La Ballena: vivir en un cuerpo gordo

The Whale narra la historia de Charlie, un profesor de literatura que dicta clases universitarias de modo online y sufre las secuelas de haber perdido a su pareja. La obesidad ocupa un lugar muy importante en la trama.

 

Daiana Caliva Gomez *

 

Magdalena Ledesma **

 

The Whale (La ballena) es una película dirigida por Darren Aronofsky que se estrenó en el año 2022 en Estados Unidos y es una adaptación de la obra de teatro de Samuel D. Hunter, quien además escribió el guión. En la música participan Rob Simonsen y en la fotografía Matthew Libatique. Este film fue producido por A24 y Protozoa Pictures. Los/as actores/actrices que forman parte del film son Brendan Fraser (Charlie), Sadie Sink (Ellie, la hija, quien además participó en Stranger Things), Hong Chau (Liz, la amiga), Ty Simpkins, Samantha Morton (Mary, ex esposa de Charlie), Sathya Sridharan (repartidor) y Jacey Sink.

 

Premiaciones.

 

La película fue estrenada durante el 2022 en el Festival de Cine de Venecia y desde allí ha recibido diversas nominaciones (mejor actor, mejor actriz de reparto, mejor make up and Hairstyling). Finalmente, de los premios más importantes, la película se llevó el 12 de marzo dos premios Oscars 2023: Mejor Actor y Mejor Maquillaje y Peinado. Y llegó al cine santarroseño el 16 de marzo.

 

Desarrollo.

 

El film narra la historia de Charlie -interpretado por Brendan Fraser-, un profesor de literatura que dicta clases universitarias de modo online y sufre en el presente las secuelas de haber perdido a su pareja (quién también fue su alumno).

 

El tema de la obesidad ocupa un lugar muy importante en la trama, dado que Charlie habita un cuerpo obeso (pesa más de 250 kg) y enfrenta un cuadro psicológico que incluye la depresión, los ataques de ansiedad y la culpa.

 

La historia transcurre en su departamento, ubicado en un pueblo de Estados Unidos en donde llueve de manera recurrente. Durante el film se juega con las luces bajas, el desorden de la casa adaptada a la obesidad del protagonista, el silencio y la soledad.

 

Debido a la obesidad y a la depresión, Charlie se encuentra en un estado crítico de salud, por lo que busca redimir y reparar la relación con su hija Ellie, con quien cortó el vínculo al separarse de su esposa y no veía hace ocho años.

 

Ella está enojada con el mundo y siente rencor por su padre. Al principio de la historia se la muestra como un ser despiadado ya que se burla de su apariencia en Facebook, subiendo fotos y diciendo que le produce asco y repugnancia el cuerpo de su padre. En este sentido, es importante observar como Charlie oculta su estado físico de la vista de los otros, no sale de su departamento, evita encontrarse con el chico del delivery y durante las clases mantiene la cámara de su computadora apagada.

 

El suicidio de su pareja, pareciera ser la razón principal por la que Charlie aumentó considerablemente de peso, lo que devino en una obesidad mórbida.

 

Comida y emociones.

 

Uno de los aspectos más chocantes e interesantes que visibiliza la historia es la relación que tiene el personaje con la comida. A medida que aparece el dolor, la ansiedad, la depresión o la soledad, Charlie acude a la comida chatarra de manera excesiva y con atracones. Es así, que se instala un círculo vicioso donde día a día se repiten las mismas condiciones: sentirse mal por los acontecimientos de la vida + comer para aliviar el dolor + sentir culpa por comer + volver a comer para apaciguar la emoción.

 

Sin embargo, cada vez que Charlie realiza actividades de la vida cotidiana como caminar, reír o llorar su vida corre peligro y el dolor en el pecho es un indicio de lo inevitable. En esos momentos, como quien sabe que puede morir, lee un ensayo escrito por su hija que adora mucho y que hace alusión a las ballenas y al libro Movidick. Su última voluntad es escuchar lo que dice este ensayo.

 

Un aspecto a destacar es la banda sonora de Rob Simonsen que integra el sonido del mar y sobre todo acompaña las escenas más impactantes, particularmente, aquellas donde Charlie aparece comiendo de manera desbordada y compulsiva hasta el hartazgo.

