La Pampa perdió el 4,4% del empleo
Entre noviembre de 2023 y agosto del año en curso La Pampa sufrió una caída del 4,4% en la cantidad de puestos de trabajo. Así lo reveló ayer un artículo del diario Ambito Financiero que tomó como parámetro el trabajo elaborado por el Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA), en el cual se concluyó que solo dos de las 24 provincias del país tuvieron un resultado favorable: Neuquén y Tucumán.
De acuerdo al artículo, se están perdiendo cerca de 10.000 empleos privados mensuales solo durante 2025, por lo cual desde la asunción de Javier Milei como presidente se destruyeron más de 220.000 puestos de trabajo.
Según cifras desestacionalizadas del SIPA, Santa Cruz perdió el 15% de su fuerza laboral; La Rioja, 11,2%; Formosa, el 8,2% y Catamarca, el 8. A estas cuatro le siguen Chaco (-7,6%), Misiones (-6,3), Santiago del Estero (-6,1), Tierra del Fuego (-5,9), San Luis (-5,7), Salta (-4,7), Chubut (-4,7), La Pampa (-4,4), Buenos Aires (-2,2), Entre Ríos (-2,1), Jujuy (-2,1), Santa Fe (-1,9), CABA (-1,9), Córdoba (-1,7), Mendoza (-1,4), San Juan (-1,1), Corrientes (-0,6) y Río Negro (-0,2).
Las dos restantes fueron las que pudieron crear más empleo durante la gestión libertaria: Neuquén, donde los puestos de trabajo formales crecieron un 2,9% y Tucumán, donde el incremento fue de apenas el 0,1 por ciento.
“Entre los rubros más castigados por la administración libertaria estuvieron la construcción, debido al parate de la obra pública nacional dispuesta por el Ejecutivo, y la industria, golpeada por la baja demanda y la apertura indiscriminada de importaciones. Tanto es así, que la capacidad instalada actualmente está operando al 61,1%, según el Indec. El empleo en cada uno de estos rubros cayó en 62.741 (-14,3%) y 42.406 (-3,6%), puestos de trabajo respectivamente. A menor escala, también hubo un importante retroceso en el rubro explotación de minas y canteras (-7%, con unos 6.600 empleos menos)”, sostiene el artículo de Ambito.
En cuanto a Santa Cruz, la investigación sostiene que se perdieron 9.807 puestos de trabajo, cifra que se explica, en gran parte, por la baja en la producción de petróleo convencional y el empleo público, de acuerdo a fuentes de aquella provincia consultadas por el matutino porteño.
En La Rioja, la pérdida de empleos afectó a 3.675 trabajadores y se explicaría por el impacto de la construcción sumado a la contracción industrial, sobre todo en los rubros textil y calzado.
En Formosa se perdieron 2.016 puestos, todos ellos por la abrupta caída de la actividad de la construcción. Lo mismo ocurrió en las provincias de Santiago del Estero, donde se perdieron 3.285 puestos, y Chaco, donde la caída de empleos formales llegó a 5.918 afectados.
En cuanto al incremento del empleo formal en Neuquén (4.102 nuevos puestos de empleo) durante lo que va de la presidencia de Javier Milei la explicación es sencilla: la expansión de Vaca Muerta. “El boom hidrocarburífero no sólo sumó empleo directo en petróleo y gas, sino también en toda la red de proveedores, logística y comercios”, explica el artículo. Ese dinamismo no es nuevo, pues Neuquén es la provincia que más empleo formal creó en la última década, es decir, abarca no solo el gobierno actual sino a los dos anteriores (Frente de Todos y Cambiemos).
En cuanto a Tucumán, donde se crearon 121 empleos más desde noviembre del 2023 hasta agosto último, el trabajo lo atribuyó al empuje del empleo agroindustrial, especialmente en la cadena citrícola.
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