Chile: Corte hizo mea culpa
La Corte Suprema de Justicia de Chile hizo un histórico reconocimiento por la omisión de sus responsabilidades durante la dictadura que encabezó Augusto Pinochet, mea culpa que el tribunal consideró "un deber" para que ese comportamiento "no se repita".
El presidente de la Corte, Rubén Ballesteros, señaló en la declaración que el Poder Judicial y especialmente el máximo tribunal no cumplió su deber en defensa de los derechos humanos por "acciones u omisiones".
Del texto se desprende también que los ministros consideraron "un deber" reconocer que "el quiebre de la institucionalidad democrática permitió la instalación de un régimen cívico-militar que violentó las garantías fundamentales de los ciudadanos del país, registrándose atropellos, como muerte, desaparición forzosa, detenciones, irregularidades y torturas".
Según la declaración, se debe reconocer que si esos atropellos efectivamente ocurrieron, en parte "se debió a la omisión de jueces de la época que no hicieron lo suficiente para determinar la efectividad de dichas acciones delictuosas, las que por cierto ofenden a cualquier sociedad civilizada".
Graves acciones.
El texto asume que la Corte Suprema de entonces no ejerció ningún liderazgo para representar este tipo de actividades ilícitas "desde que ella no podía ignorar su efectiva ocurrencia, toda vez que les fueron denunciadas a través de numerosos requerimientos jurisdiccionales que se promovían dentro de la esfera de su competencia, negando de esta manera la efectiva tutela judicial de que gozaban los afectados".
Es por esto que, en tales condiciones "este máximo tribunal, reflexionando sobre los hechos de la época, como también del rol que correspondió al Poder Judicial en los desgraciados sucesos, llega a la conclusión de que no cabe otra actitud que no sea explicitar el reconocimiento de las graves acciones y omisiones que en ese entonces se incurrió", señalaron los magistrados.
Ballesteros.
"Claramente, a la hora presente y con la mesura y altura de miras de hoy, corresponde decir que constituyó una dejación de funciones jurisdiccionales, por lo que es tiempo de dejarlo en claro a todos los miembros actuales y futuros de la institución y a las generaciones ciudadanas que vengan, para que ese comportamiento no se repita, por contradecir un Estado de Derecho propio de una república democrática", expresa la carta.
Ballesteros integró al menos cinco consejos de guerra tras el golpe, en los que fueron enjuiciados militantes socialistas y tras el retorno del sistema democrático votó en contra del enjuiciamiento al ex dictador Pinochet.
Además, siempre resolvió en favor de la prescripción o la amnistía en las causas sobre violaciones a los derechos humanos, consignó la agencia Ansa. (Télam)
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