Carlos Ischia con un pie afuera
El director técnico Carlos Ischia rechazó ayer una propuesta que le realizó la dirigencia de Boca Juniors para que se aleje del cargo a cambio de percibir parte del contrato que lo liga al club hasta el 31 de diciembre próximo. Según las fuentes consultadas por Télam, los dirigentes de Boca se reunieron ayer por la tarde con Ischia, a quien le trasladaron la inquietud de la comisión directiva en el sentido de que presente su dimisión, pero chocaron con la negativa total del entrenador, quien quiere cobrar todo, y dirigiendo.
Por lo tanto, Ischia continuará comandando al primer equipo al menos el domingo frente a Vélez, ya que es decisión de la dirigencia "respetar los contratos firmados y no despedir a nadie", según expresó el informante a Télam, aunque la verdadera razón sería económica. Ischia tiene contrato hasta fin de año y percibiría unos 700.000 dólares anuales, por lo que debido a que ya está próximo a cumplir un semestre le restarían pagar 350.000 dólares.
Así las cosas, lo que sostiene por ahora a Ischia es la evidencia de que el club no está como para pagar hoy en efectivo ese dinero, erogación que se sumaría a las dificultades financieras preexistentes y al lucro cesante que significó la temprana eliminación en la Copa, estimado en más de 2.600.000 dólares.
"Mi contrato es hasta diciembre y lo voy a respetar. Estoy muy dolido, con un dolor en el alma muy fuerte por lo del jueves. Teníamos mucha ilusión de ganar la Copa Libertadores, era nuestro gran objetivo", dijo Ischia en la conferencia de prensa que dio tras la práctica en Casa Amarilla, el día después de la derrota 1-0 ante Defensor Sporting que lo dejó con las manos vacías.
Ante este panorama, desde el campo dirigencial se espera ahora que sean los hinchas quienes, a modo de referéndum, en las próximas horas y principalmente el domingo, fijen posición y expresen hacia el entrenador un rechazo de tal calibre que lo obligue a repensar su posición y lo fuerce a dar el ansiado "paso al costado".
Una suerte de segunda instancia que se aguarda desde la conducción del club es que los futbolistas también jueguen su parte y lleven a Ischia hasta el convencimiento de que no cuenta con su respaldo y que se le hará imposible remontar la situación.
Reuniones.
Ayer, antes de comenzar el entrenamiento, se reunieron el manager Carlos Bianchi e Ischia y de esa charla el entrenador se llevó la convicción de que su antiguo amigo no torcerá su decisión y no aceptará ser su sucesor inmediato. Ya por la tarde, en la presidencia, los que se reunieron fueron el presidente Jorge Ameal, Bianchi y el vicepresidente de fútbol profesional, Marcelo London: lo primero que se supo a través de las paredes fue que el manager expresó que no hay que apresurarse, mientras los dos dirigentes están seguros de que hay "ciclo cumplido".
Al referirse a la situación del entrenador, Ameal aseguró que la dirigencia del club "es respetuosa de los contratos", y además confió que "de ninguna manera" esperaba la renuncia del director técnico tras la derrota del jueves, aunque horas más tarde le pidió la dimisión.
Candidatos.
Tan irreversible es la situación de Ischia, que en las últimas horas volvieron a circular con insistencia varios nombres como para reemplazarlo. Entre ellos, uno de los preferidos es el colombiano Jorge Bermúdez, a quien desde hace tiempo se viene mencionando y con quien ya había habido contactos. El Patrón reúne dos condiciones fundamentales: temperamento como para plantarse cara a cara ante cualquiera de sus ex compañeros y veneración por Bianchi, como para aceptar injerencias del manager y hasta asumir que se lo considere públicamente como un interino o un testaferro.
Otros candidatos que surgieron son Alfio "Coco" Basile, Gustavo Alfaro y Diego Cagna. Aunque se sabe que la preferencia de la mayoría de la dirigencia y de los hinchas es el propio Bianchi, quien por ahora no piensa en agarrar este "fierro caliente". (Télam y NA)
Artículos relacionados