Cooperativa fabrica insumos para salud

La Cooperativa Textiles Pigüé Limitada es un emblema de las empresas recuperadas en Argentina. Cuando la ex Gatic (Adidas) quebró, fueron los empleados los que se hicieron cargo y mantuvieron en pie una fábrica que llegó a tener 200 obreros. Hoy, ante la pandemia del Covid-19, dejaron de lado la indumentaria deportiva y se dedican a elaborar insumos para profesionales del sector de la salud.
En la planta que la Cooperativa tiene en la cercana ciudad bonaerense de Pigüé se elaboran barbijos, o tapabocas de uso social cotidiano; barbijos quirúrgicos, del tipo 2; camisolines comunes y hemorrepelentes, que se utilizan en cirugía o en terapia intensiva; cofias y botas, también para el área de terapia.
Esa ma mayor demanda de artículos sanitarios ha provocado un notable incremento del trabajo en la Cooperativa Textiles Pigüé. Al ser considerado un servicio esencial en el decreto de cuarentena, una veintena de empleados se puso a trabajar en la elaboración de insumos para médicos y enfermeras. En el lapso de tres semanas debieron incrementar aquel número de operarios en los diferentes sectores de la fábrica.
«Somos alrededor de 35 personas trabajando. Se han ido incorporando de a poco, porque la idea es que se justifique y no sumar riesgos innecesarios», dijo Marcos Santicchia, titular de Cooperativa Textiles Pigüé y quien en marzo de 2018 estuvo en una charla en la UNLPam para contar la experiencia de fábrica recuperada.
El primer trabajo de Textiles, en la pandemia, se hizo para la secretaría de Salud pigüense. «Ellos nos ayudaron a desarrollar el producto y, luego de una semana, abastecimos a todo el sector en forma gratuita. A partir de entonces empezamos a ofrecer nuestros productos en la región, ya que también debíamos hacer un aporte y, además, tener un flujo económico para sostener la fábrica», relató Santicchia al diario La Nueva.
Los más de 45 clientes son de Bahía Blanca, Coronel Pringles, General La Madrid, General Roca y hasta la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, entre otros.

Aporte solidario.
«Lo cierto es que hay mucha demanda que no podemos abastecer. Algunos pedidos no se toman; no queremos generar compromisos que, después, no vamos a cumplir. El momento es crítico para esas cuestiones», explicó Santicchia, quien destacó el aporte solidario de los trabajadores de Textiles, cuya capacidad de planta se encuentra en el 30 %.
«Cuando surgió esta posibilidad de trabajo todos dijeron sí y nadie hizo demasiadas preguntas, más allá de que tienen familias, y también miedo, por todo lo que está pasando con esta pandemia», aseguró.
En razón de la creciente demanda, desde Textiles Pigüé se realizan negociaciones, contrarreloj, para la adquisición de equipamiento automático que permita una forma más rápida de elaboración de insumos. «Estamos trabajando fuerte en un proyecto muy ambicioso. Se trata de una máquina que nos permita fabricar insumos de manera automática», sostuvo Santicchia.