All Boys goleó y consolida su idea

All Boys no tuvo contemplaciones ayer ante Deportivo Anguilense y le ganó por un contundente 6 a 0 en el marco de la cuarta fecha de la Zona Norte del Torneo Oficial de la Liga Cultural de fútbol. Jerónimo Gutiérrez encaminó la goleada con dos tantos y luego la decoraron Juan Rossi, Cristian Canuhé, Giuliano Guinchinao y el juvenil Mirko Parassole, otro de los pibes de la cantera que empieza a tener lugar en el equipo de Cristian Santa María.

 

La victoria, amplia y merecida por donde se la mire, le sirvió a los actuales hexacampeones para quedar a una unidad de la punta del grupo y para comenzar a consolidar una idea de juego que por momentos invita a soñar con cosas importantes.

 

Con presión alta, suma de pases a uno o dos toques y una movilidad permanente en todas sus líneas, All Boys tuvo pasajes muy buenos ayer, aunque por momentos también mostró algunas flaquezas en coberturas defensivas e imprecisiones a la hora de trasladar el balón.

 

La débil versión de Anguilense que se vio en el Dr. Ramón Turnes tampoco fue un parámetro de fuste para los locales, que una vez encaminada la goleada terminaron floreándose.

 

Lo abrió.

 

Desde el silbato inicial de Juan Manuel Figueroa, All Boys dejó en claro que era más. Se posicionó bien alto con el objetivo de recuperar la pelota cerca del arco rival y no dejó que Anguilense se acomodara.

 

Las llegadas de Jonathan Fensel y de Tomás Arzer por los laterales, más la movilidad de Jonathan Pérez, Gutiérrez y Rossi le permitieron al Auriazul empezar a romper el cerrojo que intentaba la visita, que en el primer cuarto de hora logró aguantar el cero. Hasta que a los 18 minutos un gran centro de Arzer encontró un cabezazo aún mejor de Gutiérrez para abrir el marcador.

 

El gol le terminó de dar confianza al local, que con un juego más fluido se terminó de hacer dueño del partido. El prolijo trabajo de Benjamín Portillo en el medio le dio orden a la idea alboyense, que con el correr de los minutos fue mostrando su mejor versión pese a la falta de aciertos en los metros finales como para que la diferencia en el juego se traslade al resultado.

 

Entre las más claras, a los 24 Rossi tuvo un mano a mano que tapó Emmanuel Arrieta; a los 33 Gutiérrez entró al área eludiendo a dos rivales pero Muhammad Jamad lo tapó en última instancia; mientras que a los 39 otra vez Gutiérrez encaró tras una linda pared, lo cortaron y en el rebote Rossi perdió cara a cara con el arquero.

 

Anguilense, ocupado en tapar huecos en defensa, apenas apostó por alguna contra encabezada por sus volantes o por alguna maña de Miguel Román, pero siempre quedaba a medio camino pese a que en algunos momentos encontró espacios por donde entrarle al local.

 

Lo liquidó.

 

Para el complemento el trámite no varió. Anguilense -ya sin el DT José Luis Rocha en cancha porque fue expulsado en el entretiempo (junto al arquero suplente Emanuel Rauch) tras protestar por un supuesto penal- nunca encontró la manera de sortear la presión alta del rival, por lo que continuó dependiendo de sus respuestas defensivas dentro del área y de la hasta ese momento ineficacia alboyense de cara al arco.

 

Pero a los 8 minutos llegó el segundo gol, con una gran definición de Gutiérrez picando la pelota ante la salida de Arrieta, y el partido se rompió definitivamente.

 

El visitante bajó los brazos por la falta de fuerzas propias y por el asedio rival, el cerrojo defensivo dejó de ser efectivo y, con más espacios, los goles empezaron a caer uno tras otro. A los 15 llegó el tercero tras un córner de Canuhé y una definición en soledad de Rossi; a los 24 se gritó el cuarto gracias a una definición de Canuhé tras un remate de Parassole; mientras que a los 35 la cuenta subió a cinco por la definición de Guinchinao luego de una asistencia de Parassole.

 

El sexto y definitivo tanto, a los 40, fue del propio Parassole, tras centro atrás de Guinchinao y un toque sutil de otro juvenil, Luca García Vargas. Así, con muchos chicos en cancha y una idea colectiva que les da lugar, All Boys cerró una goleada con la que empieza a marcar su huella en el torneo.