Sabado 27 de abril 2024

Bilanski: “Lo de Macri es un cachivache”

Redacción 17/07/2023 - 07.47.hs

Tras la inauguración del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner, varias voces expresaron sus opiniones sobre la mega obra. Una de ellas fue la de Leonardo Bilanski, presidente de la Asociación de Empresarios y Empresarias Nacionales para el Desarrollo Argentino (ENAC), quien aseguró que “fue un destello de soberanía”. También apoyó la fórmula presidencial de Unión por la Patria (UxP) de Massa y Rossi y pidió por “políticos que no les tiemble el pulso de ir para adelante” en el desarrollo nacional.

 

En diálogo con Radio Noticias, Bilanski señaló que este “destello de soberanía” sucede en Argentina “cada tantos años” y es “la esperanza de que nuestra patria siempre tiene capacidades de alcanzar ese sueño de una Argentina desarrollada, con equidad, igualdad social, con inclusión. Lo vemos cada tanto cuando se alinean los planetas”.

 

Como primer hito mencionó la “nacionalización de YPF, después el despliegue sobre Vaca Muerta como fuente de recursos estratégicos de energía y el Gasoducto que viene de alguna manera a vehiculizar esa potencia que Argentina tiene guardada, oculta y dormida”. Sostuvo que para el desarrollo se necesita de capacidades para dinamizarla, pero “hoy la estamos viendo en cámara lenta y lo que necesitamos es que la dirigencia política, en su conjunto, no sea un impedimento para que estas fuerzas se dinamicen permanentemente”.

 

“Nosotros tenemos que ver un gasoducto inaugurarse por semestre en Argentina. Imaginate si este periodo de gestión de Alberto Fernández hubiese comenzado con la estatización de Vicentín y terminado con la inauguración del Gasoducto, eso sí hubiese sido un programa de desarrollo de punta a punta. Pero las fuerzas juegan y le impiden a los países subdesarrollados mostrar estos hitos históricos”, subrayó.

 

“El FMI no quería que se haga el Gasoducto, es casi una declaración de guerra que un organismo multilateral no quiera que un país se desarrolle. En términos capitalistas, es una declaración de guerra, lo que no veo es a nuestro ejército preparándose para el combate, estamos siempre en un modo de mendigos, mendigando un dólar por aquí, otro por allá para el próximo mes. Necesitamos una dirigencia con más coraje para demostrarle que se puede”, añadió.

 

-Los dos dirigentes que estaban durante la inauguración, como Sergio Massa y Agustín Rossi, ¿tienen esa impronta de defensa de los intereses nacionales y de avanzar en la defensa del patrimonio y de los recursos?

 

-Nuestra organización, internamente, ha resuelto apoyar a la fórmula de Sergio Massa y Agustín Rossi; creemos que este es el mejor marco que la política nos ofrece a los empresarios nacionales y pymes, al igual que la propuesta de Alberto Fernández y Cristina Fernández. Sin embargo, así como no alcanzó en el 2019, no va a alcanzar ahora con Massa y Rossi aún llegando al gobierno porque es más profunda la disputa en la que la Argentina se está perfilando. No es solo cuestión de nombres, si ves el currículum no hay dudas que la génesis de la nacionalización de las AFJP nació con Amado Boudou y Sergio Massa y no hay duda del historial de Agustín Rossi en el Congreso promoviendo derechos, ayudando a la estatización de YPF y otros tantos hitos que le permite tener una historia de coherencia en el hacer nacional. Necesitamos que se estructure un esquema de representación institucional que se encara al desarrollo y cuando eso pasa te encontrás con intereses que están en contraposición. Acá hay 302 empresas extranjeras que no quieren que el Gasoducto escupa gas a lo loco porque se van a ver perjudicadas…

 

-Son 302 empresas extranjeras que van a intentar parar el desarrollo de pymes nacionales, que es la competencia directa…

 

-De 500 empresas, tenemos la matriz extranjerizada con 302 empresas, no es la mitad más uno. Son un 3/5 las empresas grandes extranjeras y son las que nos proveen de gas licuado -hoy importado para que podamos producir energía-, de insumos estratégicos, petroquímicos, insumos de materias primas que se producen con energía en China, Estados Unidos. Tienen las garras clavadas en nuestro mercado interno; cuando tengamos la capacidad de producir esos insumos, tendrán que hacerse a un lado y dejarle aire al capitalismo nacional, que es lo que necesita Argentina para el desarrollo. Por lo tanto, van a jugar todas las fichas para que eso no suceda. El Gasoducto, por sí solo no resuelve nada, hay que ordenar el mercado detrás de un plan de desarrollo. Necesitamos las fuerzas productivas y de trabajo también jugando en línea. Hoy tenemos un Congreso tomado por la mitad por empresas extranjeras, entonces cómo levantas la mano para mejorar la vida de los argentinos si la mitad te juega en contra, ese es el desafío que la sociedad debe entender…

 

-¿Qué opinas de las declaraciones de Mauricio Macri de que con su gobierno ya estaba la financiación para el Gasoducto?

 

-Lo de Macri es un cachivache, cómo va a dejar la obra con la financiación si se fue corriendo a pedir 50 mil millones de dólares al FMI para su campaña política y encima perdió. Es falso y no tiene sentido común. Los agentes que están en Argentina y que trabajan para empresas extranjeras, se comportan de esta manera. La sociedad tiene que empezar a discernir, queremos que los argentinos demanden cosas de verdad, no puede haber un argentino sin agua potable, sin gas natural en su casa…

 

-En Añelo, por ejemplo, donde está Vaca Muerta no hay gas natural…

 

-Por eso Sergio Massa dijo que el primer pueblo a conectar va a ser el local, pero ese problema es histórico… El desarrollo debe ser inteligente, para qué ponemos las fábricas estratégicas donde la ponemos: ¿Para que ellos se lleven la materia prima o para que nuestro pueblo pueda recibir el bienestar de esa riqueza? Lo explicó muy bien Cristina: si el Gasoducto lo haces en función de lo que quieren las corporaciones, vas a trabajar para darle gas barato al mundo, si lo haces para que Argentina se desarrolle, vas a ver cómo el trabajo y la prosperidad en nuestra patria comienza a florecer.

 

Desarrollo.

 

Por último, Bilanski reiteró que lo del domingo “fue un destello de soberanía, necesitamos que se encienda la llama para esté prendido todos los días. Necesitamos políticos que no les tiemble el pulso de ir para adelante y la política tiene que mandar una señal: cualquiera que quiera ponerse adelante en la locomotora del desarrollo nacional que acepte las consecuencias de que se lo lleve puesto la locomotora, porque sino siempre estamos trabajando para la diplomacia de la familia judicial que impide que Argentina crezca y para la diplomacia extranjera que impide que nuestros recursos queden acá”.

 

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