 

Por otro lado, Charlie recibe ayuda de su amiga Liz, quien además de ser enfermera y preocuparse por su salud es hermana de su pareja fallecida. Ambos atraviesan el dolor de la pérdida y su personaje exhibe las vivencialidades de aquellas personas que acompañan a otros en sus padecimientos. Asimismo, Liz protagoniza el enojo con su familia religiosa ya que considera que la muerte de su hermano se vincula a la opresión que realizó la iglesia con su homosexualidad.

 

Tanto Liz como Charlie son conscientes de que su vida corre peligro. Sin embargo, ella no lo juzga por su alimentación ni lo obliga a someterse a dietas para bajar de peso aunque le insiste en la importancia de concurrir al hospital y recibir atención médica para salvar su vida. Este aspecto es importante de remarcar ya que vivimos en una sociedad obsesionada con el peso y que nos invade con imágenes de cuerpos delgados, dietas y una alimentación baja en carbohidratos, sin entender los procesos internos que atraviesa una persona y su relación con la comida. Como se plantea al comienzo de este apartado no se puede perder de vista que la alimentación también está atravesada por las emociones y cuestiones psicológicas.

 

Por otro lado, Charlie es una persona que pide comida por delivery todos los días y se le suma el sedentarismo, ya que su propio peso le reduce considerablemente la movilidad. En ese sentido, la película exhibe lo complejo que puede resultar para una persona habitar un cuerpo obeso (recordemos que el protagonista pesa más de 250 kg). Empero, esto no significa que al personaje no le importe su salud ya que en una de las primeras escenas, luego de comer de su tazón, mientras trabaja en la computadora, saca una barra de chocolate del cajón de la cocina, la observa, se detiene y antes de masticarla vuelve a guardarla. Aunque luego, avanza sobre el impulso y come más de una.

 

A través de su personaje se realiza una hipérbole del estereotipo de persona gorda: come en exceso, sólo se alimenta de comida chatarra, es sedentaria y no realiza cambios para mejorar su vida. Sin embargo, por fuera de la pantalla, se debe analizar cada caso en particular, para no asociar necesariamente la gordura con enfermedad, ni asumir que todas las personas gordas se alimentan de manera poco saludable o no realizan actividad física, pues esto sería reproducir discursos gordo odiantes y pesocentristas. Por este motivo, en la película la conducta y la relación con la comida aparecen como un medio de castigo y un modo de soportar el dolor, ya sea a través del exceso en el consumo o en la falta. Los problemas de salud que pueden ocasionarle a un ser humano la falta de alimentos se reflejan mediante una de las escenas en la que Liz manifiesta que su hermano, debido a la depresión que sufría, dejó de comer y bajó considerablemente de peso.

 

Más allá de la comida.

 

La cuestión gay, el conservadurismo de la religión sobre la sexualidad y la presión de la familia en la vida de las personas también son temas a destacar en la trama. La aparición de Thomas en el departamento de Charlie, un joven que predica la palabra y que intenta ayudarlo a través de la salvación y el perdón de Dios, refuerza el trasfondo mítico o religioso de la historia. Sin embargo, a Charlie no le interesa ser salvado, pues no cree en la salvación y en parte es porque culpa a la religión del suicidio de Allan. Tampoco desea ir al hospital, a pesar de googlear sus síntomas y tener conciencia de su estado de salud crítico.

 

Es así que a lo largo del film son varios los temas que se entrelazan: aparecen el duelo, la depresión, la relación con los/as hijos/as, el abandono, los problemas con el alcohol, la religión, el amor y la amistad. Así como la literatura, la relación con Dios, el más allá, la salvación, la vida en la tierra, el cuerpo, la materialidad de la carne y la comida. La película abre la posibilidad de cuestionar (nos) y repensar sobre estos temas, por lo que resulta una interesante propuesta para los/as espectadores/as.

 

Por último, el hecho de que Brendan Fraser recibiera el premio Oscar a la mejor actuación es un reconocimiento muy merecido ya que su interpretación en este drama es sumamente conmovedora e impactante. El actor logra destacar al personaje que interpreta y transmitir, a gran parte de la audiencia, los sentimientos que emana la historia. En relación con lo vivido en la sala de cine, al finalizar la película, el ambiente fue de silencio, los sonidos que se escuchaban provenían de personas “moqueando”, como quien se congestiona al llorar. “Muy fuerte” murmuraban las voces de quienes comentaban por lo bajo la película.

 

* Licenciada en Sociología

 

** Profesora en Historia