Domingo 22 de junio 2025

Sistema para entender conductas adictivas

Redacción 12/07/2011 - 04.13.hs

Un grupo de científicos argentinos descubrió cómo funciona "in vivo" un sistema inhibitorio protectivo en auto receptores neuronales, que permite entender las conductas adictivas y orientar el diseño de una droga para atenuarlas, informó ayer el químico Marcelo Rubinstein, investigador del Conicet.
El trabajo, que acaba de publicar la revista científica Nature Neuroscience, fue experimentado sobre el primer ratón mutante creado en la Argentina con la técnica de genética molecular de ratones. "Sin duda, entender cómo funciona este sistema puede orientar el diseño de una droga para atenuar fenómenos de adicción", afirmó Rubinstein en una rueda de prensa en el Instituto de Investigaciones en Ingeniería Genética y Biología Molecular de la que participó Télam.
"El valor de nuestro trabajo es que rompió una pared para estudiar "in vivo" en ratones el feedback inhibitorio, un sistema que encontró la manera de protegerse a sí mismo para mantenerse en escala", dijo Rubinstein, Investigador Principal del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet). El feedback define al conjunto de respuestas que manifiesta un receptor respecto al rol del emisor, lo que son consideradas por este para adaptar su mensaje. "El descubrimiento de los auto receptores (que reconocen al receptor) es un invento argentino que rompió el dogma de que el flujo de información era unidireccional, y vio que la propia neurona que libera dopamina, la recaptura para informar al organismo que ya tiene suficiente", afirmó Rubinstein, profesor de Fisiología, Biología Molecular y Celular de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA.

 

Mecanismo.
Se trata de un mecanismo que hasta ahora no había sido estudiado en un receptor presináptico, que es el que rompe una droga o sustancia psicoactiva, provocando la liberación sostenida de dopamina.
La sinapsis es el contacto entre neuronas a través del cual se lleva a cabo la transmisión del impulso nervioso, que se inicia con una descarga química y alcanza el extremo del axón (conexión con la otra célula) para segregar neurotransmisores como la dopamina, que se depositan en el espacio sináptico intermedio para excitar o inhibir la acción de la otra neurona.
"Son unos receptores muy particulares que están en neuronas productoras de dopamina, que es un neurotransmisor en el cerebro fundamental para movernos y para organizar nuestras acciones en el espacio y en el tiempo".
La dopamina es el neurotransmisor que nos diferencia más de las plantas, que a través de la fotosíntesis se alimentan y no se tienen que mover para salir a buscar el alimento, como sí deben hacerlo los animales. Como el alimento es un recurso escaso, que implica la lucha cotidiana por la supervivencia, "los sistemas nerviosos fueron evolucionando a partir de poder planificar la organización espacio-temporal de manera más eficiente", indicó el investigador.
Los animales y el hombre tienen que leer claves conductuales para decidir cuándo salir, cuándo no, y ambientales que predigan cuándo va a haber un evento beneficioso de pocos predadores y comida, o no.
Las neuronas que fabrican y liberan dopaminas como neurotransmisor son relativamente pocas en el cerebro, y están relacionadas con la predicción de estímulos que traen premios y recompensas, y la necesidad de movimiento. (Télam)

 


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