Nuevo operativo por la muerte de Bazán

Una declaración testimonial que recibió la Fiscalía derivó en un allanamiento en la zona donde se encontró el cuerpo de Fabio Bazán, el joven de 24 años asesinado que estuvo desaparecido 12 días. Los resultados fueron "positivos" y se secuestraron objetos que serán sumados a la causa.

 

El operativo se llevó a cabo ayer por la mañana en la zona norte de la ciudad y estuvo encabezado por un equipo compuesto por integrantes de la Brigada de Investigaciones de la UR-I, del cuerpo de Bomberos de la Policía y personal de la Agencia de Investigación Científica (AIC). También hubo un acompañamiento de la Unidad Regional.

 

Los efectivos regresaron a la escena donde había sido encontrado un cuerpo sin vida, ubicada en cercanías a los piletones de desagües cloacales. Se trata de una precaria construcción de dos pisos que posee, a un costado, un pozo de concreto de unos seis metros de profundidad, el cual está en desuso y tapado. Fue allí donde descendió un equipo de Bomberos y confirmó que efectivamente había un cadáver. "Estaba ahí dentro, habían tirado basura arriba y lo habían prendido fuego", revelaron.

 

Una declaración.

 

Tras el hallazgo del cuerpo, se detuvieron a cinco personas: dos hombres y tres mujeres, que actualmente cumplen con una prisión preventiva efectiva. La acusación que impulsó la Fiscalía es por "homicidio doblemente calificado, por ensañamiento y por el concurso premeditado de dos o más personas".

 

El dato más esperado se conoció el jueves, cuando el Laboratorio de Genética Forense entregó los resultados del análisis del material genético recolectado en la autopsia y confirmó que se trataba de Fabio Bazán. Previamente se había dado a conocer que la víctima presentaba "dos golpes violentos en el cráneo y restos parcialmente incinerados".

 

Con esa información, los investigadores avanzaron y, tal como había informado este diario, en el expediente se pidieron más "pericias de ADN de distintos elementos que fueron secuestrados en los allanamientos". También se avanzó durante la última semana en las declaraciones testimoniales.

 

Fue en una de esas entrevistas en las que obtuvieron información certera, que derivó en un nuevo operativo en la escena y el pozo, el cual era "un basural" producto de todo lo que habían arrojado anteriormente. Así lo confirmaron fuentes ligadas a la causa consultadas por LA ARENA, quienes explicaron que "efectivamente se hizo una diligencia en el lugar en búsqueda de elementos que pueden ayudar a determinar cuestiones relacionadas al hecho. Por eso se preservó el lugar con personal policial hasta el día de la fecha".

 

Las fuentes consultadas revelaron que se logró secuestrar una serie de elementos, aunque no todo lo que se buscaba. De todas maneras, consideraron que el resultado fue "positivo".

 

Desaparición.

 

La última vez que se lo vio con vida a Bazán fue el 27 de marzo. Luego de que se ausentara por varios días, su abuela denunció la desaparición en la Seccional Segunda.

 

Desde ese momento, se desplegó una intensa búsqueda con un centenar de efectivos de distintas dependencias para encontrarlo. Esto incluyó rastrillajes en la zona del Relleno Sanitario, donde trabajaba el joven, y allanamientos en distintas viviendas. También se realizó un fuerte operativo en un predio rural cerca de la localidad de Winifreda en proximidad al paraje El Guanaco.

 

Finalmente, el sábado 8 de abril los familiares -que habían iniciado su propia búsqueda- aportaron un dato clave a la Brigada de Investigaciones y fue así que lograron encontrarlo. "Era una zona que ya habíamos rastrillado en su momento, el tema es cómo estaba todo. Por eso los perros no lo habían detectado antes", explicaron en su momento fuentes ligadas a la investigación.