"Yo no quería ser el Papa"
El papa Francisco bromeó ayer con las dificultades para ser sumo pontífice y ante unos 9.000 estudiantes de colegios jesuitas de Italia y Albania congregados en el Vaticano admitió con franqueza: "no quería ser Papa". "¿Sabes lo que significa que una persona no se quiera tanto a sí misma? A una persona que quiera ser Papa Dios no la bendice. Yo no quise ser Papa", aseguró Francisco al responder la pregunta de un estudiante sobre si había aspirado a ser elegido para el trono de Pedro.
Durante el caluroso e informal encuentro, celebrado en el aula Pablo VI del Vaticano, el primer Papa jesuita de la historia respondió con sencillez y tono familiar a las preguntas de estudiantes de todas las edades, a los que instó a "ser libres", dijo. "No teman ir contra la corriente", advirtió Francisco, tras mencionar los valores fundamentales para un jesuita: "libertad y servicio. Libertad quiere decir saber reflexionar sobre lo que hacemos, saber evaluar lo que es malo y lo que es bueno y saber que las conductas que nos hacen crecer son siempre las buenas. Nosotros somos libres para el bien", aseguró.
Contra la soledad.
Interrogado sobre las razones por las que rechaza vivir en el fastuoso departamento papal del palacio apostólico dentro del Vaticano, el Papa argentino respondió primero bromeando "por razones psiquiátricas", pero luego confesó: "es un problema de personalidad, necesito vivir rodeado de gente, no puedo vivir solo".
Ante estudiantes y personalidades graduadas de las prestigiosas instituciones educativas de los jesuitas, Francisco denunció las estructuras económicas "injustas" que convierten a los hombres en "esclavos" e invitó a los católicos a comprometerse en la política, "una de las formas más elevadas de caridad, porque busca el bien común", explicó. "El mundo entero está en crisis", agregó, antes de ratificar que "ante todo, es una crisis de valores".
"Hoy la persona en sí no cuenta, lo que cuenta es el dinero", insistió al fustigar "a riqueza, la vanidad, el orgullo". Para el papa, es necesario "liberarse de las estructuras económicas y sociales que nos transforman en esclavos". Y aclaró también que participar en la vida política "es una obligación para los cristianos porque no podemos hacer como Pilatos y lavarnos las manos".
Venezuela.
Mientras tanto, el diputado opositor venezolano Edgar Zambrano anunció que viajará a El Vaticano para solicitar la mediación de Francisco y contribuir a un diálogo nacional entre las fuerzas políticas de Venezuela. Zambrano, del partido Acción Democrática, explicó que el martes 18 de junio llegará a la Santa Sede y conversará con el secretario de Relaciones, Dominique Mamberti. "Nuestra intención es solicitarle al santo padre su mediación ante el gobierno venezolano para procurar se produzca en nuestro país un paso vital en la construcción del diálogo democrático hacia la consolidación de la paz social", señaló. (Télam-NA)
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