Viernes 09 de mayo 2025

Mendoza, en “situación delicada”

La salida de servicio de dos usinas en el complejo Los Nihuiles, consecuencia de un tremendo temporal en el sur mendocino que causó destrozos y afectó seriamente la red vial, la producción, el turismo, y la generación hidroeléctrica, ocurrió en el peor momento, cuando se registra la mayor demanda energética de este verano. Frente a la ola de calor que envuelve a todo el país, el Ente Regulador de la Electricidad (Epre) de Mendoza informó que el consumo eléctrico se incrementó drásticamente esta semana y alertó sobre la “importancia de realizar un uso eficiente y racional de la energía y del agua, ya que gran parte este servicio funciona con la red eléctrica, y las olas de calor incrementan significativamente el consumo”.

 

El lunes 13 de enero, el Epre registró un consumo máximo para lo que va de esta temporada, con 943 megawatts. Si bien no alcanzó el pico histórico (registrado el 13 de enero de 2022 con 1.231 MW), lo consideró “un consumo máximo”.

 

“Estamos en una situación delicada”, le dijo Jimena Latorre, al diario Los Andes. La ministra de Energía de la provincia aclaró que “no hay fecha de normalización del sistema de Los Nihuiles porque aún se están evaluando los daños” y contó que “ingresaron al menos dos metros de agua con barro y malezas en ambas centrales, y estamos trabajando con un nivel de presión importante porque el despacho de energía es esencial para la provincia”.

 

Caída de generación.

 

La funcionaria se refirió al temporal como “un evento atípico” de gran magnitud y reveló que tras apagar las centrales 2 y 3 tomaron la decisión de “desenganchar la Central 4 de la red interconectada para reforzar el sistema local con generación directa”. Luego del apagón, el abastecimiento de San Rafael y General Alvear “se restableció mediante el sistema Cruz de Piedra” y desde el Edeste “enviaron generadores a Cecsagal (General Alvear)” para suplantar la generación caída.

 

Un problema adicional es que el sistema sureño sigue siendo “lineal” porque todavía “no está cerrado el anillo”. Según la ministra, el cierre será el nuevo tendido eléctrico entre San Rafael y General Alvear, una obra que “Nación no piensa realizar, así que la encarará el gobierno provincial”.

 

“En el sur, la situación es extremadamente delicada” coincidió Gustavo Dondero. El director de operaciones y mantenimiento de Distrocuyo ratificó los dichos de la ministra y explicó que al salir de servicio Nihuil 2 “se ha perdido” uno de los grandes corredores de distribución en territorio mendocino. “Esa vinculación entre ambos extremos es esencial para mantener la confiabilidad del sistema y un abastecimiento normal de la demanda”, explicó.

 

Ahora la demanda “está abastecida por un solo punto, que es Cruz de Piedra y cualquier perturbación puede afectar el suministro de energía eléctrica”. Según Dondero, “esta situación en el sur sería completamente diferente sin la generación de Los Molles, que entró en servicio hace poco tiempo, además de la central térmica de GNL Anchoris. Podemos cubrir la demanda con esta generación y el aporte de Cruz de Piedra, pero estamos en una situación totalmente débil”, concluyó.

 

Esperan pico para mañana.

 

Aunque la demanda energética se incrementó en todo el país esta semana, hasta ayer el sistema eléctrico funcionaba “con normalidad y por debajo de los récords históricos”. De todos modos, Cammesa (Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico) prevé una “demanda extrema de energía” y pronosticó un récord de consumo para mañana.

 

Según el Informe de programación semanal, “los pronósticos disponibles indican que la semana entre el 11 y el 17 de enero presentará temperaturas máximas de 36°C y mínimas de 25°C en CABA, y medias entre 30°C y 31°C”, y más exigentes aún en el centro y norte del país con medias entre 32°C y 34 °C” por lo cual anuncia que “será una semana de alta exigencia sobre el Sistema Eléctrico, con alta probabilidad de que la demanda alcance o supere los récords vigentes de energía y potencia (597.7 GWh y 29.653 MW)”.

 

La peor situación llegaría mañana (jueves 16) con un pico de demanda estimado en 29.662 MW “anticipando un nuevo récord por encima de aquel máximo histórico, registrado el 1º de febrero de 2024”. Esta condición “podría derivar en un mayor estrés del sistema eléctrico nacional”, advirtió Cammesa.

 

Por esta crítica situación, los funcionarios y técnicos de la Secretaría de Energía que conduce María Tettamanti programaron reuniones semanales con el sector para monitorear el sistema y acelerar procedimientos de un plan para mitigar riesgos de cortes de energía.

 

En Argentina, la mitad de la demanda eléctrica se concentra en el Area Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y por eso, el equipo de Tettamanti convocó ayer al “Comité de Seguimiento de Implementación del Plan de Contingencia para meses críticos 2024-2026”, integrado por referentes de Cammesa, ENRE, generadoras, transportistas, grandes usuarios, y las distribuidoras porteñas Edesur y Edenor.

 

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