en 2009 esa tarea pasó a manos exclusivas del banco.
JUAN JOSE REYES
Haciendo un análisis de las cobranzas del Fideicomiso de Cartera del Estado provincial, que desde el 2009 volvió a administrar el Banco de La Pampa, se observa que en los primeros 150 días del año se contabilizaron recuperos por 4.168.500 pesos. Con esa suma ya se acumula un recupero total de 218 millones de pesos de recaudación para los seis tramos en que se conformó la cesión, sobre un total original de 204 millones de pesos-dólares adeudados por 3.000 clientes durante una década.
Lo que en principio pareció ser un pésimo negocio para las arcas públicas, dejando de lado su falta de transparencia e inequidad para otros deudores, hoy muestra que se ha recuperado más del 80 por ciento de las deudas con la mayoría de los clientes.
Cuando el Estado provincial, a instancias en aquel momento del gobernador Rubén Hugo Marín, del ministro de Hacienda, Ernesto Franco, y del presidente del Banco de La Pampa, Néstor Bosio, le compró la cartera de deudores incobrables al BLP, desde esta columna mucho se cuestionó esa decisión por inconsulta y poco cristalina. A tal punto que se iniciaron causas judiciales contra este columnista por revelar el supuesto "secreto bancario" que una ley provincial inconstitucionalmente lo prohibía.
Hoy, a diez años de aquella controvertida decisión, puede decirse que los dineros públicos invertidos en tal adquisición casi han sido repuestos para el erario. Salvo algunos favoritismos hacia empresas "amigas" del poder (por ejemplo, Gente de La Pampa); de conducciones del Fideicomiso muy politizadas y controvertidas (los casos de José Sevilla y Lisandro Ranocchia Ongaro) y de algún salvataje político; en lo que a números se refiere -y como "lo cortés no quita lo valiente"-, puede decirse que salió bien. Por un lado se salvó al BLP de su indefección frente a otros bancos, y por el otro el dinero público fue recuperado (aún faltan 40 millones de pesos por cobrar).
Un año a todo vapor.
Lo de este año, a pesar de la crisis financiera y la sequía -que golpeó fuerte a la economía pampeana durante 2010- ha mostrado por parte del Fideicomiso un gran desempeño en la gestión de cobro. En enero se recuperaron 782.659 pesos; en febrero 574.823; en marzo 581.494; y en abril 1.579.524 pesos. Así, se acumuló para el primer trimestre del año la suma de 3.518.500. Si a ella se le anexan los casi 650.000 pesos que se lleva cobrado en mayo, ya se han recuperado en cinco meses algo más de cuatro millones de pesos.
En concreto, durante 150 días se recuperaron 231.203 pesos para el primer tramo; 2.307 para el segundo; 631.887 para el tercero; 233.636 para el cuarto; 2.390.712 para el quinto y 28.746 pesos para el sexto y último tramo del Fideicomiso. Uno de los objetivos que se trazó éste, desde su creación, fue recuperar al menos los 120 millones (aunque fueran pesos-dólares) que el Estado le pagó al BLP por acreencias de 220 millones. Hasta el momento se llevan recaudado 218 millones, y dentro de ellos hay 125 millones por refinanciación.
Es todo un logro impensado para una operatoria que apareció muy teñida de política partidaria, por los favores que muchos de los deudores recibieron al ingresar al fideicomiso. Pero en 2009 hubo un cambio notable, como lo fue la disolución del muy cuestionado consejo directivo del fideicomiso de la cartera sucia. A partir de allí las funciones de cobro pasaron exclusivamente a manos del BLP, todo mejoró y los montos de recupero de las grandes empresas deudoras comenzaron a ingresar como las de cualquier hijo de vecino.
Una larga historia.
El confuso y problemático proceso de la compra de la "cartera sucia" del Banco de La Pampa por parte del Estado provincial se dio en varios pasos o tramos, que involucró a más de 3.000 clientes con problemas de pago y que hacían inviable su prosecución como entidad financiera. En un principio el Gobierno desembolsó 120 millones de pesos-dólares para que el banco le cediera una deuda superior a los 200 millones.
La primera compra se concretó el 4 de octubre de 2000. Allí el Estado invirtió 20 millones de pesos-dólares en la adquisición de 72.087.077,65 pesos. Luego se hicieron otras tres compras consecutivas hasta completar la totalidad de la operación de salvataje de la banca mixta provincial en épocas duras para las entidades financieras, por las enormes exigencias técnicas del Banco Central con las deudas impagas de sus clientes.
El 6 de diciembre de ese año el Estado volvió a pagar 8.191.671 pesos por una deuda de 11.475.894 pesos; el 29 de marzo se traspasaron 16.975.030 pesos y el 29 de junio otros 19.833.299, en estos últimos dos casos por el mismo monto de dinero. En total, entonces, la Provincia gastó en esa última cesión otros 65 millones para quedarse con 120.371.301 de deuda que era del BLP. Ese traspaso involucró a otros 1.200 clientes.
Pero a fines de 2002, el Gobierno se decidió a hacer una nueva compra. Se traspasó la deuda de 1.777 nuevos clientes. De las arcas estatales salieron otros 55 millones para la adquisición de 83 millones de pesos adeudados. Hoy a poco más de 10 años los resultados han sido satisfactorios, siempre en el entendido de que el principal agente financiero de la provincia (el BLP) pudo ser salvado y que los dineros públicos han sido devueltos casi en su totalidad (sólo quedan algunos privilegiados sin cobrar).
Artículos relacionados