El consumo se desplomó 17% en 2024
El impacto del ajuste fiscal y la caída del poder adquisitivo de los ingresos se reflejó en una caída histórica del consumo durante 2024. Según un informe difundido el sábado por Nielsen IQ (NIQ) el consumo masivo de los argentinos cayó un 17% respecto de 2023, resultado provocado principalmente por “un fuerte ajuste en los hogares, que priorizaron el ahorro y la búsqueda de alternativas más accesibles”.
“El año 2024 marcó un punto de inflexión en el consumo masivo en Argentina, con una caída histórica que impactó en todas las categorías y canales de venta”, aseguró Javier González, líder Comercial de NielsenIQ Argentina. NIQ es una compañía internacional dedicada a brindar servicios de análisis de datos que facilitan la toma de decisiones estratégicas a empresas, mediante evaluaciones del comportamiento de los consumidores y la elaboración de informes y análisis con datos proyectados para empresas pequeñas y medianas.
El informe publicado el sábado añade que “en 2024 los supermercados en Argentina recuperaron precios atrasados, pero registraron una fuerte caída de su volumen de ventas” y pronostica “una recuperación durante 2025 aunque el consumo todavía seguirá lejos de los niveles previos a la crisis y los argentinos seguirán priorizando precio y relación costo-beneficio para sus decisiones de compra”.
Prioritarios.
Los sondeos realizados por NIQ muestran que a lo largo del año pasado, una enorme mayoría (78%) de los consumidores realizó “compras con mayor cuidado en productos esenciales” mientras que un 65% reconoció “haber cambiado marcas reconocidas por opciones más económicas”. Entre las causas principales para estos cambios, NIQ identificó “una caída en la demanda en un escenario de alta inflación (117,8% acumulado), una fuerte contracción económica y el incremento de costos en los hogares por actualización de tarifas de transporte y servicios públicos”.
Si bien “los ingresos disponibles en los hogares mejorarían durante 2025, todavía seguirán un 40% por debajo de los registrados en el año 2017” mientras que “los costos de servicios seguirán restringiendo la capacidad de compra a pesar de la desaceleración de precios”.
NIQ realiza mediciones sobre consumos masivos en todo el mundo, a través de un “Barómetro del Gasto en Retail”, indicador que evalúa “el gasto de los consumidores en productos de gran consumo, tecnologías para el hogar y bienes duraderos (T&D)”. En Argentina, la compañía realiza “un seguimiento de las ventas reales y mide los cambios en las tendencias de compra pasadas”.
Las categorías de gran consumo adoptadas para sus sondeos son “alimentos frescos y envasados, productos de cuidado del hogar y de cuidado personal”, en tanto que entre las categorías de T&D contepla “bienes de consumo tecnológico, electrodomésticos y bricolaje”. Sus estudios de mercado miden las ventas en más de 350 mil comercios minoristas en todo el mundo.
Crece pero aun no recupera lo perdido
Durante el primer mes de 2025, la actividad productiva de las pymes registró un crecimiento del 12,2% interanual pero igualmente no consiguió compensar la profunda caída del 30% registrada en enero del año pasado. Mientras
tanto, el uso de capacidad instalada apenas alcanza al 59%, confirmando la falta de recuperación para la industria.
Según datos del último informe difundido por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), las industrias todavía no lograron recuperar los niveles previos a enero de 2024, cuando la producción marcó un mínimo histórico del -30%. El Indice de Producción Industrial Pyme (IPIP) registró reflejó un alza frente en todos los rubros analizados tanto en la comparación interanual como en la medición mensual desestacionalizada.
Fue el sexto ascenso consecutivo para la actividad, con un crecimiento de 4,8% frente a diciembre. Esta tendencia positiva se mantiene desde agosto, cuando repuntó un 3%, y continuó en septiembre con un 3,7%, octubre con un 4%, noviembre con 3,9%, y diciembre, con 4,3%.
Por rubros.
En el desglose por sectores, “Madera y muebles” lideró el crecimiento interanual con un 25,9%, seguido por “Metal, maquinaria y equipo, y material de transporte” que avanzaron 16,9%. En la comparación mensual desestacionalizada, “Papel e Impresiones” registró el mayor crecimiento, con un 6,9% respecto a diciembre 2024, mientras que “Madera y muebles” se ubicó segundo, con 6,3%. En cuanto a la utilización de capacidad instalada, la industria maderera registró el mayor nivel de actividad, operando al 64,5%, seguida por Papel e impresiones, con un 63,6%.
Mientras tanto, “Alimentos y bebidas” registró en enero un alza de 4,2% interanual a precios constantes y la comparación mensual mostró una recuperación del 3,3%. Las industrias del sector operaron al 59,4% de su capacidad, 2,7 % menos que en diciembre de 2024 y 16,5% menos que en enero de 2024.
En “Textiles e indumentaria”, la producción industrial subió un 9% interanual y un 4% respecto a diciembre de 2024. Las fábricas operaron al 56,7% de su capacidad, 2,9% menos que en diciembre de 2024 y 11,5% menos que en enero de 2024.
Finalmente, “Químicos y plásticos” aumentó en enero un 15% interanual y un 5,8% en la medición mensual, con uso de un 61,6% de su capacidad instalada, 1,3% menos que en diciembre de 2024 y 9,4% menos que en enero de 2024.
Finalmente, “Papel e impresiones” mostró una suba de actividad del 2,6% interanual y del 6,9% en la comparación mensual, trabajando con el 63,6% de su capacidad, 0,6% menos que en diciembre de 2024 y 10,9% menos que en enero de 2024.
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