Pide restitución de su hija
(General Pico) - Yanel Buffa, una docente de Rancul, pidió ayer en el Juzgado de Familia 2 de General Pico la restitución de su hija de diez años de edad, que a partir de una sentencia judicial de los últimos días quedó al cuidado de su padre y fue trasladada a la ciudad de Río Cuarto, Córdoba.
Ayer a la mañana, la mujer llegó desde Rancul a General Pico para entregarle una nota a la jueza de familia Alejandra Campos y pedir la restitución de su hija. Además, pidió el apartamiento de la magistrada de la causa.
Días atrás, la jueza Campos determinó el cuidado unipersonal de la menor por parte del padre, que vive en Río Cuarto, Córdoba. La mujer indicó que la jueza le impuso una restricción de acercamiento y comunicación con la niña, para no entorpecer el vínculo paterno filial.
Durante el fin de semana, varios vecinos de Rancul se manifestaron en la plaza del pueblo en apoyo de la madre de la menor y cuestionaron el accionar de la Justicia. Ayer a la mañana, la mujer llegó a General Pico y contó detalles de las actuaciones judiciales que se llevaron adelante en todo este tiempo y subrayó que nunca se escuchó ni se tuvo en cuenta la opinión de la menor.
Buffa dijo que todo el proceso se inició hace tres años cuando el padre de la menor inició un juicio para pedir el cuidado unipersonal de la menor, pese a no haber tenido vínculo durante todo el último tiempo. La mujer, contó que siempre hubo intentos de procesos de revinculación y que desde hacía un año y medio que el hombre no tenía contacto con la niña, dado que pesaba sobre él, una restricción de acercamiento, luego que fuera denunciado por Buffa.
Sentencia.
La mujer dio cuenta que el padre de la menor siempre denunció que ella obstruía el vínculo, aunque esas denuncias fueron desestimadas. También subrayó que el asesor de menores, Fabián Allara, destacó que en todas estas actuaciones no se puso el centro en el interés superior de la niña, de la que dijo que nunca fue escuchada y con esta medida se sustituyó su centro de vida.
La niña, de diez años de edad, según contó la mujer, se crió con toda la familia materna en Rancul, a donde asiste al colegio y tiene amigos.
Buffa manifestó que la semana anterior estaba previsto un espacio de escucha para la menor, que en principio se iba a realizar de manera virtual y luego se dispuso que se hiciera de forma presencial. En ese contexto, dijo que las profesionales del Juzgado de Familia le sacaron a su hija de sus manos, la separaron de ella y la llevaron a otra sala. Luego, indicó que la jueza Campos, al momento de leer las resoluciones del caso, indicó el cambio de cuidado de la menor, la cual quedó bajo la tutela del padre en la ciudad de Río Cuarto.
Buffa contó que en esa etapa decisiva del proceso, la jueza le impuso una restricción de comunicación con la menor, tanto a ella como a toda la familia materna, por el plazo de los próximos sesenta días, con el objeto de no entorpecer el vínculo familiar. Según contó, la sentencia argumenta que la mujer obstruyó el vínculo materno. Además, pidió el apartamiento de la jueza y la restitución de su hija.
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