Los hermanos Héctor y Sergio Damelio siguen con la tradición familiar
Héctor y Sergio Damelio aseguraron que pese a la crisis, el automovilismo pampeano atraviesa por un buen momento. Aseguraron que la mayor diferencia de un coche se logra en la puesta a punto del chasis.
El taller de los hermanos Héctor Luis "Toli" y Sergio Ariel Damelio está ubicado en las afueras de la ciudad de Macachín, en donde además de ser visitados por clientes, en su mayoría pilotos, es un lugar obligado de constantes consultas de amigos y preparadores.
La profesión de los Damelio fue heredada de Juan Roque y Héctor Emilio Damelio, que arrancaron con el taller en la década del '60. Luego, con el correr de los años, la preparación de motores quedó a cargo Claudio Romano.
En 1996, los hijos de Héctor Emilio, Héctor "Toli" y Sergio Damelio se vuelcan por completo al taller, y siguen con la tradición de preparar autos de carrera, consolidando el prestigio de la familia.
Para Héctor y Sergio la preparación de motores para carrera es una actividad que está en constante desarrollo, y que si bien a veces existen momentos ingratos, son muchas las satisfacciones que han vivido durante todo este tiempo. "Preparar motores es una pasión", enfatizaron.
Los Damelio, en charla con LA CHUECA, afirmaron que la pasada temporada fue exitosa porque varios de los pilotos que usan sus motores pelearon los primeros lugares del ránking, inclusive se lograron algunos títulos, como el de Mauro Rovito (Fiat) en el Zonal 2000 y el de Miguel Costa (Chevrolet), en el TC Pampeano.
-En el '96 ustedes arrancan la nueva etapa del taller. ¿Cómo han sido estos años?
-(Héctor) Han sido años de mucho trabajo e inmensas satisfacciones. Conseguimos ganas varios títulos. En el 2008, por ejemplo, disfrutamos mucho el campeonato de Miguel Costa porque veníamos de dos años de perder el primer lugar por muy poco.
-En el auto de costa, además de preparar el motor, hicieron hincapié en el chasis. ¿Por qué?
-(Sergio) Porque de los cuatro motores, dos Ford y dos Chevrolet, andan muy parejos, por lo tanto la diferencia hay que encontrarla en la puesta a punto del chasis. Inclusive cuando nos cuestionaban por una supuesta ventaja que tenía el Chevrolet de Miguel Costa en el TC Pampeano, pusimos un Ford y lo mismo ganamos.
-¿Por qué categoría sienten más cariño?
-(Héctor) Sentimos cariño por todas las categorías. Quizás haya un aprecio especial con el TC Pampeano porque fue la primera categoría que nos abrió las puertas para colaborar con el reglamento.
-El TC Pampeano supo ser una categoría exitosa, ¿qué sucedió que ahora hay que luchar para tener 15 autos en pista?
-(Sergio) Es habitual que las categorías crezcan rápido, luego decaen y es difícil remontarlas. Crecer es lo más fácil, mantener la categoría arriba es lo complicado.
-¿Qué diferencia puede existir entre un motor y otro?
-(Sergio) En cualquier categoría de las zonales, entre un motor malo y bueno puede haber siete u ocho décimas de diferencia, pero de un chasis malo a un bueno, hay 2 ó 3 segundos.
-El año pasado manifestaron que son partidarios de liberar un poco más el reglamento.
-(Héctor) Nosotros opinamos que todo lo que no se puede medir bien en un motor, hay que liberarlo. La limitación debe pasar por una brida, o la compresión. Además, el hecho de equiparar los motores no significa que se equiparen los autos.
-¿Cómo ven al automovilismo pampeano?
-(Héctor) Pese a los problemas económicos, el automovilismo de La Pampa atraviesa por un buen momento. Tenemos dirigentes que trabajan y se preocupan para que el automovilismo siga vivo.
-¿Qué opinan que se haya dejado de correr en circuitos de tierra?
-Nos parece bien, porque las carreras en tierra son muy lindas, pero son peligrosos y los resultados a veces son mentirosos. Quedó claro además que en el asfalto no se gasta más que en la tierra, como algunos pilotos creyeron.
En Santa Rosa.
Los Damelio coincidieron en afirmar que es imperioso que las categorías con techo (TC Pampeano, Zonal 2000 y Monomarca Fiat 128) puedan correr en Santa Rosa. "Alguien debe tomar esta decisión, no puede ser que no se pueda usar el autódromo.
Con respecto al Supercar, no dudaron en afirmar que esta categoría se ha transformado en la más competitiva y espectacular de La Pampa.
"El kárting -agregó Héctor- también viene por un buen camino. Nos encantaría que la categoría promocional fueran con motores preparados por una sola persona, que luego se deban sortear, para que todos los chicos tengan las mismas posibilidades de ganar".
-¿Qué sienten cuando un piloto decide irse con otro preparador?
-(Héctor) Son las reglas de juego. El piloto tiene libertad para venir a pedir nuestros servicios o para pasarse con otro preparador.
-¿Qué relación tienen con los colegas?
-(Sergio) Muy buena, y cada vez que hemos compartido charlas y reuniones para analizar un reglamento siempre nos hemos puesto de acuerdo.
-Ustedes han manifestado que lo ideal sería que los preparados se agrupen.
-(Sergio) Sería bueno crear algo que tenga figura legal, para estar registrados en la Federación. Los preparadores deberíamos estar federados, y defender nuestro lugar.
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