Lunes 25 de marzo 2024

Equipo arqueológico inició trabajo

Redacción 03/11/2021 - 02.01.hs

Un equipo de arqueólogos e investigadores de la Universidad de Buenos Aires, a cargo de la doctora Alicia Tapia, comenzó a trabajar ayer en el predio de la Estancia La Malvina, para determinar si unos cimientos descubiertos durante tareas de nivelamiento de suelo pertenecieron a la primera casa de la ciudad, propiedad del coronel Remigio Gil, yerno del fundador Tomás Mason.

 

Virginia Pineau, docente investigadora de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires, integrante del equipo, le dijo a LA ARENA que "se está trabajando en la primera etapa, que tiene que ver con descubrir unas filas de cimientos, que fueron encontradas y presumiblemente podrían pertenecer a la primera casa construida, a fines del Siglo XIX, entre fines de la década del '80 y principios de los '90 de ese siglo".

 

Asimismo, Pineau señaló que "esto se encontró porque pasaron unas máquinas que estaban haciendo trabajos de nivelación de suelo, y al quedar al descubierto nos convocaron para venir a analizarlos. Nuestro equipo de trabajo estuvo haciendo tareas similares a éstas en el norte de la provincia, en Mariano Miró, y otros sitios de esa zona. Es bastante común que haciendo trabajos de este tipo, al remover la tierra, aparezcan cimientos como éstos, y ahí nos convocan para que podamos intervenir".

 

En esa línea, explicó que "lo que se intenta es confirmar si estos cimientos pertenecieron a la primera casa, que se construyó antes que el chalet. Era una casa chorizo, por la forma que tenía, con cuatro habitaciones, un comedor, una cocina, un baño y dos galerías. Era una casa bastante grande. Fue la primera que se hizo acá, y se demolió cuando se construyó el chalet de Mason". El equipo de la UBA trabajará en el lugar hasta el próximo viernes.

 

Tareas de limpieza.

 

El director de Turismo del municipio, José Minetto, explicó que los cimientos comenzaron a aflorar durante las tareas de limpieza que se hicieron el año pasado en el predio. "Nosotros inmediatamente hicimos la exposición en la Dirección de Patrimonio Cultural de la provincia, y a partir de ahí vino este grupo de arqueólogos a trabajar sobre el sitio", señaló.

 

Y agregó que "la idea es determinar la importancia que esto tiene para la historia de La Malvina, y de la ciudad en general. A partir de ahí, se verá cómo lo podemos proteger y mantener, para exponerlo a los visitantes y a las instituciones de la ciudad".

 

Asimismo, Minetto, destacó que de acuerdo a las primeras estimaciones, los cimientos serían anteriores a los conservados dentro del chalet que fue reconstruido y remodelado durante la intendencia de Néstor Alcala.

 

Finalmente, Minetto señaló que "de acuerdo a las recomendaciones de los propios arqueólogos, desde la intendencia se decidirá como procederemos a la conservación de todo esto".

 

El funcionario destacó que "esta gestión le ha dado prioridad a la reserva natural", y explicó que "en esa prioridad es que estamos haciendo toda esta clase de trabajos. Cuando hicimos la limpieza el año pasado y encontramos estos vestigios, lo primero que hicimos fue hablar en Cultura de provincia, que es la que tiene potestad de acuerdo a la Ley 2.083. A partir de ahí se desataron todas estas posibilidades de que venga un grupo de arqueólogos para trabajar en el sitio".

 

Tareas en Miró.

 

El equipo de Tapia realizó tareas en el sitio arqueológico Mariano Miró (Departamento Chapaleufú), donde se encuentran los restos de un pueblo rural que surgió en 1901 a la vera de la estación homónima del Ferrocarril Oeste.

 

Este pueblo fue habitado por casi 500 personas y contaba con negocios típicos de una ocupación comercial y agrícola-ganadera (almacenes de ramos generales, panadería, peluquería, entre otros), según indican las fuentes documentales.

 

Hacia 1911 sus habitantes abandonaron forzosamente el pueblo debido a que no les renovaron el contrato de arrendamiento del campo sobre el que se asentaba. A partir de ese momento, los dueños de la tierra lo destinaron a la explotación agropecuaria, motivo por el cual no quedaron estructuras en pie del efímero poblado.

 

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