Martes 09 de abril 2024

Realizaron reconstrucción del crimen

Redacción 08/12/2021 - 00.34.hs

La reconstrucción del ataque a balazos perpetrado por tres Policías de la Ciudad contra cuatro jóvenes en Barracas, que terminó con el crimen de Lucas González, se realizó ayer con la presencia de dos de los sobrevivientes y sin los padres de la víctima, a quienes su abogado decidió preservar.

 

Esta es la segunda vez que se lleva adelante esta diligencia, ya que el martes 30 se suspendió a diez minutos de comenzar debido a que el defensor de los tres policías procesados por homicidio agravado, Juan José Nieva, Fabián López y Gabriel Issasi, realizó un planteo por no haber sido convocado.

 

Esa presentación fue aceptada por el juez de la causa, Martín Del Viso, para evitar futuras nulidades y la reconstrucción fue fijada nuevamente para ayer con la presencia de todos los imputados.

 

Según fuentes judiciales, uno de los chicos víctimas del ataque no estuvo presente en el lugar del hecho porque debió viajar al interior del país.

 

Para la reconstrucción se montó un operativo que contó con más de 160 policías federales, principalmente de la División Homicidios, que interviene directamente en la investigación, y de la División Búsqueda de Evidencias, a cargo de las pericias.

 

Reconstrucción.

 

La diligencia arrancó unos minutos después de las 10 en el cruce de Luna e Iriarte con el recorrido de un Volkswagen Suran similar al que tripulaban los chicos y a bordo del cual se detuvieron para comprar un jugo en un kiosco instantes antes de ser interceptados por un Nissan Tiida sin identificar de la Brigada de la Comuna 4 de la Policía de la Ciudad.

 

Mientras cuatro personas llevadas por la fiscalía asumieron el papel de las víctimas, dos de los sobrevivientes -uno de ellos con una remera con la leyenda "Justicia por Lucas"- junto a sus padres y su abogado, Gregorio Dalbón, siguieron de cerca la reconstrucción del momento en el que el Volkswagen Suran se detuvo en el quiosco situado en Luna e Iriarte.

 

Al llegar al lugar, los adolescentes, que ingresaron abrazados al perímetro, fueron recibidos con aplausos por varios vecinos de la zona y con gritos de "¡Justicia por Lucas!", y "¡Fuerza chicos"!.

 

Ese tramo de la medida también fue presenciado por los abogados de los tres policías procesados por homicidio y los de los seis acusados por encubrimiento, quienes también se encontraron en el lugar.

 

Allí, los adolescentes le relataron al fiscal de la causa, Leonel Gómez Barbella, paso a paso cómo Lucas descendió del auto, fue hasta un quiosco ubicado en la ochava y regresó al vehículo para seguir por avenida Iriarte.

 

Pasadas las 10.30, la reconstrucción llegó al segundo punto clave en el caso: el cruce de Iriarte y Vélez Sarsfield, donde los policías interceptaron el auto de los jóvenes y dispararon.

 

En ese lugar ocurrió el primer acercamiento entre las víctimas con los policías imputados ya que, a las 10.50 descendieron de la camioneta del SPF esposados, con chaleco antibalas y cascos, y presenciaron el procedimiento a escasos 10 metros de los adolescentes.

 

Además de los adolescentes y los policías, fue importante el testimonio de un testigo, quien en el día del hecho se encontraba paseando perros y, según el abogado Dalbón "relató lo mismo que las víctimas".

 

La reconstrucción continúo por la calle Luzuriaga, en dirección a Alvarado, donde uno de los adolescentes relató que luego de hacer aproximadamente 130 metros, ya con Lucas herido con un disparo en la cabeza y recostado sobre las piernas del conductor, los dos chicos que venían en el asiento trasero descendieron del rodado y comenzaron a correr con el objetivo de pedir ayuda.

 

El relato de las víctimas continuó sobre la calle Alvarado, donde el Volkswagen Suran fue detenido y dos de los adolescentes esposados, mientras que Lucas aguardaba la ambulancia para ser trasladado a un hospital.

 

"Mataron por odio".

 

Gregorio Dalbón, abogado de la familia de Lucas González, aseguró ayer que "es histórico" que en 16 días se haya pasado de tener un supuesto enfrentamiento con delincuentes, que no lo eran, a un procesamiento con tres policías con prisión preventiva por el caso.

 

"Quiero recordarles que hace 16 días decían que había un enfrentamiento. No hubo ningún enfrentamiento, no vamos a hacer ninguna acción contra los que lo dijeron porque pudieron haberse confundidos por el juez de Menores, al que espero que destituyan, porque ese juez dejó preso a los chicos y libres a los policías", dijo Dalbón en una rueda de prensa antes de la reconstrucción.

 

Sobre las responsabilidades de los tres policías que dispararon en el hecho, Dalbón dijo: "La jurisprudencia de la Corte Suprema dice que no importa de quién salieron los tiros. Ese día, en ese lugar, había tres policías que estaban tirando y cuatro chicos que estaban en un auto. En este caso se consideran coautores a todos los que tiraron".

 

Además consideró que los policías "mataron por odio y por algo que se llama racismo".

 

(Télam)

 

' '

¿Querés recibir notificaciones de alertas?