Alumnos del colegio Ciudad ayudan a familias en situación de emergencia

"La idea surgió cuando la mamá de un alumno sufrió un accidente y quedó hemipléjica. Al poco tiempo el padre se quedó sin trabajo; así que decidimos hacer algo para ayudar. Poco tiempo después a la familia de otro chico se le incendió la casa y también los incluimos. La idea fue colaborar con todo lo que fuera posible", explicó Ximena Ramírez (16 años), una de las estudiantes del colegio Ciudad de Santa Rosa que motorizó la iniciativa.
El encuentro se realizó hace unos días en el gimnasio del colegio y allí se recolectaron alimentos, pañales, colchones y todo lo que sirviera para las familias de esos dos alumnos. También hubo una urna en la entrada para quien quisiera hacer su aporte económico.
"La gente se prendió. Nuestra idea fue no cobrar entrada sino que quien se acercara aportara algo. Por supuesto que el dinero es muy importante para estos casos, porque se trata de familias numerosas y con carencias, pero la ayuda quedaba a criterio de cada uno", indicó Alexis Campos (18), presidente del Centro de Estudiantes.
Un aula llena con colchones y alimentos y una suma en efectivo fue el resultado al final de la jornada. Cuando contaron el dinero, surgió la idea de continuar comprometidos. "Sabemos que la ayuda no termina en un día, por eso no entregamos el dinero sino que lo vamos a usar para pagar los servicios y lo que necesiten las familias, es una forma de seguir afectados a la causa y por eso vamos a seguir haciendo cosas para juntar más plata", comentó Ximena.

Por el escenario montado en el Ciudad pasaron bandas en vivo como Paraninfos, Trizeto Funkísimo, Zalbatage y Komando. También hubo malabares, un cuerpo de tango, un número de danza clásica, breakdance y un cierre de media hora de stand up. Además, se habilitó un kiosco al público con chocolate caliente, panchos y tortas caseras.
"Estuvimos trabajando hasta última hora, fue todo contrarreloj porque eran un montón de cosas. Fuimos a pedir por todos lados y como suele pasar, los comercios más chicos nos ayudaron enseguida; estamos muy agradecidos. En las grandes cadenas de supermercados te dan miles de vuelta para donarte una caja de leche, algunos directamente ni aportaron", lamentó Joaquín Lo Surdo (15).
"Creo que como nos ven pibes piensan que es para nosotros, no nos toman muy en serio. Pero por suerte hay mucha gente que sí colabora desinteresadamente", añadió Melisa Moralejo (15), vicepresidenta del Centro.

Entre los desinteresados que aportaron lo suyo estuvo Conrado "El Ruso" Kroll, que se hizo cargo del sonido para todas las bandas y números. Durante el festival estuvo la directora general de Educación Secundaria y Superior, Marcela Feuerschvenger, mientras que el rector del colegio, Omar Lara, aseguró que la ministra Jacqueline Evangelista llamó por teléfono para adherir a la movida.
"Desde otros colegios también se coparon con la idea. Yo creo que si hay ganas y un buen motivo los jóvenes participamos. No se puede esperar que siempre organicen otros, uno tiene que moverse y te hace sentir bien cuando las cosas salen", analizó Ximena, quien resaltó que fueron varios los padres que "pusieron el hombro" junto a los adolescentes para llevar adelante el encuentro.

Boleto estudiantil
La oportunidad no fue desaprovechada para fortalecer otra lucha que los estudiantes del Ciudad mantienen desde hace tiempo: la del boleto estudiantil. Quieren llegar a las mil firmas para pedir al municipio que los alumnos de primaria, secundaria y universitarios no abonen el transporte público.
"La lucha comenzó con quienes integraban el Centro de Estudiantes anteriormente. La intención de máxima es que sea gratuito para los que cursan en la primaria, en la secundaria y en la universidad, pero si no, que cueste la mitad. Ahora se está hablando de un boleto a 4,15 pesos y eso es muy alto; la mayoría de los estudiantes se maneja en colectivo", analizó Alexis.
"Los que se manejan en colectivo, generalmente tienen menos recursos. Algunos tienen que hacer combinaciones y si son varios hermanos realmente es todo un presupuesto. Por eso creemos que es un reclamo más que justo", aportó Melisa.
Los chicos y chicas del Ciudad están convencidos de que existe "una conciencia adolescente" que permite motorizar distintas movidas o acciones en pos de lograr una ayuda y obtener un objetivo que beneficie a todos.
"Por supuesto que hay de todo; a muchos no les interesa nada, pero si las cosas se hacen bien son muchos los que se suman. Si tenés un compañero que la está pasando mal, es solo cuestión de dejar de pensar un poquito en uno y dar una mano. Si lo pensás, no te cuesta nada", sostuvo Ximena.