Cuatro años de suspensión por golpear a un asistente
El futbolista Martín Florencio Sosa, del Club Asociación Deportiva Santa María de Santa Rosa, recibió una suspensión de cuatro años por haber agredido a un árbitro asistente en el partido que su equipo jugó ante El Elyon, por la última fecha de la fase zonal del Torneo de Primera B de la Liga Cultural de fútbol.
El encuentro se desarrolló el pasado 16 de junio en la cancha de sintético del Club La Barranca, donde El Elyon y Santa María igualaban 1 a 1 cuando ya se disputaba el segundo tiempo. A los 20 minutos de ese complemento, el árbitro Leandro Ojeda expulsó a Sosa por insultar y realizar gestos obscenos hacia el asistente Gonzalo Herrera Fassi, quien advirtió al principal sobre la situación.
"Lo expulso por emplear lenguaje ofensivo, grosero u obsceno y/o gestos de la misma naturaleza, a instancias de mi asistente N° 1, quien procede a informarme que el jugador N° 2 lo insultó a viva voz...", dice el informe arbitral al referirse a la decisión de mostrarle la roja al defensor de Santa María.
Y continúa explicando que, una vez expulsado, el futbolista "procedió a correr hacia el asistente y darle un golpe de puño en la mandíbula".
En ese contexto, Ojeda informó: "Encuentro suspendido por agresión física al asistente N° 1, ya que por el golpe de puño en la mandíbula cae el suelo y debe atenderlo el médico de encuentro, debido a que se encontraba mareado y no estaba apto psicológicamente para seguir el encuentro".
Ante esta situación, el Tribunal de Disciplina de la Liga Cultural le pidió un descargo al futbolista agresor, pero el jugador nunca lo presentó, por lo que se basó fundamentalmente en el informe arbitral para aplicar la sanción, que fue de cuatro años de suspensión para el violento. Además, se le dio por perdido el partido a la Asociación Santa María con el resultado El Elyon 1-Santa María 0.
El club sí.
Mientras que el futbolista agresor decidió no hacer el descargo ante el Tribunal de la Liga Cultural de fútbol, su club sí manifestó su repudio ante lo sucedido y pidió disculpas al árbitro asistente agredido.
"La Asociación Deportiva Santa María lamenta profundamente y manifiesta su más absoluto repudio por los hechos de violencia acontecidos recientemente entre nuestro Partido de Primera División por la 14ta Fecha del Torneo Oficial de Ascenso frente a El Elyon. Como así estar en completa disposición de las autoridades a fin de colaborar con lo sucedido", expresó el club en un comunicado.
"Esta Comisión Directiva se encuentra convencida, como ya lo hemos mencionado, que este es el camino correcto para mejorar el fútbol en nuestra provincia y seguirá trabajando incansablemente para erradicar definitivamente a todos los que atentan contra nuestro amado deporte", continuó.
"Además, queremos extender nuestras disculpas al Juez de Línea Gonzalo Herrera Fassi por cualquier tipo de violencia que haya sufrido en el marco de estos lamentables sucesos. Valoramos su importante labor y compromiso con el fútbol y su respectiva Escuela de Árbitros, y nos comprometemos a trabajar juntos para garantizar la seguridad y el respeto en los estadios que nos toque competir", cerró la nota, firmada por la Comisión Directiva.
Sanciones ejemplares.
En los considerandos de su fallo, el Tribunal de Disciplina de la Liga Cultural hizo hincapié en la necesidad de aplicar "sanciones ejemplares" ante los hechos violentos, continuando por la misma senda que se inició este mismo mes cuando le aplicó diez años de suspensión a un futbolista por agredir a un árbitro.
"Una vez más, reiteramos en relación a los hechos de violencia en el contexto de un partido de fútbol hay unanimidad de criterio en que dichos actos deben ser erradicados. Venimos de una reciente grave agresión a un árbitro, cuyo caso tuvo una amplia repercusión social, y que implicó una durísima sanción a consecuencia de ello (incluso le valió al agresor una acción judicial en su contra), y lamentablemente muchos siguen sin tomar conciencia, y la respuesta de este Tribunal debe ser acorde a este contexto actual", manifestó en el fallo.
"Tenemos la convicción de que hoy es necesario excluir por más tiempo de las canchas a los inadaptados violentos. Somos sabedores de que las sanciones duras por sí solas no erradican la violencia, pero nuestra tarea es sancionatoria y debemos abocarnos a ello, aunque como siempre seguimos instando a otros actores para que se involucren en el intento de educar y prevenir -siempre ofreciendo nuestra disposición- y no tener que llegar al hecho consumado. Claramente, es difícil que exista un consenso social sobre cual sería una sanción ejemplar, esa que tienda a provocar real conciencia (si es que se podría lograr) de que no se debe incurrir en ese tipo de acciones graves", continuó.
"Si bien en las últimas décadas se ha venido percibiendo una laxitud en la aplicación de penas, debemos subir la vara en la cuantía con la persuasión de que sea uno de los elementos (no el único, claro está) que contribuya a bajar los casos de agresiones graves a árbitros. Si bien estamos en tiempos en que han desaparecido las sanciones de 99 años que eran frecuentes en el pasado y que, según muchos, aseguraban preservar ciertos valores inmanentes a la práctica deportiva, con menor violencia, debemos ajustar algunos parámetros", aclaró el Tribunal.
Este mismo mes, el futbolista Enzo Figueredo, de Matadero por la Lealtad, había recibido una sanción de diez años por agredir brutalmente al árbitro Shair Salomón durante otro partido de la Primera B de la Liga Cultural. El lamentable episodio ocurrió el domingo 1 de junio en el estadio Nuevo Rancho Grande de General Belgrano, promediando el segundo tiempo del partido que Centro Oeste le ganaba a Matadero por la Lealtad 4 a 0 en el certamen de ascenso culturalista. Figueredo, al ser expulsado, agredió a Salomón, aún estando indefenso en el piso.
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