Lunes 19 de mayo 2025

La causa contra Matzkin dio marcha atrás

Redacción 05/01/2010 - 01.41.hs
La causa por amenazas contra el ex ministro del Interior, Jorge Rubén Matzkin, ya había sido elevada a juicio; pero ahora el proceso dio marcha atrás porque después de que el Superior Tribunal de Justicia ordenara al Tribunal de Impugnación dictar una nueva resolución, éste aceptó revisar el procesamiento que pesa sobre el imputado. Ello implica la anulación de todo lo hecho en el expediente desde abril hasta ahora.
Matzkin fue procesado por la jueza de instrucción, Laura Armagno, por el delito de amenazas, debido a que el 27 de noviembre de 2008 le habría dicho al peón rural Hugo Daniel Ponce "los voy a limpiar a todos". Fue cuando ingresó al campo La Guitarra, situado en las rutas 35 y 14, en media de una disputa que mantenía con Eduardo Tobal por la propiedad. El imputado estaba acompañado por su hijo David, su sobrino Martín, su yerno Simón, el escribano Santiago Guibelalde y el puntero peronista, Ramón "Pepe" Rodríguez.
Lo curioso de la resolución del TIP fue que la sala que conforman los jueces Gustavo Jensen y Carlos Flores revocó lo que había dispuesto la presidenta del organismo, Verónica Fantini, el 14 de abril pasado. Ella había mandado a juicio oral y público a Matzkin al denegarle un recurso defensivo. ¿Por qué? Porque su abogado, Carlos Amado, presentó un recurso de impugnación, en lugar de uno de apelación, contra el procesamiento dictado por Armagno. Luego, incluso, volvió a rechazarle un recurso de casación contra aquella resolución bajo el argumento de que la presidencia del TIP, "conforme a la práctica", tiene facultades para resolver las condiciones de admisibilidad de los recursos.
Fantini sostuvo que "se aprecia de manera clara y evidente" que "no solamente yerra el nombre del recurso" sino también "la normativa en que lo encuadró". Con ese dictamen parecía que Matzkin iba indefectiblemente a juicio porque se le habían cerrado todas las puertas, pero el STJ le dio una mano.
Amado consiguió que los ministros del Superior Tribunal, Víctor Menéndez y Tomás Mustapich, abrieran un recurso de queja. Además de recurrir el procesamiento, Amado adujo que Fantini no tenía facultades para disponer un rechazo in límine y que debió trasladarle la casación a otro juez porque ya se había pronunciado anteriormente en la causa.

Todo nulo.
Menéndez y Mustapich dispusieron tres cosas: hacer lugar a la casación, declarar la nulidad de la resolución del T.I.P. del 14 de abril y todo lo actuado en consecuencia, y disponer que una de las dos salas de ese tribunal evalúe la admisibilidad de la impugnación.
Ambos le dieron la razón a Amado en la pulseada técnico-jurídica al sostener que la decisión de Fantini de "rechazar un recurso, independientemente de la errónea elección del impugnante, no se encuentra ubicada dentro de aquellas decisiones de mero trámite" para las que tiene competencia la presidencia del Tribunal de Impugnación, sino que se trata de "una decisión dentro del proceso, que resuelve una cuestión eminente para las partes".
Los ministros agregaron que la resolución objetada -y rechazada in límine-"tiene una conclusión trascendental para el proceso, que difiere de aquellas disposiciones para dar curso legal a las actuaciones y, en consecuencia, no debió ser analizada por la presidencia; sino por una de las salas de ese organismo jurisdiccional".
Jensen y Flores revisarán el "no" de Fantini a la apelación, aunque ello no implique que vayan a revocar el procesamiento. Las dos opciones abiertas son la confirmación o la revocatoria. En caso de que dispongan lo primero, Matzkin volvería a quedar muy cerca del juicio. Pero antes de que la sala se pronuncie, deberá escuchar la opinión del fiscal del TIP, Guillermo Sancho, algo que no ocurrirá hasta febrero, cuando finalice la feria judicial de verano.
El delito de amenazas se aplica al que "hiciere uso de amenazas para alarmar o amedrentar a una o más personas" y se reprime con una pena de prisión de seis meses a dos años. Como la sanción es mínima, es casi imposible que el ex funcionario menemista y duhaldista termine siendo juzgado oral y públicamente. En la peor de las hipótesis ante una condena firme, podría beneficiarse con una probation (o juicio a prueba).
Matzkin, que admitió haber comprado "La Guitarra" en 2.400.000 dólares, negó en todo momento haber amedrentado a Ponce. "Sería un insulto a mi inteligencia, con la edad que tengo, hacer algo por el estilo", afirmó.

 


'
'